viernes, 26 de febrero de 2010

Sobre el diseño web de noticias

Sobre el diseño web de la información trata este gran libro en el que no encontraréis qué menú hay que pinchar para hacer un enlace con un programa determinado o un listado de comandos html, sino conceptos, que es lo que realmente importa saber cuando se habla de diseño, tanto en papel como en internet. Por qué se hace algo, qué alternativas existen para dar forma a una noticia, qué hicieron otros antes y qué dejaron de hacer, qué tendencias han resultado las más idóneas en esta supuesta lucha entre especies que es la evolución de los medios de comunicación digitales... Como bien dice el título, "Evolución, tendencias y modelos en el diseño de webs de noticias", de este completísimo trabajo de Francisco Amaral (uno de los directores de Cases i Associats) y del también miembro del estudio Daniel Gimeno, editado por Sol90media, que es la división de publicaciones de este prestigioso estudio catalán de diseño periodístico con proyección internacional.



La edición del libro es tan soberbia como los contenidos, muy visual, lleno de ejemplos significativos (con un examen de 200 publicaciones digitales de todo el mundo y la aceleradísima evolución que han tenido en los últimos años), los textos cortos y contundentes, todo sustancia, todo grano y nada de paja... con puntos de vista de todo aquel que tiene algo que decir en este campo. Khoi Vinh, director de arte de la versión digital del The New York Times: "(...) según he podido comprobar, la actitud más extendida entre los diseñadores de diarios que pasan a la web es intentar aplicar en este medio las fórmulas que llevan tiempo usando en el papel: fijar los tamaños de texto, especificar las fuentes, ignorar la usabilidad y la funcionalidad. Quizás lo más significativo es que no abandonan la idea de que, algún día, los diarios web serán como los impresos. Por mi experiencia, están muy equivocados." Del prólogo de Matt Kelly, director de contenidos digitales del grupo Mirror, nos resulta difícil destacar alguna frase porque no tiene desperdicio desde el primero hasta el último de sus caracteres... "vivimos atrapados en las garras de una perversión económica", dice Kelly. "Los que menos invierten en internet son los que más ganan. Los que más están invirtiendo son los que menos recompensa reciben."






Mención aparte en lo relativo al aspecto visual del libro que comentamos son los espectaculares gráficos, por la información que contienen y por la manera de presentarla, del apartado denominado "Contextos".



Este libro que hoy os presentamos, y que nuestro muy querido amigo Carlos Pérez de Rozas, uno de los directores de Cases i Associats, ha tenido el detalle de enviarnos para que lo compartamos con vosotros, es una oportunísima "secuela" del que publicaron anteriormente, "Periodismo integrado", del que todavía tenemos pendiente hacer una exahustiva reseña porque se trata, según nuestro punto de vista, de una obra fundamental (de las publicadas en nuestro idioma) para entender lo que está sucediendo ahora en los procesos de integración de redacciones. La labor editorial de Cases con su editorialSol90media nos resulta casi tan importante como su reconocida trayectoria en el diseño periodístico.

miércoles, 24 de febrero de 2010

RedAcción!

Escenas de prensa en la red

Comenzamos hoy una nueva aventura en encajabaja.com. Todos los miembros de esta web somos grandes amantes del cine y las series (algunos más que otros) y teníamos ganas de comentar las grandes obras que se habían realizado sobre el mundillo de la prensa: 'Ciudadano Kane', 'El año que vivimos peligrosamente', 'Zodiac', 'Buenas noches y buena suerte' y un largo etcétera nos esperaban. Pero había un problema: ya estaba casi todo dicho. Es cierto que siempre se pueden encontrar puntos de vista nuevos e interesantes pero, ¿qué te podemos decir nosotros, simples maquetas, de una película que ya ha sido analizada por cientos de prestigiosos directores, actores, periodistas y escritores? Sólo hace falta que te des un paseo por la red y lo podrás confirmar.


Así que decidimos darle una vuelta de tuerca. ¿De qué va esto? Imagina. Estás en el cine viendo cualquier película de cualquier género y, de repente, un periodista, un vendedor de periódicos, un escritor de obituarios, un corrector con manguitos, un fotógrafo forman parte de la trama y sientes, de repente, una cercanía hacia ese personaje. Es más, en ocasiones, a alguno de ellos les pasan cosas que te han pasado a ti o te recuerdan a alguien de tu entorno laboral o reconoces situaciones similares con la actualidad tanto política como social que se despliegan en la pantalla mientras tu sonríes y la persona que ocupa el asiento de al lado del cine te mira de forma rara pensando de qué se ríe este loco.


!Qué malo era el periodista de la 'Jungla de cristal' y como me recordaba al jefe que tuve en tal periódico! Jude Law escribe obituarios en 'Closer'. Ja, ja. !Igualito que Martínez! El jefe de Clint Eastwood en 'Ejecución inminente' (James Wood) le ha dicho lo mismo que Peréz a Rodríguez el otro día en la máquina de cafe.


Quizá seamos nosotros los que nos hemos vuelto locos de estar tantas horas en una Redacción pero creemos que por ahí fuera existen también quienes comparte nuestra locura.





'The Wire'

De un tiempo a esta parte las series de televisión han conseguido un prestigio que les han hecho ocupar un puesto preponderante en el mundo del ocio. 'Los Soprano', 'Friends', 'Lost', han conseguido legiones de fans que esperan al día de su comienzo como adoradores de alguna secta suicida. Mucha culpa de esto la tiene la cadena por cable HBO (Home Box Office), el canal con más éxito y más calidad de los que se han dedicado al mundo de las series; 'Los Soprano', antes mencionada, 'Six feet under', 'Band of brother', 'Roma' y un larguísimo etcétera de series cuyos capítulos tienen una producción más costosa que muchas de las películas que vemos en salas de cine. Propiedad de Time Warner, comenzó su emisión en 1965 y en 1975 fue la primera en dar un combate de boxeo por satélite entre Muhammad Ali y Joe Frazer (maravilloso documental 'Thrilla in Manila').


El 2 de junio de 2002, HBO emitió el primer episodio de 'The Wire'. Escrita y producida por el periodista David Simon, la historia se desarrolla en Baltimore (Maryland) y trata sobre el día a día de unos policías con pocos medios, rodeados de burocracia, políticos corruptos y peligrosos narcotraficantes. Muchos de sus personajes se basan en personales reales de Baltimore y varios actores secundarios son amateurs.


En uno de los capítulos de la quinta temporada ('Mas por menos') hay muchas referencias a la situación complicada que viven los periódicos y la reducción de personal que se está llevando a cabo en sus corresponsalías. Y, entre discusiones de prensa, políticos y narcotraficantes encontramos la siguiente secuencia:



The Wire from encajabaja on Vimeo.



La primera vez que la vi tuve que dar al pause, pulsar atrás y volver a verla. No recuerdo las veces que me he despertado en mitad de la noche viendo la cara de un compañero que me decía: 'No te olvides cambiar la foto de la cuatro de nacional' o 'Mira si los datos de tal página están bien'. Salto de la cama, llamada al turno de noche y solución para, ya espabilado, acabar viendo la tele. O, también, estar en el otro extremo. Recibir la llamada de un compañero agobiadísimo pidiéndome que comprobara tal o cual cosa. Algunos que llevamos mucho tiempo en el turno de noche cuando vemos está escena sonreímos y el individuo que hay a nuestro lado piensa: 'De qué se ríe este loco'.

Quique Falcón

lunes, 22 de febrero de 2010

Diseñario 2.0 (XXI)

Difícil tarea tiene por delante nuestra recién inaugurada sección encajabajatv, dedicada a publicar vídeos de producción propia sobre nuestro quehacer, porque no disponemos de cámaras ocultas ni equipos de investigación lo suficientemente avanzados para materializar el proyecto soñado e imposible, quimérico, de poder entrevistar y hacer un pequeño documental sobre cómo trabajan los misteriosos miembros del comité de expertos de encajabaja encargados de la redacción de este Diseñario, suyo y vuestro, colectivo, irreverente y abierto a vuestra entusiasta participación a cerca del diseño periodístico y la prensa en general.





Enfrentadas. Coja un periódico (o revista). Ábralo. Mire a la izquierda. Una página, par. Mire a la derecha. Una página, impar. Mire las dos a la vez. Par e impar. Esto es enfrentadas, término que hace referencia a cuando dos páginas se muestran una frente a otra. Y los periódicos y revistas están llenos de ellas, de páginas enfrentadas, queremos decir. Un enfrentamiento cada dos páginas, para ser exactos. Incluso la portada tiene su página enfrentada, la contra-portada.
La suma de todas las páginas enfrentadas da como resultado el ritmo de lectura del periódico. No es lo mismo enfrentar dos páginas con un diseño idéntico a dos páginas con una maquetación distinta. Esta variedad en el diseño es lo que hace aumentar o disminuir el ritmo de la publicación. Por eso es muy importante saber, a la hora de diseñar una página cuál lleva enfrentada para ver cómo está hecha. En ocasiones se busca la similitud, incluso el mimetismo, pero, por lo general, se evita esa clonación, para que, al verlas enfrentadas, te indiquen, a primera vista, que estamos ante noticias distintas.
De ahí que en los departamentos de diseño no tengamos miedo a los enfrentamientos, por lo menos los de este tipo.

Engatillado. Dice el diccionario de la RAE que engatillado es el animal que tiene el pescuezo grueso y levantado por detrás... pero esta voz no trata sobre Fórmula 1 ni sobre nuestro flamante campeón asturiano piloto de Ferrari. En diseño se habla de engatillar elementos cuando van seguidos... a punto y seguido. Así de simple. Igual que en la construcción, se engatillan las piezas de metal unas con otras, enganchándolas y luego aplastando la unión para que queden prendidas, en diseño, muchas veces, los elementos se juntan en una sola línea y a eso se le conoce como engatillar. Para hablar de engatillados debemos contemplar dos elementos con jerarquías informativas distintas, claro está. Lo contrario no es engatillar, sino una línea de texto monda y lironda a punto y seguido. Pero cuando necestitamos destacar algún epígrade, incluir algún elemento que sirva para despiezar u organizar nuestro texto, aparecen los engatillados. ¿Cuándo engatillamos los elementos? El matiz es ciertamente sutil... Podemos decir sin miedo a equivocarnos, que el epígrafe engatillado posee menor jerarquía que el que va a punto y aparte. De hecho, los epígrafes dentro de epígrafes —¿ya os habéis perdido?— siempre son engatillados, mientras que el título principal luce sólo en su propia línea. Pero en el uso diario, no es menos cierto que los elementos se engatillan principalmente, por una cuestión de espacio. Ojo al matiz, que es importante... hablamos de espacio, no de estética... Engatillar supone que ganamos una línea al texto, ya que después del epígrafe no concedemos un punto y aparte. Y esto que parece trivial no lo es y mucho menos ahora, que el papel está caro y la paginación se reparte entre las secciones con cartilla de racionamiento. Si nos vemos en la necesidad de desmenuzar todo un texto y para ello vamos a utilizar un desguace seis, siete, diez veces, lo normal es que vaya engatillado. Y no precisamente, por restarle importancia. Al hacerlo así, los blancos que resultan entre párrafos no son excesivos y se consigue que el texto no se trocee en demasía. Al engatillar los pequeños títulos, ganamos legibilidad, se le concede cierta estabilidad a la página, pero lo más importante es que le hemos ganado al texto diez o doce líneas de más y eso, amigos míos, no tiene precio hoy en día.
Esto sucede siempre dentro del grueso de un texto, pero ¿y si usamos el engatillado para diferenciar dos tipos de elementos informativos distintos? En ese caso, el engatille no es sólo por razones de espacio, sino también informativas, jerárquicas... Engatillar los elementos ayuda a diferenciarlos morfológicamente unos de otros y eso siempre ha de ser motivo de diferenciación informativa. El caso más claro es el del pie de foto engatillado. Se titula la foto y a punto y seguido se desarrolla un pequeño texto, ni tan breve como un simple pie de foto ni tan amplio como un apoyo, en el que se comenta la información relacionada con la imagen. ¿Por qué engatillado y no titulado, a punto y aparte, sin más? Porque al engatillarlo relacionamos el texto del pie con las informaciones que lo acompañan. Y al titularlo, dar punto y aparte y comenzar una línea más abajo, concedemos al lector que el pie de foto tiene una independecia informativa del resto de elementos que lo preceden en la página. Por eso, los maquetadores siempre repetimos, concienzudos, ante la presencia de una imagen con texto en la página: "¿Titulado o engatillado?" Y nos asombra que todavía hoy, muchos redactores contesten "¿qué mas da?" Pues mira, da. Da bastante. Da tanto que me ofende volver a explicarlo... Aunque eso en la redacción de EL MUNDO pasa menos que en otros lados, porque, por las deformaciones profesionales que tienen estos menesteres, al pie engatillado muchos lo conocemos como "pie ciclis". Pensaréis que nos hemos vuelto tontos. La explicación la tiene uno de los primeros catálogos con páginas de uno de los primeros diseños del periódico. En él, Laurent Fignon, el gran ciclista francés (imagináos la de tiempo que hace de esto...) ascendía, coleta rubia y gafitas en ristre, con cara de sufrimiento en blanco y negro... Y la gente se quedó con lo del ciclista... Y hasta hoy...


Entrevista. Uno de los géneros clásicos del periodismo, con un futuro, además, muy prometedor. No hay nuevo medio de comunicación analógico o digital, electrónico o protónico que no las incluya también. En este caso nadie parece haberse planteado el manido argumento modernoide de que "esto es una cosa antigua, ya superada, que nosotros nos vamos a encargar de eliminar", como sucede cada vez que alguien con poder y aires de avanzado mal entendidos, ambos, el poder y lo avanzado, decide dejar su impronta y a falta de crear algo, que es lo verdaderamente difícil y lo que en realidad deja impronta, pues se limitar a "superar cosas antiguas".
Creemos que no hace falta decir que una entrevista es, esencialmente, una serie de preguntas que un periodista formula a una persona. Con interés periodístico o incluso sin él. Tampoco hay que recordar aquí los más que repetidos consejos sobre la importancia del entrevistado y no del entrevistador y demás; o que nunca debe venderse como entrevista, con sus preguntas y respuestas, aquello que no lo es, como una rueda de prensa, o un refrito de declaraciones tomadas de allá y aquí, y que nunca fueron contestadas a preguntas nuestras... Como todo esto damos por hecho que se da por hecho, y por sabido, nos limitaremos a señalar que desde el punto de vista del diseño periodístico, la entrevista suele llevar destacado en tipografía distinta y/o en color, el nombre y la identificación del personaje entrevistado. El título suele ser la declaración más interesante de ese texto, que está estructurado como un diálogo en el que cada párrafo comienza con la palabra "pregunta" (cuando se refiere a una pregunta, parece obvio, ¿no?) y "respuesta" (siguiendo el mismo principio aplicado a la respuesta), o bien por el nombre del medio y el nombre de quien responde, todo esto en iniciales después de la primera vez para no ponernos pesados.
Una caricatura, o dibujo "psicológico", o una buena fotografía que indague en la personalidad del entrevistado, siguen siendo las mejores opciones para ilustrar una entrevista... hasta que llegue el innovador de turno, sí, el del comienzo de esta voz, para "apostar por alguna idea nueva", o por alguna contraidea más bien.


Entregas anteriores del Diseñario 2.0:

Diseñario 2.0 (I): adelanto-alcance.
Diseñario 2.0 (II): apaisado-arte final.
Diseñario 2.0 (III): aspirina-autoedición.
Diseñario 2.0 (IV): background-billete.
Diseñario 2.0 (V): bobina-breves.
Diseñario 2.0 (VI): cabecear-camisa.
Diseñario 2.0 (VII): carácter-carpintero.
Diseñario 2.0 (VIII): catálogo-chillón.
Diseñario 2.0 (IX): chiste-cierre.
Diseñario 2.0 (X): clavo-colchón.
Diseñario 2.0 (XI): columpiarse-comerse.
Diseñario 2.0 (XII): compacto-corresponsal.
Diseñario 2.0 (XIII): corte-crítica.
Diseñario 2.0 (XIV): crisis-crónica.
Diseñario 2.0 (XV): cuadratín-deformar.
Diseñario 2.0 (XVI): desguace-directo.
Diseñario 2.0 (XVII): director-documentación.
Diseñario 2.0 (XVIII): editorial-EGM.
Diseñario 2.0 (XIX): Elzevir-empacar.
Diseñario 2.0 (XX): empasillado-encuadrar.

jueves, 18 de febrero de 2010

encajabajatv

Dispuestos siempre a perseguir la mejor manera de compartir lo que hacemos, cómo lo hacemos y por qué, estrenamos hoy encajabajatv, un canal de vídeos en youtube y vimeo. En ambos contenedores, iremos colgando los vídeos que vayamos elaborando en el blog, ya sean sobre conferencias, coberturas especiales o cualquier tipo de vídeo relacionado con lo nuestro: la prensa y el diseño, y siempre bajo la premisa que aparecerá próximamente en nuestra cabecera. Es decir, Maquetar es informar.

Estrenamos este canal (en el que también podéis encontrar todos los vídeos que hemos hechos hasta ahora) con un vídeo de la cobertura que hizo el departamento de Diseño de El Mundo sobre los primeros días de la tragedia de Haití. Y lo hacemos con la esperanza de que la ayuda siga llegando ahora, cuando se corre el riesgo del olvido, tanto como en los primeros días.




El diseño y maquetación de páginas es un trabajo de toda la sección de Diseño del diario El Mundo. La selección y edición de vídeo es de Luis Blasco; y hemos utilizado como tema musical "Noche de dos", compuesto e interpretado por Quique Falcón (piano) y Mario Benito (guitarras).


Podéis verlo también en Vimeo.

martes, 16 de febrero de 2010

Vuelven las Jornadas del CEU

Vuelven un año más las Jornadas sobre Fotoperiodismo, Edición y Diseño en Prensa que organiza la Universidad San Pablo-CEU de Madrid. En esta su ya decimotercera edición (y se dice pronto, pero son muchos años y muchísimo trabajo dentro de un panorama en el que no había absolutamente nada en lo relativo al diseño periodístico en Madrid, labor incansable de Pedro Pérez Cuadrado junto a Laura González Díez, que ahora continúa con el resto del Departamento de Comunicación Audiovisual y Nuevas Tecnologías pero sin nuestro "maestro" de maquetas, y muy querido amigo, quien cambió sus aulas por las de la Universidad Rey Juan Carlos del sur de Madrid), decimotercera edición, decíamos tras el enorme paréntesis, en la que han cambiado su nombre por el de "Jornadas de Fotografía, Edición y Diseño" porque sus organizadores consideran que "tanto el diseño como la imagen (fotografía, ilustración e infografía) son disciplinas transversales que no son exclusivas del ámbito del Periodismo (impreso y digital) sino que están presentes en todos los Grados, también en Comunicación Audiovisual y también en Publicidad".



En lo que a nosotros respecta, las Jornadas de este año son especiales puesto que hemos cambiado nuestra presencia durante muchas de sus ediciones en el lado de los asistentes por el otro lado, el de los ponentes, al haber sido invitados a abrirlas, todo un honor y una responsabilidad. Nuestro compañero de blog Mario Benito nos representará llevando a los alumnos una versión actualizada con nuevas páginas y algunos casos prácticos más de "Maquetar es informar", donde mostramos y explicamos nuestro trabajo, cómo lo hacemos y porqué lo hacemos, destacando su vertiente de especialización periodística. Además, esa primera mañana contará con una conferencia que promete ser más que interesante porque abordará el ambicioso proyecto de diseño de todos los idarios del grupo Vocento, a cargo de Paco Trujillo, jefe de arte de la Redacción Central de Vocento, y de Benjamín Lana, director de Innovación y Medios Regionales del grupo, titulada "El viaje de los diarios de Vocento en busca de su ADN".

La tarde del primer día está dedicada a la infografía, con la participación de Pablo M. Ramírez (consultor y fundador de "Sin palabras") y del ilustrador e infógrafo Julián de Velasco. El segundo día es para la fotografía con Eduardo Momeñe y Alberto Yagüe.

Las Jornadas tendrán lugar los días 3 y 4 de marzo en el Salón de Grados de esta Universidad (c/ Julián Romea, 23) y aquí os dejamos un enlace con el programa completo donde además se puede encontrar toda la información para inscribirse.

lunes, 15 de febrero de 2010

Diseñario 2.0 (XX)

En este mundo incierto existen todavía quienes se refugian en un extraño anonimato y, perdidos, alejados de todo posible reconocimiento, sabiendo además que intentan encuadrar, o poner límites, a una obra que además no los tiene, siguen adelante hacia el infinito, y más allá. Por otro lado, estamos casi seguros de que si la divertidísima, y originalísima, gala de los Premios Goya entregase uno de ellos al mejor diseñario, y lo ganasen quienes escriben cada semana para nosotros esta obra colectiva, irreverente y abierta a vuestra participación sobre el diseño periodístico y la prensa en general, es bastante probable que los enigmáticos miembros del comité de expertos encargados de su redacción no se dieran a conocer ni siquiera para subir, empasillados por los aplausos de todos los asistentes puestos en pie, a recoger el premio. Con todos ustedes, una nueva entrega del Diseñario.





Empasillado. En los periódicos la información no sólo se lee, sino que también se ve. Esto quiere decir que la forma, tantas veces caprichosa, no lo es tanto cuando obedece a un contenido. Una manera de destacar una información, de resaltar su singularidad, consiste en variar su forma, su morfología, haciendo que resalte en medio de un texto de características más ordinarias...
Se conocen como empasillados a los elementos que se encuentran confinados entre dos trazos generalmente horizontales, de manera que la impresión óptica es la de un texto preso en un estrecho pasillo. De ahí, ¡oh, universo inexcrutable! su desconcertante nomenclatura. Los empasillados, por su singular puesta en página, se utilizan para destacar pequeños títulos, epígrafes que aún con afán de título secundario, digamos que no consiguen alcanzar ese rango. ¿Cómo metemos un título dentro de un texto sin llegar a tener la importancia de un segundo título, pero destacándolo de manera que no pase por simple ladillo? Empasillalo. Y con tan simple maniobra, no sólo solucionas la difícil papeleta de contentar a un redactor con pretensiones pero sin recursos, sino que, lo más importante, enriqueces los niveles de lectura de la página. Ya no sólo contiene un primer nivel de lectura, aquel que defienden los titulares, subtítulos y apoyos, sino que engrosan los niveles secundarios, esos que competen a sumarios, ladillos, etc. De un simple vistazo, consigues localizar entre la información una pequeña llamada sobre un tema, tangencial o no tanto, que o bien puede llamar a otra página (en los empasillados de la portada) o bien aumentan la jerarquía de algún ladillo, dando fe de su mayor importancia. No es lo mismo un ladillo en mitad de un texto que una serie de empasillados, con mucha más información y mucho más valorada...
Esto por lo que se refiere al diseño. Porque a los maquetadores también se nos puede empasillar. Esto ocurre con más frecuencia de lo que nos gustaría y se da cuando los redactores, ansiosos por encontrar soluciones a sus problemas, te asaltan en medio del pasillo, cuando estás en la fila para sacar un café, o en el angosto repartidor que da acceso al ascensor. Generalmente te sitian contra la pared, o te cierran el paso hacia el garaje (de ahí el empasillamiento) o en casos extremos, intentan entrar contigo en el baño, en una clara violación de tu intimidad...de tránsito. Lo hacen desbordados por la presión, animados por alguna ocurrencia de última hora, en una clara muestra de imprudencia, porque no hay especie más peligrosa en el reino animal que un maquetador que se siente acorralado. Capaces de cualquier barbaridad en esas situaciones límite, no es la primera vez que se han visto en algún periódico redactores huyendo despavoridos, con las ropas hechas jirones, mientras al fondo, un maquetador con los ojos inyectados en sangre aulla: "¡¡¡¡Me estoy tomando un café, por Dios!!!! ¡¡¡¡Son mis dos minutos libres del díaaaa!!!"

Encuadrar. Delimitar el espacio de una fotografía, decidir qué va a aparecer en ella y qué se va a quedar fuera. Es "el escenario de la imagen", según la mejor definición impresa que hemos encontrado ("El ojo del fotógrafo", Michael Freeman). No es un tecnicismo cualquiera, ni uno más de entre los muchos que gasta la fotografía, porque se trata ni más ni menos del elemento que en la mayor parte de los casos diferencia la foto de un pofesional o un aficionado avanzado de la que podríamos denominar "foto del cuñado". Sí, ese que se compró en Andorra o Canarias un mamotreto de muchos millones de píxeles con su funda incorporada y se dedica ahora a cortar pies, por los tobillos, nada de planos medios americanos o de la nacionalidad que sea, mientras el cielo, o una pared acribillada con las sombras del flash, o la nada, ocupan dos terceras partes de la imagen. El lo llama "enfocar", a encuadrar, tal vez porque de que el motivo fotografiado esté en foco, nítido en el plano de la imagen, ya se encarga la cámara, a duras penas, autofocando si nos permiten la licencia.
El encuadre está muy relacionado con el corte que se le quiera dar a las imágenes para ser impresas, y de cuyos aspectos ya nos ocupamos en la voz correspondiente. Pero si bien el corte es una intervención en una imagen ya realizada, el encuadre es de lo que nos ocupamos, o deberíamos, cuando estamos tomando la fotografía, y para lo que conviene mirar no sólo la figura central que queremos inmortalizar sino todo el rectangulito de nuestro visor para ver así todo lo que allí aparece, cómo está organizado (eso sería la composición) y dónde están los límites, dónde empieza y termina la imagen. Aspectos todos ellos sobre los que el fotógrafo tiene que decidir y que no lo hace ni hará ninguna cámara por sí sola, analógica, digital o de rayos X.


Entregas anteriores del Diseñario 2.0:

Diseñario 2.0 (I): adelanto-alcance.
Diseñario 2.0 (II): apaisado-arte final.
Diseñario 2.0 (III): aspirina-autoedición.
Diseñario 2.0 (IV): background-billete.
Diseñario 2.0 (V): bobina-breves.
Diseñario 2.0 (VI): cabecear-camisa.
Diseñario 2.0 (VII): carácter-carpintero.
Diseñario 2.0 (VIII): catálogo-chillón.
Diseñario 2.0 (IX): chiste-cierre.
Diseñario 2.0 (X): clavo-colchón.
Diseñario 2.0 (XI): columpiarse-comerse.
Diseñario 2.0 (XII): compacto-corresponsal.
Diseñario 2.0 (XIII): corte-crítica.
Diseñario 2.0 (XIV): crisis-crónica.
Diseñario 2.0 (XV): cuadratín-deformar.
Diseñario 2.0 (XVI): desguace-directo.
Diseñario 2.0 (XVII): director-documentación.
Diseñario 2.0 (XVIII): editorial-EGM.
Diseñario 2.0 (XIX): Elzevir-empacar.

viernes, 12 de febrero de 2010

Revista de blogs (IX)

Cada día son más los blogs que aparecen en Internet, pero no por ello todos merecen ser destacados. Sin embargo, en esta suerte de Revista de prensa (cibernética) os traemos una nueva entrega de los blogs, personales o no, que merecen nuestra atención.




En la boca del lobo. En uno de sus últimos post, el periodista Ramón Lobo, celebra el primer cumpleaños desde que sus amigos le convencieran para utilizar el blog como herramienta de comunicación. Y nosotros le damos las gracias a sus amigos por animarle y a él por ser uno de los diarios personales de visita obligada dentro del maremágnum de [des]información en el que se ha convertido internet. Esta es, sin duda, la única boca del lobo en la que no nos da miedo entrar. Y uno de los mejores blogs periodísticos en lengua castellana. Por ello, pasa a nuestra galería de imprescindibles.





Periodista (y) colegiado. Ha sido trencilla y es periodista. Si sumamos esas dos facetas, criticadas por sistema, nace este blog en el que nuestro compañero y, sin embargo amigo, Alberto D. Prieto desgrana la polémica futbolera generada por los hombres de negro. Como un padre nuestro, recita la norma para decir qué es penalti, por qué es fuera de juego y si la expulsión es merecida o no. Nosotros, aún así, seguimos protestando y gritamos: "Ha sido el seis, penalti y expulsión".





Malaprensa Llevan ya un tiempo descubriendo a los Pepé Gotera y Otilio de los medios impresos. Destapando aquellas chapuzas y errores que deberían avergonzar a sus responsables. Por eso, no tienen piedad en darnos a conocer titulares erróneos, estadísticas malinterpretadas (conscientemente o no) e incluso errores becariales de esos que te alegran el café de la mañana. Josu Mezo, su editor, tiene tanta (y tan necesaria) "mala leche" que tiene hasta sus propios premios. Todo para convertir la malaprensa en buena.

miércoles, 10 de febrero de 2010

Maquetar es informar (y V)

Finaliza con esta entrega la serie de vídeos que os hemos estado ofreciendo sobre la conferencia "Maquetar es informar", que a cargo de nuestro compañero de blog Mario Benito, inauguró las I Jornadas de Diseño en la Sociedad de la Información organizadas por la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid. Terminamos con el apartado titulado "Equilibrios de poder", donde explicamos la curiosa contradicción que se da en la redacción de un periódico donde algunos periodistas no consideran periodística nuestra función... pero todos ellos quieren controlarla. Todo el mundo "sabe" de diseño.


Maquetar es Informar (y V) from encajabaja on Vimeo.



Para nosotros, la tensión dialéctica entre las distintas secciones y la sección de diseño es necesaria; de la confrontación de criterios periodísticos saldrán las mejores páginas cada día, mientras que de la imposición arbitraria y sin criterio del "cambia esta página porque a mí no me gusta", propia generalmente de quienes tienen poder pero no saben, lo más probable es que el resultado sea mediocre.

Como en las anteriores entregas, la toma de imágenes corrió a cargo de Quique Falcón y Nacho Arbalejo; y la edición de vídeo es de nuestro compañero de blog Quique Falcón.

Terminamos agradeciendo una vez más, porque es para nosotros muy importante el que un foro así nos haya permitido tener una voz, aunque sea en minúsculas, la oportunidad que nos dio la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, y muy especialmente a nuestro querido maestro y amigo Pedro Pérez Cuadrado, organizador de las Jornadas, que nos invitó a que participáramos en ellas contando, y mostrando, nuestra manera de entender el diseño periodístico. Gracias a él nos hemos dado cuenta además, de que "Maquetar es informar" es el lema de este blog, y así figurará en un próximo rediseño de nuestra cabecera.
Gracias también tanto a los alumnos que tuvieron la paciencia de escucharnos y hacernos preguntas, como a quienes habéis seguido la conferencia en diferido a través del blog.


Anteriores entregas
Maquetar es informar (I)
Maquetar es informar (II)
Maquetar es informar (III)
Maquetar es informar (IV)

martes, 9 de febrero de 2010

Besos y almíbar

Probablemente esta sea la semana más edulcorada de todo el año. Los grandes (y no tan grandes) comercios ponen en marcha su maquinaria para que los novios y novias, maridos y mujeres, amantes y amados se estiren y tengan un detalle el próximo domingo 14 de febrero. Sí, el día de San Valentín (tranquilo, todavía tienes tiempo para comprar algo). Y, probablemente, esta canción de The Beatles, sea la que más suene durante estos siete días.



Es el espíritu del Día de San Valentín, del que difícilmente la gente puede abstraerse. Y nosotros, gente de espíritu débil cuando de amor se trata, hemos caído. Sí, porque si no, no tiene explicación que diéramos no una, ni dos, sino !tres fotografías de besos! en una misma sección.

Y tenemos que reconocer que lo hemos hecho aposta. Ana Alonso, de Internacional, y un servidor lo decidíamos a medida que diseñábamos la sección de Mundo. Con la primera foto ni lo pensamos, quedaba perfecta; con la segunda, el almíbar ya asomaba un poco y la coincidencia besucona nos hacía gracia; pero con la tercera lo pensamos un poco y decidimos apostarlo todo a rojo corazón, a pesar de las comprensibles dudas de Concha, editora gráfica. "Es la semana de San Valentín", teníamos la excusa perfecta.

Tres besos, tres, en las páginas de Mundo

lunes, 8 de febrero de 2010

Diseñario 2.0 (XIX)

Si los miembros del muy secreto comité de expertos de encajabaja encargados del Diseñario fuesen capaces de salir de su retiro para echar un vistazo a la difícil situación económica que vivimos, a la que esta semana todo el mundo mundial parece haberse puesto de acuerdo para hundir un poquito más con la ayuda inestimable del Gobierno y la "constructiva" oposición, (genial, una vez más, la viñeta del genial Ricardo el pasado martes, 2 de febrero) seguramente llegarían a la sabia conclusión, sabios como son, de que este país está necesitando un gobierno de concentración en el que participen todos, o al menos un gran acuerdo de todas las fuerzas políticas, sindicatos, empresarios... de todos y cada uno de los ciudadanos juntos, sin importar la ideología de cada uno, para sacar esto adelante... pero mucho nos tememos que no vamos a lograr ni siquiera que se pongan de acuerdo para salir a echar ese vistazo y tengamos que contentarnos con las entregas semanales de esta obra suya, nuestra y vuestra, colectiva, irreverente y abierta, sobre el diseño periodístico y la prensa en general.





Elzevir. Familia de prestigiosos impresores y editores de los Países Bajos, cuya actividad transcurrió entre 1580 y 1712. En el siglo XVII, cuando fallece el fundador Luis Elzevir (originario de Lovaina, pero que estableció la imprenta en Leyden, Holanda) deja el negocio a sus nueve hijos que lo extienden con sucursales en La Haya, Utrech y Amsterdam. En 1620 obtuvieron el título de Impresores de la Universidad y entre 1622 y 1652 alcanzaron su máximo esplendor. Aunque al parecer las técnicas comerciales de estos señores combinaban ediciones en pequeño formato precursoras del ahora llamado libro de bolsillo con técnicas que pasaban por alto cualquier consideración ética con tal de vender (cambiar las portadas de los libros para hacer pasar por nuevos ediciones sobrantes, o hacer modificaciones mínimas para burlar a la SGAE de turno, por ejemplo), los libros editados por ellos entonces son apreciadísimos por su calidad y reciben el nombre de elzevirianos o elzevirios.
Además, con el nombre de elzeviriano se denomina todo un estilo de tipos de letra herederos de los que diseñó Van Dyck para los Elzevir en este siglo XVII. Tipos de ojo medio elevado, de amplios contrastes y remates robustos que se alejaban de la caligrafía manual mucho más que sus antecesores renacentistas italianos y luego franceses.
Como elzevirianos (o de estilo antiguo) se llama a los números del tamaño del texto en minúsculas, elegante y refinada manera de componerlos en libros con aire clásico, en vez de con la acostumbrada altura de las mayúsculas como hacemos en la mayor parte de los impresos, incluidos nuestros descuidados periódicos.

Embargo. Embargo: Palabra de múltiples significados en el mundo de la prensa.
1. Sensación fisico/mental que te invade en el momento de hacer una página digna de mención o, como se dice en estos casos, cojonuda. Se puede reconocer a un ser embargado por la emoción de una maqueta bien hecha, cuando parece asomar una lagrimillla por uno de sus ojos o su sonrisa ilumina su cara. Al contrario que un embargo económico, que viene de sopetón, sin aviso y como un bofetón en la cara, este embargo maquetil va creciendo poco a poco a medida que la página es concebida... También se puede reconocer a un ser embargado por alzar los brazos por sorpresa y exclamar "¡Sí!" La gente de alrededor le mira extraño, pero cuando ven la maqueta también resultan embargados... por la emoción, insistimos.
2. Retraso en la difusión de la portada de un periódico. El motivo suele ser evitar romper una exclusiva. Imagínate que se te olvida embargar la portada y la competencia se entera, gracias al típico locutor radiofónico, del temazo que llevas al día siguiente. Si no se embarga esa portada, se puede producir la tercera acepción de embargo (ver punto siguiente).
También se pueden embargar noticias de agencias, que las mandan por la línea con la advertencia de que no se pueden publicar hasta una determinada fecha. Casi siempre se respeta este embargo, aunque siempre hay alguno que, tras pretender publicarla, dice... "Ah, no había visto que está embargada."
3. Retención en la nómina o incautación de bienes por parte de los acreedores del deudor al no poder hacer frente a una deuda. A esta situación se puede llegar por muchas vías, una de ellas la anteriormente citada (la de no respetar el embargo de una portada=bronca=despido=embargo).
La otra, viene derivada del cuasi embargo que provoca acabar una maqueta y que justo en el último momento se caiga el sistema. La reacción inmediata es rabia e incredulidad, que puede derivar en la destrucción del costosísimo equipo empleado. Y de ahí, al embargo, puede haber un paso.
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Empacar. O empaquetar. Hacer paquetes, claro. De periódicos. Aproximadamente de 25 ejemplares cada paquete. Esos paquetes que habréis visto lanzar desde furgonetas a los quioscos en alguna película americana. Se hacen en la propia rotativa y para los no iniciados resultan extremadamente difíciles de abrir porque los periodicos van envueltos con dos durísimas cintas de plástico que sólo se pueden cortar con unas tijeras que nunca están a mano y porque se desconoce el secreto de cómo se abren. Tan fácil. Sin ninguna herramienta ni accesorio. Con las manos. Pero, eso sí, conocimiento secreto que sólo se puede adquirir con años de trabajo en la prensa...


Entregas anteriores del Diseñario 2.0:

Diseñario 2.0 (I): adelanto-alcance.
Diseñario 2.0 (II): apaisado-arte final.
Diseñario 2.0 (III): aspirina-autoedición.
Diseñario 2.0 (IV): background-billete.
Diseñario 2.0 (V): bobina-breves.
Diseñario 2.0 (VI): cabecear-camisa.
Diseñario 2.0 (VII): carácter-carpintero.
Diseñario 2.0 (VIII): catálogo-chillón.
Diseñario 2.0 (IX): chiste-cierre.
Diseñario 2.0 (X): clavo-colchón.
Diseñario 2.0 (XI): columpiarse-comerse.
Diseñario 2.0 (XII): compacto-corresponsal.
Diseñario 2.0 (XIII): corte-crítica.
Diseñario 2.0 (XIV): crisis-crónica.
Diseñario 2.0 (XV): cuadratín-deformar.
Diseñario 2.0 (XVI): desguace-directo.
Diseñario 2.0 (XVII): director-documentación.
Diseñario 2.0 (XVIII): editorial-EGM.

miércoles, 3 de febrero de 2010

Maquetar es informar (IV)

Seguimos hablando del proceso degenerativo, la evolución de las páginas en el día a día a partir de un prototipo, siempre al servicio de la información. En este apartado de la conferencia "Maquetar es informar" de nuestro compañero de blog Mario Benito que abrió las I Jornadas de Diseño en la Sociedad de la Información organizadas por Pedro Pérez Cuadrado, en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, analizamos casos que afectan al denominado ritmo de lectura, muy importante en una publicación impresa.


Maquetar es informar (IV). El proceso degenerativo II from encajabaja on Vimeo.



Ritmo de lectura que se refiere a las relaciones de unas páginas con las anteriores y posteriores, dentro de una sección determinada, e incluso dentro de la publicación completa. Como habéis visto, en ocasiones modificar una página implica modificar otras que se ven afectadas, y a veces incluso toda la sección, como en el caso de Deportes con el que ilustramos el final de este "proceso degenerativo".

La toma de imágenes corrió a cargo de Quique Falcón y Nacho Arbalejo; y la edición de vídeo es de nuestro compañero de blog Quique Falcón.

La próxima semana, la última entrega de "Maquetar es informar".


Anteriores entregas
Maquetar es informar (I)
Maquetar es informar (II)
Maquetar es informar (III)




Actualización:
Hablando de maquetadores, os enlazamos un magnífico y divertidísimo artículo del blog "El mejillón suicida" titulado "Maquetadores, ¿gremio o secta aniquiladora de la especie humana?" en el que dan su punto de vista sobre nuestra curiosa profesión. Hemos intentado desde hace ya tiempo, no creáis, que alguien desde "el otro lado", es decir un redactor, escribiera un texto de este estilo y contenido para nosotros, pero hasta el momento nadie de los varios miles de ellos que conocemos se ha atrevido. Algo de verdad tendrá pues el valiente artículo que desde aquí enlazamos y os recomendamos muy mucho... porque también somos humanos y tenemos algo parecido a un corazoncito, joder, ¿queda claro?, mejillón.

martes, 2 de febrero de 2010

Algo tan antiguo, algo tan denostado

La irrupción de la red global, esa maraña de uves dobles y fibra óptica que a muchos nos ha cambiado la vida y a todos nos la ha hecho posiblemente más fácil o completa, seguro que más apasionante, ha traído aparejada también problemas y vicios. Y si hablamos de Internet y Periodismo podemos hablar largo y tendido de vicios adquiridos.

Está claro que la telaraña virtual ha facilitado a los periodistas el acceso a cada vez más fuentes de información, más variadas e insospechadas, de manera casi instantánea. Quisiera ver a los becarios (ojo, todos lo hemos sido) de ahora buscarse las habichuelas como los profesionales de antaño, cuando la calle, las bibliotecas, los departamentos de documentación y el teléfono -ese aliado imprescindible, anónimo e inmóvil que por entonces ni soñaba con decirnos la hora ni mucho menos indicarnos cómo llegar a un lugar- eran las únicas herramientas aparte del bagaje y acervo personal. Hoy día, a todo eso se le ha sumado Internet, con su inmediatez, con su vasta cantidad de datos e información, con su posibilidad de acceso y recopilación en cualquier momento y lugar.

Dos de los peores vicios, a los que alguna vez nos hemos referido, que se cometen hoy día son el uso y abuso del "corta y pega" indiscriminado (ausencia absoluta de selección coherente, edición y elaboración propia de la noticia) y la falta de contraste de las fuentes. Quizás una de las primeras cosas que aprendes en ese edificio llamado Facultad de Periodismo es que LAS FUENTES DEBEN CONTRASTARSE antes de dar una noticia, un dato, una declaración por correcta y publicable. Y creo que es de las cosas que más se machacan en la carrera. Pues bien, seguimos cayendo en la trampa; una veces por desidia, otras veces por la competitividad desmedida y la rapidez inusitada, por tener que llegar más lejos y antes que nadie.

Contrastar las fuentes, un clásico tan denostado hoy día... ¡Cuántos problemas nos ahorraríamos si cumpliéramos una lección tan añeja y repetida!

Tras la presentación el pasado miércoles por parte de Apple de su nuevo iPad, su llamémosla tableta multimedia, la blogosfera y la Red se llenaron, en una demostración de atención mediática increible, de alabanzas, críticas y análisis igual que semanas antes le habían dedicado su atención a base de rumores, especulaciones y expectación. El canal Cuatro llevó la presentación del iPad a su telediario y lo hizo de la peor manera, ofreciendo unas características del producto que no se correspondían con la realidad. Lo triste es que esto no sucedía antes de la presentación, sino después, ilustrando la pieza con imágenes subtituladas del evento.

Noticias Cuatro, como puede verse en el siguiente vídeo, afirmó sin rubor que el iPad contaba con "conexión de TDT en Alta Definición, reproductor de audio, pantalla de 10 pulgadas, cámara para videollamadas, cámara de fotos, dos mandos y wifi para jugar en red, conexión 3G". Bueno, no está mal, 3 de 7 aciertos, pero menos del 50%. ¿Conexión TDT? ¿Cámara para videollamadas? ¿Cámara de fotos? ¿Dos mandos? ¿Pero cuándo anunció eso Steve Jobs? Debió ser en algún momento que fui al baño... Quisiera saber si nuestros compañeros de Cuatro tuvieron a bien leerse alguna nota de prensa emitida por Apple sobre el producto, entrar en la web oficial al respecto una vez presentado el mismo, ver la presentación vía streaming como pudimos hacer todos (aún hoy puede verse en diferido) o meramente informarse en algún blog especializado serio y respetable. Pues no parece; debieron fiarse de los rumores previos, de blogs o webs que hablan de lo que han oído otros que han escuchado de los de más allá... ¿Tanto costaba confirmar las características? ¿Tanta prisa había? ¿Porqué esa manía, ese riesgo, esa pereza, esa temeridad de no contrastar las fuentes, y más si son cibernéticas, virtuales?


Que el telediario en cuestión informe de un producto que dicen que está destinado a cambiar la historia de la informática dando datos inexactos es cuando menos sorprendente.

Los que somos periodistas lamentamos hechos así, y yo prefiero que me den menos información pero al menos contrastada y veraz. No creo que sea mucho pedir.

lunes, 1 de febrero de 2010

Diseñario 2.0 (XVIII)

Esta semana se ha ido todo un modelo de escritor a quien los enigmáticos, escurridizos y geniales miembros del comité de expertos de encajabaja entregados a la redacción de este Diseñario suyo, nuestro y vuestro, parecen querer emular. Claro que van por el camino absolutamente opuesto. Porque si el escritor norteamericano J.D. Salinger, a quien nos referimos, falleció el pasado jueves a los 91 años tras llevar más de 30 absolutamente retirado después de haber escrito una obra maestra, un clásico absoluto de la literatura del siglo XX en el que vivirá para siempre la verborrea desvergonzada del solitario e incomprendido adolescente (como todo los adolescentes, claro) Holden Caulfield, una novela de apenas 226 páginas en la versión también clásica de Alianza Editorial que le permitió vivir sin publicar apenas nada más, nuestros esforzados diseñaristas lo llevan claro para retirarse del mundanal ruido con sus derechos de autor porque ellos comenzaron, sin saberlo, una obra infinita que por eso mismo nunca terminarán. Es de suponer, eso sí, que al menos el Diseñario colectivo, irreverente y abierto a vuestra participación del que hoy os ofrecemos una nueva entrega, no terminará en manos de asesinos en serie como la novela de Salinger. ¿O sí?





E


Editorial. Precedida del artículo "el" y seguido de periodístico, se refiere a un género de opinión en el que un medio de comunicación da a conocer su punto de vista sobre un hecho noticioso. Es la voz del periódico, el artículo donde se moja y expresa sus opiniones para que sus lectores la conozcan. Es la cátedra desde donde se articula la línea editorial del medio, el vértice ideológico sobre el que gira el medio. Este artículo NUNCA se firma (si se quieren hacer bien las cosas, porque todos hemos visto editoriales firmados... precisamente cuando las cosas se hacen mal) ya que expresa la opinión de un ente abstracto, colectivo, no de una persona. Para eso ya están las columnas.
No confundir con Carta del director, donde este último expresa SU opinión, no la del medio, aunque en ocasiones puedan coincidir (las opiniones, queremos decir).
Fruta madurada a través de la experiencia, la escritura de un editorial puede resultar todo un ejercicio profesional cuando se tiene que expresar una opinión, la del medio, que no coincide con la del redactor en plantilla (normalmente de la sección de opinión, normalmente subdirector) que escribe el editorial, el editorialista, cargo de gran importancia y responsabilidad en una redacción.
Es un artículo de tanta importancia que casi nunca quieren dejarse en el tintero ni un concepto. Por eso, el espacio nunca es suficiente y siempre se queda corto. "Más espacio, necesito más espacio", claman los redactores. "Bájale el cuerpo, hazle trampas, lo que sea", piden. Todo para que entre, "porque no se puede tocar ni una coma", que es nuestro editorial. Esta dificultad se contrarresta con la facilidad de maquetar la página donde se compone este artículo, porque esta página es la misma todos los días. Es lo que llamamos un modelo fijo. Tan sólo algún acontecimiento de mucha relevancia lleva a que el director de un periódico decida modificar el editorial, llevándolo en ocasiones incluso a que arranque en la portada.
Precedido del artículo "la" se refiere a la empresa encargada de editar un producto escrito (libro, periódico, revista). En este caso, como indicaba el maestro de periodistas Bernardino Hernández en sus clases, el género sí es determinante.

EGM. Nunca unas siglas provocaron tanta expectación en una redacción. El Estudio General de Medios es una encuesta sobre el consumo de medios en el país, que realiza la Asociación para la Investigación de Medios de Comunicación (AIMC). Con este estudio se miden las audiencias, ventas, difusiones e incluso se compone el perfil medio del consumidor de cada medio, ya sea periódico, suplementos, radio, televisión , revistas, cine o Internet. El EGM llega cada año en tres oleadas, como los japoneses a Pearl Harbour, y sus datos despiertan una inusitada expectación en las empresas informativas, algo así como cuando nos poníamos en fila para que nos dieran las notas del último trimestre.
Como con todas las encuestas, los datos del EGM nunca te son desfavorables. Sucede como en la política, que siempre ganan todos, a la vez. Lejos de lo que pueda parecer, los datos de una encuesta siempre son susceptibles de ser dados la vuelta, siempre en tu propio beneficio. No confundir esto con manipular la realidad, Dios nos libre. Nunca. Lo que sucede es que las encuestas hay que interpretarlas, porque los números así a lo bruto son muy traicioneros. Porque una cosa es que ponga en negro sobre blanco que has palmado doce mil lectores y otra muy distinta es que eso tenga que ser un dato malo. Y por eso, que tu competencia retroceda un 0,02 por ciento se convierte, por obra y gracia de la semántica en un desplome de las ventas, un desangrarse en los quioscos. ¿Lo pilláis? Lo fantástico de las encuestas es que siempre, los datos malos son los de los otros. Por eso el EGM admite tantas interpretaciones como las profecías del bueno de Nostradamus, que de seguir vivo hoy, seguramente se dedicaría a hacer encuestas para los de la AIMC con parecidos resultados..."
Por lo tanto, más que los datos en sí mismos, que no le interesan a nadie normal, lo bonito de este tema es cómo se venden en los propios medios. Al principio de año anuncias a bombo y platillo que en venta en quioscos has subido la friolera de tres puntos con respecto a la misma oleada del año anterior. Tres meses después destacas cómo en terminos porcentuales de difusión, tu grupo se consolida como la opción más leída en lengua castellana, mientras que en la última oleada del año, tu competencia se vanagloria de ser en proporción, el medio del planeta tierra que menos ha caído en ventas con una caída media de sólo (obsérvese el énfasis en el adverbio de modo) un 72 por ciento siempre con respecto a la última oleada equiparable...
Esta meticulosa y responsable interpretación de los hechos provoca a la larga que ni cuando te son favorables te los terminas de creer. Salvo que los leas en otro medio que no sea el tuyo, claro. Entonces dices: "Pues va a ser verdad que hemos subido, lo dicen éstos...". Porque si fuera por lo que cada uno publica de sí mismo, de tanta subida consecutiva, de tanto éxito de ventas, los medios españoles seríamos ahora mismo de lo más consumido del mundo junto con la trilogía de Larsson y el catálogo de Ikea. Y la sensación que cunde en la profesión es que es más bien al contrario, cada vez somos menos, aunque los que quedamos somos fuertes, fieles y solventes... hasta la próxima oleada del EGM, en la que Dios repartirá suertes.


Entregas anteriores del Diseñario 2.0:

Diseñario 2.0 (I): adelanto-alcance.
Diseñario 2.0 (II): apaisado-arte final.
Diseñario 2.0 (III): aspirina-autoedición.
Diseñario 2.0 (IV): background-billete.
Diseñario 2.0 (V): bobina-breves.
Diseñario 2.0 (VI): cabecear-camisa.
Diseñario 2.0 (VII): carácter-carpintero.
Diseñario 2.0 (VIII): catálogo-chillón.
Diseñario 2.0 (IX): chiste-cierre.
Diseñario 2.0 (X): clavo-colchón.
Diseñario 2.0 (XI): columpiarse-comerse.
Diseñario 2.0 (XII): compacto-corresponsal.
Diseñario 2.0 (XIII): corte-crítica.
Diseñario 2.0 (XIV): crisis-crónica.
Diseñario 2.0 (XV): cuadratín-deformar.
Diseñario 2.0 (XVI): desguace-directo.
Diseñario 2.0 (XVII): director-documentación.