jueves, 4 de octubre de 2012

Historia de un balonazo

Todo esto viene de una página de Ariadna de la semana pasada en la que se ilustró una información de un videojuego con una imagen de Messi. El maquetador que recibió el encargo, hombre de orden y por lo tanto del Real Madrid, protestó amargamente...

 Quién sabe si por aquellas quejas, esta semana era Cristiano Ronaldo el que ilustraba un texto sobre otro juego de fútbol. Esta imagen en concreto: 


La primera versión de la página llevaba un faldón de publicidad que al final no iba. Al recolocar todo y poner la imágen a su nuevo tamaño, surgió el siguiente problema ¿dónde colocamos el balón? Ya hemos hablado alguna vez que un futbolista sin balón no es nada, como un jardín sin flores o un periódico sin publi... Así que ¿qué hacemos con la dichosa pelotita? 

Me gustaría deciros que estas cosas surgen de debates intensos, de sesudas reflexiones periodísticas, o incluso de algún rincón del cajón mental/sentimental en el que guardamos nuestras referencias visuales y culturales... Me gustaría, creedme, poder decir eso... Hombre, a veces sí que pasa... Pero la realidad es que estas cosas surgen de escenarios mucho más mundanos:

- Maquetador a responsable del suplemento: “No tienes huevos a que pongamos esto de forma que parezca que Cristiano ha reventado el titular de al lado de un balonazo...”

- Responsable (ofendido) a maquetador: “¿Que yo no tengo huevos...?”

- Maquetador (sonriendo abiertamente) a redactor: “No, no tienes...”



Y así fue como la publicamos. Sólo tuvimos que jugar un poquito con la titulación del tema de al lado, para que simularan el efecto pelotazo: alguna letra volando, una capitular que se queda tumbada... 

 Y ya está. Todo mucho menos romántico, es cierto, pero igualmente efectivo. ¿No os parece?

lunes, 1 de octubre de 2012

USA Today today (2). Pantallas, ¿de papel?


Cada día que pasa estamos un día más cerca del futuro. Un futuro de pantallas que ya son el presente pero que mientras avanzan miran demasiado hacia el pasado, como esos corredores inseguros que vuelven la cabeza una y otra vez frenando así su esfuerzo... hasta llegar en ocasiones a perder la carrera. Sucede sobre todo en los grandes medios de comunicación, como este gigante USA Today que, no obstante, parece poner todo su empeño en los medios digitales y de ahí la pregunta del prestigioso diseñador periodístico Mario García sobre qué papel tendrá el papel del diario impreso en esta nueva etapa con la que terminábamos el artículo anterior.

Transformarse en una marca —y hay que señalar entonces que según declaraciones de Javier Errea durante su reciente participación en la Cumbre Mundial de Diseño en Prensa 2012, celebrada la semana pasada en México DF, la primera consecuencia de este rediseño integral ha sido, precisamente, que "han destruido una marca tradicional muy bien establecida; es un diseño fallido", tal y como tuiteaba desde allí el infografista Alberto Cairo— digital. Tener como objetivo, pues, convertirse en una marca de medios digitales:


La parte más destacada de su vídeo promocional corresponde, sin ninguna duda, a los medios digitales, tabletas y web, quedan el periódico en un muy segundo plano.

Como para saber a dónde vamos no está nunca de más echar, al menos, un pequeño vistazo a dónde venimos y en dónde estamos, tener perspectiva, enseguida recordé las sabias palabras del periodista, diseñador periodístico y ahora historiador del diseño periodístico Fermín Vílchez (es necesario volver a recordar y recomendar su monumental "Historia Gráfica de la prensa diaria española, 1758-1976", absoluta obra de referencia ya en el diseño periodístico español) en otra reciente conferencia a la que tuve la suerte de acudir en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, titulada precisamente "Presente y futuro del diseño periodístico". Su acertada tesis, compartida además por otros muchos autores y profesionales, es que en lo relativo al diseño periodístico, "los medios digitales miran demasiado al pasado, le deben todavía mucho al papel y no han desarrollado un lenguaje y un diseño propios, algo que tendrán que hacer. Falta creatividad, porque todos siguen pensando como se pensaba en el papel, y no hacen más que imitarse unos a otros".

Se cuestiona Vílchez si esto se debe en parte a condicionantes técnicos porque establece una inteligente comparación entre el actual estado de las webs periodísticas, absolutamente dependientes de informáticos con conocimientos muy especializados, y los primeros periódicos en los que los periodistas necesitaban a profesionales de las artes gráficas con muchos años de experiencia y formación.

Infinita 'home' de la página web de The New York Times, de ayer, 30 de septiembre de 2012.

"Todas las páginas webs de los grandes medios de comunicación parecen diseñadas exactamente igual", analiza Vílchez; "alguna pequeña diferencia tipográfica o de color, muy pequeñas, y luego las tres columnas de rigor; titular, texto y foto como en el papel...". Con el agravante añadido de que como no hay limitaciones de espacio —se acabó el viejo y recurrente problema de que no cabe todo en la portada, y todo lo queremos meter— pues las páginas 'home' se hacen larguísimas, interminables y "desaparece la valoración, la jerarquía, el orden informativo... todo parece meterse según va llegando, sin que prevalezca en muchas ocasiones el criterio periodístico de qué es más importante, qué queremos destacar, por qué apostamos". Además, "al ser todas prácticamente iguales, tampoco logran una seña de identidad con el diseño".




De los grandes medios... y de algunos menos grandes. Precisamente el último lanzamiento de un medio de comunicación digital en España, eldiario.es, dirigido por el conocido periodista Ignacio Escolar —que debe mucha de su bien ganada reputación a su actividad en internet desde hace años— es un claro ejemplo de diseño que mira más al pasado que al futuro, basado por completo en los diarios de papel que, curiosamente, su director declara con motivo de la salida de este su ¿nuevo? medio que "son como los vinilos". Claro que esta mediocridad visual —logo aparte, que me parece acertado e inteligente— también puede deberse a la falta de medios, o a lo que sería más alarmante aún, falta de interés por el diseño o, incluso peor todavía, desconocimiento de que el diseño periodístico es periodismo, y de que la calidad de los contenidos para ser completa requiere una calidad acorde en la forma. Que unos contenidos de calidad mal diseñados se empobrecen y pierden calidad. Que el valor añadido es en parte un diseño eficaz. Que un mensaje periodístico es forma y contenido... Con la sorpresa incorporada de que, además, hablamos de internet, donde los elementos visuales se multiplican ofreciendo posibilidades de diseño periodístico absolutamente desaprovechadas por parte de periodistas supuestamente expertos en internet.  Esperaremos, no obstante, para ver si evolucionan en lo relativo al diseño, y les damos eso sí una merecida enhorabuena por su salida, lo que no es nada fácil en estos tiempos, a la vez que les deseamos toda la suerte en su proyecto.





Si el rediseño del papel del USA Today, digámoslo de una vez, nos parece irrelevante —por muy "infografía viva" y guay que sea su círculo de colores que sube y baja, y se decora, y que suponemos que es uno de los motivos por los que el gran Errea hable de "cargarse su marca"—, en lo relativo a la página web, sin embargo, sí parecen dispuestos a ir un poco más allá que el resto de los grandes medios. Y nótese que hablo siempre, o casi siempre, de grandes medios, porque también coincido con Vílchez en que "el diseño periodístico digital más interesante está en algunos blogs y en medios pequeños" y alternativos. En algunos. Sobre el diseño para iPad del USA Today no tenemos más datos que los que ofrecen a través de su vídeo promocional, en el que parecen apostar mucho por la tableta, pero con un resultado que podríamos llamar, a muy superficial y primera vista, insisto, de "puesta al día". Lo interesante está en la web.

Y volvemos antes de entrar en la web otra vez la vista atrás, porque resulta curioso que los primeros periódicos se compusieran en lo que muchos autores han denominado "maqueta vertical", debido a la tecnología del momento. Según avanzaba esa tecnología de las artes gráficas en los diarios, se pudieron ir introduciendo elementos horizontales. En esos comienzos todo eran columnas, sólo columnas, e incluso los títulos estaban dentro de ellas sin la posibilidad de que abarcasen varias como hacemos ahora. Todo se componía de arriba a abajo. Curioso, porque posiblemente por motivos técnicos del todo distintos, también las páginas webs comenzaron siendo una infinita columna vertical a la que después se han ido añadiendo elementos horizontales.

Primer número del periódico barcelonés La Vanguardia, 7 de abril de 1894, donde se puede ver con toda claridad la denominada 'maquetación vertical' en la que todos los elementos, títulos incluidos, estaban en el interior de las columnas, sin la posiblidad de que, por motivos técnicos, ningún elemento ocupase más de una.

Cuando preparaba su mencionada conferencia, Fermín Vílchez me consultó a través del correo electrónico sobre si había condicionantes técnicos que obligasen a que todas las páginas webs informativas tuviesen tres columnas. Le dije que no, que tal vez existía el consenso no escrito de que es la mejor manera de dividir una pantalla. Pero a la vez le di mi opinión, que evidentemente no es ni novedosa ni exclusiva, de que la mejor manera de aprovechar una pantalla no es dividiéndola en columnas, como sí lo es en el papel, sino estableciendo bloques de manera horizontal, módulos horizontales.







Diversas posibilidades para organizar la información utilizando el mencionado 'diseño horizontal'. Con un tema principal (recuadro azul) y varios temas secundarios por debajo de distinas secciones (identificados por colores, utilizando a modo de ejemplo los del USA Today); desarrollando modularmente el tema principal de modo vertical; y con un único tema principal que puede, además, estar acompañado de subtemas para complementarlo.

¿Por qué? ¿Porque queda más bonito? NO. Porque queda más bonito NO. Sencillamente porque es más sencillo y directo. Se consigue mayor valoración, orden y se puede apostar de manera contundente por un número manejable de temas. O por tres, solamente. O dos. O uno. Son pantallas dentro de tu pantalla que, sin el infinito y frustrante 'scroll', te llevan al 'interior' de secciones que pueden organizarse de la misma manera, o llevarte directamente a artículos en los que sí habrá una columna de texto, una, o a una galería de imágenes, o a contenido multimedia... Sencillo y directo, funcional, como se exige que sea el diseño. Puede hacerse tan atractivo como el talento lo permita, seguramente más que con el modelo vertical, sobre todo para conseguir esa necesaria identidad visual con ayuda de estructuras inteligentes, la tipografía y el color.




Página principal ('home'), de apertura de sección ('Sports'), artículo con un vídeo y artículo sencillo de texto de la nueva web del USA Today.

Y es en esta dirección, precisamente, por la que parecen apostar en la nueva web del USA Today. Además, le añaden a los lados dos barras verticales con información económica útil a la izquierda y una más amplia a la derecha denominada "Right now" con actualizaciones de ultima hora, al minuto, y formato "tuitero". Se aprovecha el sistema identificativo de colores asociados a secciones del periódico (que no 'inventaron' en su diseño original del papel sino que tomaron posteriormente de diseños europeos, como bien nos recuerda Carlos Pérez de Rozas).

Las flechas situadas a izquierda y derecha de la página web del USA Today permiten navegar 'pasando' páginas a la manera de un iPad.

La característica más novedosa de su nueva página web es posiblemente la más discutible: esa navegación 'tabletera' con flechas a la izquierda y derecha para ir 'pasando' páginas a la manera de un iPad, ¿es necesaria en un ordenador? ¿Qué aporta? ¿Hay que 'imitar' a un iPad en un soporte que no es un iPad para tener éxito? La horizontalidad permite todo lo que hemos analizado anteriormente, pero no encuentro ninguna ventaja en este excesivo horizontalismo al que, además, habría que acostumbrarse. En la pantalla de un ordenador parece más coherente estructurar la información horizontalmente y navegar por ella hacia dentro, entrando en cada módulo y no desplazándonos hacia los lados como si estuviéramos en una pantalla táctil.

Claro que aunque hayan dado un importante paso tampoco se puede decir que sean revolucionarios entre los grandes medios en este tipo de estructuras horizontales (que ellos mismos y otros diseñadores asocian a las tabletas, pero que a mí me parecen el mejor sistema para cualquier pantalla, web incluida). Hace ya unos dos años existe una aplicación que hizo Google para The New York Times, que organiza con una estructura horizontal la página web del periódico —aunque, eso sí, como posibilidad opcional manteniendo su página web igual y no como este nuevo USA Today que se arriesga con su propuesta sin alternativas, apostando directamente por ella—, puede descargarse gratuitamente como un complemento para Chrome, y que hace exactamente esto:

 
 






También la última red social de éxito, Pinterest, es además de enteramente visual, horizontal:



Como horizontal es el diseño de la web de la empresa encargada del rediseño del USA Today del que estamos hablando, Wolff Olins, aunque con una estructura de 'aparente' caos de modernidad y dinamismo:



Hace 30 años, el USA Today arriesgó medios económicos y talento con una propuesta revolucionaria que cambió en mayor o menor medida a todos los periódicos del mundo. Ahora intentan adaptarse a los cambios que les llegan desde fuera y nos ofrecen algo que no es ni mucho menos lo que nos deslumbró cuando salieron al mercado en 1982. Nada nuevo, no es —tampoco lo esperábamos— ese nuevo modelo que todos buscamos, algunos aguardándolo sentados, posiblemente en vano porque lo más probable es que un mismo modelo para todos no exista, y cada uno tengamos que encontrar el nuestro.


USA Today today (1). El papel del papel

jueves, 27 de septiembre de 2012

Periodiquerías (XLVII)






Chichén Itzá (México, 2012) / Elena Costa





Cuzco (Perú, 2012) / Mariví Casanueva





Vitoria-Gasteiz (España, 2012) / Mario Benito






Enviadnos fotos de vuestras "periodiquerías" antes de que todas sean iguales y se llamen iPad. Fotografiad esos lugares en los que todavía se venden periódicos, y las publicaremos en esta serie. Si queréis.



Entregas anteriores de Periodiquerías:

Periodiquerías (I):
Madrid - Nueva York - Sevilla
Periodiquerías (II): Bilbao - Resistencia (Chaco-Argentina) - Múnich
Periodiquerías (III): Estambul - Praga - Nueva York
Periodiquerías (IV): Salamanca - Edimburgo - Tres Cantos (Madrid-España)
Periodiquerías (V): Lima - Bruselas - Mérida (España)
Periodiquerías (VI): Londres - París - Roma
Periodiquerías (VII): Las Vegas - Los Cristianos (Tenerife) - Alicante
Periodiquerías (VIII): Antigua (Guatemala)
Periodiquerías (IX): Berlín - Viena - Moscú
Periodiquerías (X): San Francisco - Puerto de Santa María (Cádiz) - Málaga - Newspaperman
Periodiquerías (XI): Lisboa
Periodiquerías (XII): Venecia - San Petersburgo - Osaka
Periodiquerías (XIII): Barcelona - Los Angeles - Buenos Aires
Periodiquerías (XIV): Kabale (Uganda) - Honolulu (Hawai) - Filadelfia
Periodiquerías (XV): Zaragoza - Gerona - Pamplona
Periodiquerías (XVI): Miami - Nueva Delhi - Lima
Periodiquerías (XVII): Hollywood (Los Ángeles - USA)
Periodiquerías (XVIII): Cagliari (Cerdeña - Italia) - São Paulo - Parlamento Europeo (Bruselas)
Periodiquerías (XIX): México DF - Salzburgo - Buenos Aires
Periodiquerías (XX): Milán - Punta Arenas (Chile) - Cannes
Periodiquerías (XXI): Londres
Periodiquerías (XXII): Xian (China) - Assilah (Marruecos) - Bergen (Noruega)
Periodiquerías (XXIII): Damasco - Washington - Turku (Finlandia) - ¿Monumento al lector de prensa? Tampere (Finlandia)
Periodiquerías (XXIV): El Vaticano - St. Ives (Reino Unido) - Harvard (Estados Unidos)
Periodiquerías (XXV): Denia (España) - Seúl - Nápoles
Periodiquería de la Paz (XXVI): Pekín
Periodiquerías (XXVII): Como (Italia) - Oporto - Plasencia (España)
Periodiquerías (XXVIII): Pretoria (Sudáfrica) - Manchester - Aeropuerto de Heathrow (Reino Unido)
Periodiquerías (XXIX): Guayaquil - Valladolid - Avilés
Periodiquerías (XXX): La Habana - Aeropuerto de Ezeiza (Argentina) - Getafe
Periodiquerías (XXXI): Algeciras - Zamora - Gijón
Periodiquerías (XXXII): Melbourne - Ágreda (Soria) - Oviedo
Periodiquerías (XXXIII): Maranello (Italia) - Llanes (España) - Antigua Venta de Almadrones (Km. 103 de la Autovía A-2 Madrid-Barcelona, España)
Periodiquerías (XXXIV): Oslo - Huesca - Ribadesella (España)
Periodiquería del 15-M: Periodiquería 15-M (Puerta del Sol, Madrid, España)
Periodiquerías (XXXV): Atenas - Puerto de Mazarrón (España) - Aínsa (España)
Periodiquerías (XXXVI): Béjar (España) - Valencia - Jávea (España)
Periodiquerías (XXXVII): Montegordo (Portugal)
Periodiquerías (XXXVIII): Florencia - Split (Croacia) - Kaunas (Lituania)
Periodiquerías (XXXIX): Penang (Malasia) - Liverpool - Cancún
Periodiquerías (XL): Volterra (Italia) - Son Bou (Menorca) - 'El Molino' (Albacete)
Periodiquerías (XLI): Rovinj (Croacia) - Sanlúcar de Barrameda (España) - San Juan de Alicante (España)
Periodiquerías (XLII): Teherán - Bolonia - Monza (Italia)
Periodiquerías (XLIII): Santiago de Compostela (España)
Periodiquerías (XLIV): Pola de Laviana (España) - Pisa (Italia) - Pula (Croacia)
Periodiquerías (XLV): Rangún (Birmania) - Soria - Coca (España)
Periodiquerías (XLVI): Varsovia - Praia (Cabo Verde) - Copacabana (Río de Janeiro)

lunes, 24 de septiembre de 2012

USA Today today (1). El papel del papel

Primera página del primer número del USA Today, publicada el 15 de septiembre de 1982

Todos quisimos ser entonces el USA Today. O casi todos. En todo o en una parte. Después, la realidad siguió llegando cada día —como le sucede a Rajoy— para mostrarnos que el éxito del USA Today lo era para el propio USA Today y no necesariamente para todos los que, en todo o en parte, siguieran aquel modelo de colores y textos cortos y titulares en letras poderosas de palo combinados con otros de 'segundo grado' en letras de rasgo; la contraportada con aquel espectacular mapa del tiempo, a todo color, claro; la apuesta por la infografía, en color, y el color de fotografías que ocupaban mucho más espacio de lo habitual en un periódico que se llamara 'serio' a sí mismo. Hoy día, hay incluso quien sostiene que el diseño de las páginas home (perdón por el gilipollismo) informativas de la web le debe mucho, o casi todo, a aquel diseño periodístico ya histórico de 1982.


La mítica página del tiempo del USA Today, contraportada inicial de 1982 y evolución posterior del rediseño del año 2000

El primer número del USA Today salió a la venta el 15 de septiembre de 1982, hace exactamente 30 años, diseñado por su primer director de arte, Richard Curtis (no confundir con el director de cine), y aunque en un comienzo los diarios serios norteamericanos y del resto de los países occidentales, que se publicaban en un rigurosísimo blanco y negro por motivos tanto técnicos como de 'reputación', lo desdeñaron llamándolo incluso el "MacPaper" (y no por que se hiciera con ordenadores Macintosh, que supongo que no, sino por asimilar lo que consideraron su 'periodismo basura' de consumo rápido a la comida basura del 'Macdonal'), lo cierto es que más tarde o más pronto, todos terminaron imprimiéndose en color, todos, y más tarde o más pronto y en mayor o menor medida, todos terminaron acortando sus textos. Y, tal vez, fue un error. No lo de imprimirse en color, porque ya hemos comentado en más de una ocasión que el color es información, no más o menos seriedad o frivolidad —eso, como todo, como los titulares, depende de su uso—, sino que el error, tal vez, fue el de reducir aquello en lo único que un medio impreso es superior al resto: el texto.

El USA Today fue un proyecto de Al Neuharth para la empresa Gannett Company, dueña de la mayor cadena de periódicos norteamericanos, además de diversas emisoras de televisión y de radio. Cambió además la tendencia, muy anglosajona, del periódico como una institución local perteneciente a una ciudad queriendo ser un diario nacional con sede, claro está, en Washington DC, desde donde se enviaban las planchas vía satélite hasta diversos centros de impresión repartidos por todo el país (lo que permitía, incluso, retrasar la hora del cierre para salir con las últimas noticias). Este carácter 'nacional' fue otro de los factores que en principio suscitó dudas sobre su viabilidad entre las mentes más conservadoras del negocio. Pero su fórmula fue un absoluto éxito que llegó a vender hasta ¡cinco millones de ejemplares al día! Una fórmula que se inspiró, en parte, en la televisión, es decir, en la NO LECTURA. Como bien escribe mi maestro Pedro Pérez Cuadrado en su imprescindible serie sobre El color en los diarios publicada en nuestro blog hermano del otro lado del océano Visualmente: "El proyecto, muy elaborado, consistía en hacer un diario visual que fuera atrayente por su lectura rápida e interés. Trataron de traspasar la idea primaria de la televisión a las páginas de este periódico y emplearon textos cortos, muchos gráficos, estructuras muy modulares y, sobre todo, el color. El resultado fue sorprendente: millones de lectores. Y un diseño gráfico y tecnológico a imitar".

Pero... "tal vez nos equivocamos" siguiendo algunos principios de aquel modelo y descuidando en parte "los contenidos", escuché decir hace unos años, pocos, a Ricardo Curtis (nada que ver con el mencionado Richard Curtis por asombroso que pueda parecer) en una de las Jornadas sobre Diseño Periodístico de la Universidad San Pablo-CEU de Madrid. Curtis, nuestro Curtis, fue entre unas cuantas cosas más, muchas más, el director de arte del desaparecido y fugaz diario madrileño El Sol (1990-1992), el primer periódico en el que trabajé y donde tuve el honor de hacerlo a sus órdenes y a las del mencionado Pedro Pérez, y donde tuve la suerte de comenzar a aprender de verdad, con ellos. Fue un periódico que destacó y que es recordado por su innovador diseño, en el que el color tenía mucha importancia (y los condicionantes técnicos eran grandes y desesperantes); además de la infografía (durante la Guerra del Golfo se elaboraba un gráfico diario con las novedades de la contienda a toda página); los textos eran cortos, claro; y con la diferencia principal de que su formato era tabloide. Fue un fracaso. Y una de las constataciones evidentes de que un diseño, por sí sólo, vacío de contenidos, no sirve.

Portada del primer número del diario madrileño El Sol, 22 de mayo de 1990

También el prestigioso periodista Enric González se manifestaba en términos parecidos en una interesante entrevista del año 2009 que ya os reseñamos entonces: "Por alguna razón la industria ha supuesto que el lector de periódicos es un tipo al que no le gusta leer ¡...! Suena un poco contradictorio, porque si no le gusta leer no lo comprará aunque hagas textitos de diez líneas". Y curiosamente, por pura casualidad por suerte, porque suenen varias flautas o por lo que sea, algunos medios impresos que han hecho el camino opuesto, apostar por el texto y la calidad de los contenidos independientemente de su extensión, aumentan su tirada y aguantan la crisis. Como The Economist o el semanario alemán Die Zeit, cuyo director, Giovanni di Lorenzo, es bastante claro: "¿Cómo lo hemos conseguido? Desoyendo todo lo que nos aconsejaron los asesores de medios. Seguimos haciendo textos muy largos, no nos adaptamos a las modas y continuamos haciendo un periódico bastante difícil".


Rediseño del USA Today del año 2000 en el que se unifica la tipografía y se recorta el ancho de página (comparado con el primer número de 1982)

El USA Today original de 1982 dividía sus páginas en cuatro grandes secciones impresas en cuadernillos: Información y Opinión, Dinero, Deportes y Vida. Todas identificadas por un gran recuadro con el azul corporativo del diario (el azul de USA) con las distintas cabeceras mencionadas caladas en blanco. Posteriormente se utilizó un sistema de colores identificativo para cada una de ellas: azul para Información, verde para el Dinero (claro), rojo para (¿la pasión?) del Deporte y violeta (alguno había que poner) para eso tan vaporoso encuadrado dentro de Vida. "Una clara influencia del diseño europeo en los diarios norteamericanos y viceversa; es la globalización gráfica", reflexionaba Carlos Pérez de Rozas con motivo del primer rediseño que sufrió el USA Today en abril de 2000, también a cargo de Richard Curtis (quien anunció su retirada en 2008). Un cambio en el que se consolidó el sistema identificativo de colores, se mantuvo el formato sábana pero reduciendo cuatro pulgadas su anchura (de 54 a 50), y se unificaron todas las tipografías para utilizar exclusivamente una letra de rasgo (Gulliver).

Ahora, y con motivo de ese 30 cumpleaños, a lo que suponemos que hay que añadir el que su circulación ha descendido de la misma manera que la del resto de los diarios hasta situarse en segundo lugar con una tirada en marzo de 2012 de algo más de 1.800.000 ejemplares diarios (que no está mal, pero que sigue a la baja...), el USA Today anuncia un nuevo y revolucionario diseño que en palabras de su presidente y editor, Larry Kramer, les (¿nos?) llevará nada más y nada menos que "al siguiente nivel de la narrativa de la información" (el tan manido 'storytelling' que ahora los gurúes repiten hasta la saciedad) y a "reinventar el negocio de las noticias".

Vídeo promocional con el lanzamiento del actual rediseño

Las principales novedades de este ¿revolucionario? diseño están analizadas ya, en cinco completísimas entregas (en inglés), imágenes de las nuevas páginas incluidas, por Súper Mario García (y os aseguro que no hay la más mínima intención irónica en ese "súper" porque si de alguien puede decirse que sea el más grande de los diseñadores periodísticos, y dudamos que se pueda hacer tal escalafón, sería sin duda este cubano-norteamericano que después de tantos años sigue viajando por todo el mundo para rediseñar diarios con un saber, un amor por los periódicos y una pasión absolutamente insuperables. Su labor incansable ha contribuido como la de ningún otro a hacer de esta disciplina nuestra, y suponemos que de muchos de vosotros, una especialización PERIODÍSTICA más, respetada y escuchada, y su blog [GarcíaMedia The Mario Blog] es referencia absoluta de autoridad en todo el mundo).

El nuevo USA Today de 2012

Esas novedades se pueden resumir en el mayor peso de algunas de sus macrosecciones, como Tecnología y Viajes (porque supuestamente en "estos tiempos" interesan más), más espacios en blanco (para que "respire", ya sabéis...), más subjetividad al escribir sin llegar a convertir los textos en columnas de opinión (algo así como "cercanía" y "complicidad" con el autor, dicen), en el apartado tipográfico una nueva letra para el texto base (Chronicle sustituyendo a la anterior Gulliver) y la clásica y poderosa Futura para algunos titulares, para el logo, cabeceras... Y, sobre todo... su nuevo logo: un círculo que se convierte en... una ¡"infografía viva"!, según una expresión muy acertada del propio Mario García. Un círculo que cambia de color según la sección en la que estemos (nada nuevo, es exactamente igual a lo que sucedía con su anterior rectángulo), pero que cambia de posición e incluso de forma y contenido según las noticias que quieran destacarse. El diseño integral de la marca, web y editorial se encargó a Wolff Olins, empresa británica muy prestigiosa a nivel internacional y veterana (su fundación fue en los años 60) en el desarrollo y diseño de imagen y marcas comerciales. 









Como hablamos en esta primera entrega del papel (la próxima semana intentaremos hacerlo de las pantallas) seguro que no nos arriesgamos mucho al afirmar que este diseño no supondrá la revolución de la que ellos hablan y no se acercará, ni de lejos, a lo que supuso ese primer diseño histórico del USA Today del que os hemos estado hablando en un texto muuuuy largo, éste que leéis (hace tiempo que dejamos de preocuparnos por "la extensión de los textos e internet" y desoímos el tópico de que "deben tener párrafos y frases cortas, como corta debe ser la extensión total", tal vez porque preferimos a un lector antes que a cientos de 'miradores de páginas', o porque nos salen así cuando decimos lo que queremos decir). No revolucionará el diseño periodístico en papel, porque está hecho, con toda la intención y la evidencia, para intentar consolidar la marca USA Today en el mundo digital de la web y, sobre todo, de las tabletas.

Por eso, la pregunta del millón es, precisamente, la que formula Mario García en sus excelentes (y afortunadamente largos) análisis a quien el propio García llama "visionario creador" del USA Today, Al Neuharth: "If you were assembling a team to start your dear USA Today in 2013, would there be a print edition? For now, I have sent the question to Mr. Neuharth and wait for his reply". Estamos todos esperando.

viernes, 21 de septiembre de 2012

Sombras y luz. Una portada

"Si hay foto, hay página", solemos decir quienes nos dedicamos al diseño periodístico. Si hay una buena foto, evidentemente, porque lo cierto es que hacer una buena página sin buenas imágenes resulta casi imposible y hacerlo sin ninguna... pues está al alcance de muy pocos. Si hay foto, tenemos que limitarnos sencillamente a no estropearlo, colocarla en el mejor lugar posible y al tamaño adecuado. Ya está.


Esta es la portada que hicimos el pasado martes por la tarde-noche, y que se publicó el miércoles 19 de septiembre, con la noticia destacada de la muerte del histórico dirigente comunista Santiago Carrillo a los 97 años de edad, en su casa de Madrid. El título es bueno, muy bueno en realidad, porque en esa sencilla frase de seis palabras se dicen tantas cosas... prácticamente todo lo que puede decirse sobre la noticia. Un título de nuestro director y del staff parido en la reunión de portada. Y luego está la foto de Aymá, el fotón. Ya está.


Que también muestra todo lo que puede mostrarse de Carillo en un formato vertical que acentúa la tensión (tuvimos que cortarla ligeramente por arriba para que entrase en la página, lo mínimo). La composición perfecta con esa diagonal que comienza en el cenicero y termina en la lámpara pasando por el rostro del personaje envuelto en claroscuros, fumando claro. Las sombras y la luz de una vida que son las sombras y la luz del siglo XX en España.

En mi opinión (muy poco imparcial, evidentemente) fue la mejor portada de la prensa española este día. La mejor portada sobre la muerte de Santiago Carillo. Pero tengo que reconocer que jugábamos con ventaja. Con la enorme ventaja de tener con nosotros a un fotoperiodista del nivel del gran Pepe Aymá. Enhorabuena, maestro.

jueves, 20 de septiembre de 2012

'La tela de torear'

Esta tarde se inaugura en sala Spa[z]io de Madrid (calle Víctor de la Serna, 1, callejón) la exposición fotográfica 'La tela de torear' de la fotógrafa Begoña Rivas, una de las más grandes profesionales del fotoperiodismo de nuestro país, y compañera nuestra hasta hace muy poco. Como está sucediendo en nuestro país, y muy en especial en el mundo de la prensa, los 'recortes' como pretendida solución cuando en realidad son parte del problema crean un círculo vicioso que no hace sino ahondar el problema.

La muestra, de obligada visita, está formada por 20 fotografías centradas en el mundo de los toros, desde una mirada distinta, llena de sensibilidad y de poderío técnico, como podéis ver en estas dos imágenes que amablemente nos ha enviado la propia Begoña junto con un pequeño texto donde ella misma 'se explica' para los lectores de encajabaja.




La tela de torear

El traje de luces; los bordados; los capotes; castoreños y monteras, todo lo que rodea y viste el mundo del toro me fascinó desde el primer momento. Con este trabajo he puesto el foco de atención en los elementos haciendo un repaso al barroquismo que adorna este espectáculo y que a veces se escapa al ojo humano. La faena termina el día de la fiesta pero para llegar a ese día otros maestros ya han hecho su trabajo dando las últimas puntadas para que no falte ningún detalle.

Enhorabuena y mucha suerte Begoña, una vez más, por este trabajo. Para nosotros ha sido un honor y todo un lujo compartir contigo redacción y poder trabajar con tus imágenes durante todos estos años.


lunes, 17 de septiembre de 2012

Hockney y el iPad

La primera vez que oí hablar de David Hockney, bueno la primera vez que me interesé realmente en él porque su nombre ya me 'sonaba' como 'pintor pop', fue hace unos diez años, con la publicación de su obra El conocimiento secreto, uno de los más apasionantes y controvertidos libros sobre arte, en el que argumenta nada más y nada menos que desde el siglo XV los grandes maestros de la pintura utilizaron diversas tecnologías (principalmente ópticas, como la cámara clara y la cámara oscura) para 'calcar' la realidad. Un libro maravilloso editado sin escatimar medios, ni precio, que merece un artículo por sí sólo... como mínimo, y que por supuesto haremos.


Ahora es una exposición, "Una visión más amplia", en la que se muestra la obra reciente de Hockney la que vuelve a reclamar mi atención. Porque resulta que Hockney, a sus más de 70 años, ha vuelto a su Inglaterra natal (tengo que confesar que no pocos habíamos supuesto que se trataba de un pintor norteamericano porque después de haber conseguido cierto renombre en Londres siendo ya estudiante, su reconocimiento internacional llegó cuando en los años 60 se instaló en Los Ángeles con sus cuadros 'pop' de brillantes colores saturados), y a su regresó a Inglaterra, decíamos, al condado de Yorkshire en 2006, se interesó por la naturaleza de su lugar de nacimiento como antes lo había hecho con los grandes espacios abiertos del oeste norteamericano. En especial, por los cambios que la naturaleza sufre con las estaciones, con la luz, que en esta comarca de la nubosa Inglaterra implica distintos paisajes en apenas horas, o incluso menos. Con una energía no ya impropia de un hombre de 70 años sino para cualquiera, empezó a pintar esa naturaleza utilizando todo tipo de técnicas: al óleo, con acuarelas, carboncillos, cuadernos de bocetos, fotografías (tomadas con nueve cámaras montadas en un vehículo porque así considera que logra una imagen más cercana a lo que vemos), vídeo, Photoshop en ordenador, iPhone, iPad... hasta lograr en unos cinco años, aproximadamente, lo que parece la obra de toda una vida. Unas doscientas obras, algunas de inmenso tamaño, que llenan toda la segunda planta del monumental Museo Guggenheim de Bilbao.



Sí, iPad. Y aunque a primera oída, que no vista, pueda parecernos una 'modernidad' vacía, apuntarse a lo más avanzado para llamar la atención o incluso un querer luchar en vano contra el paso del tiempo estando a la última porque sí, nada más lejos de la realidad tratándose de un absoluto maestro que, además, ha investigado durante toda su vida todas las tecnologías del arte pictórico, poniéndolas en práctica. Su mencionado libro El conocimiento secreto no es sino una investigación de la tecnología de la pintura desde el siglo XV, por no mencionar sus impresionantes collages del cañón del Colorado realizados con cientos de fotografías polaroid en la década de los 80 y que también pueden verse en esta exposición, o sus trabajos posteriores con el fax, o con sus sistema de nueve cámaras y después con Photoshop.


Collages fotográficos de The Grand Canyon (1982) y La Autopista de Pearblossom (1986)

En 2009 comenzó a dibujar con un iPhone y en 2010 con un iPad (afirma que fue uno de los primeros en comprarse uno). Utiliza la aplicación Brushes (5,99 euros), un sencillísimo y potente software de dibujo que permite controlar trazos, colores, transparencias, ampliaciones de hasta el 3200% para acceder hasta el más mínimo detalle e incluso cinco capas que se mezclan entre ellas a la manera de Photoshop. Una de tantas apps que a pesar de su simplicidad posibilita, sobre todo en manos de un absoluto maestro de la pintura y el dibujo como Hockney, un resultado asombroso. Cuesta trabajo creer que muchos de los innumerables ¿cuadros? colgados en la sala denominada La llegada de la primavera en Woldgate, East Yorkshire, en 2011 (dos mil once), unas 70 imágenes de un metro y medio de altura cada una colgadas en dos filas, estén realizadas con la famosa tableta de Apple, porque captan la luz, los colores, texturas y hasta la atmósfera cambiante como la mejor de las técnicas tradicionales. Es increíble. Como increíble le pareció a Hockney en 2011 la posibilidad de imprimir las imágenes del iPad a ese enorme tamaño sin que se 'pixelicen' lo más mínimo. "Entonces descubrí que podía llenar paredes y paredes con mis dibujos", reconoce. La sala está 'presidida', además, por la que posiblemente sea la obra más importante de todo este período del autor, un óleo en este caso, un inmenso óleo lleno de árboles, hojas de los árboles y colores de más de nueve metros de largo y 3,6 de altura, formado por 32 lienzos, y que es la imagen que da imagen a toda la exposición, portada del magnífico catálogo incluida.

The Arrival of Spring in Woldgate, East Yorkshire in 2011 (twenty eleven). Óleo sobre 32 lienzos
365,8 x 975 cm; (91,4 x 121,9 cm, cada uno); parte de una obra de 52 piezas


Dos de la serie de 70 dibujos realizados en iPad e impresos en papel a un tamaño de 144,1 x 108 cm, que forman parte de la serie de La llegada de la primavera en Woldgate, East Yorkshire, en 2011 (dos mil once)




Es la "inmediatez" la característica más poderosa del iPad, según Hockney. Puede tomar apuntes del natural a una velocidad asombrosa con sus dedos sobre una "libreta cuyas hojas no se acaban nunca". Un dibujo, otro, otro... según avanza en el asiento del copiloto del coche por el condado de Yorkshire. Envía muchos de esos dibujos espontáneos a sus amigos desde la propia tableta por email, pero la mayor parte de los bocetos se quedan almacenados en la memoria digital hasta que llega a su estudio donde sigue trabajando en ellos para darles el acabado final, en el que además de los dedos utiliza un puntero. Logra así 'atrapar' la luz cambiante, o casi.







En la muestra hay también varios iPads en los que se ve la 'película' de sus dibujos en la tableta. Porque Brushes tiene además esta posibilidad, la de crear un vídeo con todos los pasos del dibujo que hemos ido realizando. Los trazos, la vuelta atrás, el borrado, nuestros titubeos —y los del maestro Hockney, por supuesto—, los distintos caminos de nuestros dedos sobre la pantalla de cristal. Diría que es una aplicación tan fácil de usar (tan fácil y potente que me recuerda, salvando las distancias, a nuestro querido Quark) que incluso un niño aprende a manejarla de manera intuitiva él solo, pero creo que en esto los niños nos llevan ventaja, así que diremos que es tan fácil usarla que incluso un adulto aprende en muy poco tiempo a utilizarla. Luego el resultado... pues como siempre decimos, incluso en maquetación y diseño. Que una cosa es la herramienta, y otra nuestros conocimientos, nuestro talento, lo que queremos hacer... todo eso que ningún ordenador ni software puede emular porque es pura actividad humana.





Primer dibujo realizado por Javier en Brushes con  los menús principales que ofrece el programa (colores, pinceles, capas). Finalmente, vídeo que realiza el propio software con el 'historial' del dibujo (que es exactamente lo que se puede ver en la exposición de Hockney con su autorretrato y varios trabajos más).

La exposición "Una visión más amplia" puede verse en el Museo Guggenheim de Bilbao hasta el 30 de septiembre. Todavía tenéis tiempo para hacerlo si tenéis la suerte de estar por estas fechas en esta gran ciudad. Y si a alguno de estos 'afortunados' no les gusta la exposición de Hockney, que todo puede suceder, siempre le quedan las instalaciones de hierro oxidado de Richard Serra de la planta baja del museo, el propio museo en sí, o incluso una muestra, nada más y nada menos, que de toda la serie de los grabados de Goya (tecnología sobre el grabado y el aguafuerte incluida en la propia exposición, porque también el genial, y brutal, Francisco de Goya fue un avanzado y curioso explorador de todas las posibilidades gráficas del momento) en el Museo de Bellas Artes, 'Goya, estampas de invención', unas calles más arriba en este Bilbao antiguo y vanguardista, lleno de contrastes, de vida y de cultura.