martes, 11 de noviembre de 2014

Para papel, y para tableta
VI Jornadas de Diseño URJC (II)

La primera y segunda ponencias de las VI Jornadas de Diseño de la Universidad Rey Juan Carlos del sur de Madrid se complementaron a la perfección. Porque si como ya os comentamos la semana pasada, los responsables de la revista digital Marca Plus se centraron principalmente en las cifras de su modelo de negocio —gratuito y basado en la publicidad—, esta segunda ponencia de la que os hablamos hoy tuvo como eje fundamental el proceso de producción de una revista, primero en papel, y después en tableta.

Rodrigo Pascual, Alberto Labarga y el profesor de la URJC y organizador de las Jornadas, Pedro Pérez Cuadrado presentándoles.

Para mayor contraste, además, si os destacábamos la "insultante" juventud de los primeros ponentes, fueron después dos 'veteranos' del diseño periodístico ("viejunos" en palabras del propio Pedro Pérez Cuadrado durante su presentación, en la que mostró de manera divertida el Diario de los Dinosaurios en el que, casualmente, participan), Alberto Labarga —con quien tuve la suerte de compartir redacción hace ya... algunos años, en el diario El Sol junto al mencionado Pedro Pérez— y Rodrigo Pascual quienes expusieron su "Del papel a la tableta. El ejemplo de Academia, Revista de Cine Español: Lo digital como generador de valor añadido".


Trabajan desde su estudio en Burgos con diferentes proyectos de diseño editorial y web pero centraron su ponencia en mostrarnos cómo hacen la revista Academia, editada por la Academia de Cine, tanto en papel como en tableta. Rediseñada recientemente para "dar más contenidos de lectura" han apostado por una reunificación tipográfica total utilizando un sólo tipo de letra —Fedra, muy de moda tal vez porque cuenta con múltiples variantes incluidas versiones sans, serif y display para cuerpos grandes—; una tipografía única y común para la versión impresa y la digital.


Dos ejemplos de la versión impresa de la revista

Labarga y Pascual explicaron que primero hacen la revista en papel y después acometen la laboriosa tarea de su versión para tableta porque "por desgracia, o no", matizó Labarga, "no existe ese botón que puedas apretar para que lo convierta todo a la versión para iPad y el software haga por sí sólo nuestro trabajo, como creen o quieren creer algunos empresarios".




Como se puede ver en las imágenes que proyectaron durante su ponencia, la versión para tableta (las dos últimas son la apertura y una página de lectura de un mismo reportaje) no tienen nada que ver con la versión previa de ese mismo reportaje impreso (primera imagen). No se limitan a trasladar las páginas de un soporte a otro ya que, como se puede observar, la estructura en varias columnas propia del papel no se conserva en la versión para tableta porque en realidad no tiene ningún sentido.

"Parece que las tabletas se hayan inventado para hacer revistas de cine",continuó Alberto Labarga, cuando detalló el "valor añadido" que intentan incorporar a su revista digital para aprovechar todas las posibilidades del medio: sonido para las canciones de las películas, vídeos para los tráilers y making of, o incluso producciones de vídeo propias para la revista con entrevistas a los actores, directores, etc. Las posibilidades son muchas, "porque si en una página podemos maquetar diez fotografías, en ese mismo reportaje para tableta el número de imágenes pueden ser infinitos... aunque siempre con el problema del límite de 'peso' de los archivos a la hora de descargar la revista". Eso sí, Labarga dejó claro que "huimos del artificio, de aquello que queda bonito o espectacular en una pantalla, en algo que se mueva porque sí. Nuestro trabajo consiste en comunicar contenidos y nuestro producto no es para jugar, sino para informar". Les suena de algo, ¿verdad?

Sobre el trabajo del día a día, su compañero Rodrigo Pascual mostró todo el proceso de producción de manera muy detallada e interesante, tanto que os reproducimos todas las imágenes que proyectaron sobre el "flujo de trabajo":








Para mayor complicación, nos detallaron que diversos condicionantes técnicos les obligan a tener que hacer la maquetación en papel en QuarkXpress mientras que la versión para tableta debe remaquetarse en Adobe InDesign junto con la plataforma de software Tablet Planet de la empresa española Roduly "que es bastante más económico que haciéndolo a través de Adobe".

Y no sólo eso, además de detallar todo el proceso de producción de una manera exhaustiva, incluso se 'atrevieron' a maquetar en directo una página añadiendo una galería de imágenes para tableta a un artículo que previamente se había maquetado en papel con una imagen. Todo un lujo.


El resultado nos mostró a nuestro querido Ricardo Curtis, presente también en las Jornadas, junto al 'Pequeño Nicolás" para un artículo que Labarga y Pascual titularon "La importancia de las buenas compañías".

Como conclusiones finales de la ponencia, Alberto Labarga destacó cinco puntos ab-so-lu-ta-men-te necesarios e incuestionables. Tomen nota:

1. No sabemos si las publicaciones interactivas digitales son el futuro pero lo que sí creemos es que ya forman parte del HOY y el AHORA, como la presencia en otros soportes digitales.
2. La tableta proporciona al usuario una experiencia novedosa y atractiva. Pero no se sostiene si no se acompaña de buenos contenidos (como todo).
3. Una publicación en papel y en digital pueden convivir manteniendo la misma identidad visual.
4. La puesta en escena digital exige una mente creativa y una mano de obra mecánica; el periodista y el diseñador siguen vivos. De hecho, conlleva más trabajo la elaboración en digital que en papel.
5. La tableta, como soporte, es una evolución tecnológica del papel. Es el PAPEL ELECTRÓNICO.

Qué mas se puede decir... Que enhorabuena, por la ponencia y por vuestro trabajo, y un fuerte abrazo, compañeros.

miércoles, 5 de noviembre de 2014

Interviú, 2.000 semanas entre el rojo y el negro

El pasado 25 de agosto la revista Interviú llegaba a los 2.000 números. 2.000 semanas en los kioscos, puntualmente, de una publicación que ha marcado, y marca, tendencia y que ha acompañado, y sigue acompañando, a varias generaciones de españoles con reportajes de investigación, entrevistas y erotismo. Con motivo de esta efemérides, Ana de Blas, redactora jefe de diseño de la revista, nos cuenta cómo es trabajar en la revista que leen hombres pero también muchas mujeres.


Ana de Blas es licenciada en Bellas Artes y en Ciencias de la Información. Redactora jefe de diseño de Interviú y autora del blog La Venus del espejo,sobre el desnudo en el arte, en interviu.es.

Sus primeros pasos en el diseño editorial los dio en la revista Dinero, semanario de información económica –por entonces del Grupo Zeta–, pasando después al estudio DCV para abordar proyectos de infografía, cartelería e identidad corporativa, mientras diseñaba el mensual La Tierra. En diciembre de 1997 volvió al Grupo Zeta en Madrid para incorporarse a la redacción de Interviú, tras varias colaboraciones como creativa para Tiempo y la propia Interviú. En octubre de 2000 es nombrada redactora jefe de diseño tras un breve paso como jefa de sección.
En mayo de 2010 realizó el actual rediseño de la veterana publicación –nacida en la infancia del régimen democrático: desde mayo de 1976– y de su cabecera. Una cabecera que es ya historia del periodismo español y abanderada de un ejercicio del periodismo en libertad que debería ser, también, parte de su futuro.



Portada del Especial número 2.000 de Interviú (pincha en las imágenes para verlas más grandes)

2.000 semanas entre el rojo y el negro

Tengo guardada en la memoria del móvil y en la otra, más frágil, la de mi cabeza, la imagen de los cinco últimos directores de Interviú juntos en la presentación del número 2.000 de la revista, celebrada el pasado 8 de octubre. También han sido ellos mis cinco directores, con quienes he aprendido a respirar en un medio ambiente raro como el de esta redacción desde la que escribo estas notas, como siempre, a deshoras. Interviú es una revista muy veterana, es un referente emocional para generaciones de reporteros y fotógrafos y a la vez, al otro lado de la imprenta, de lectores. Ya sean urbanitas o de las cuencas mineras, de la oficina, la fábrica o el camión, público de bares y peluquerías, sindicalistas, diputados en su escaño o adolescentes en la soledad de su cuarto. Todo el mundo en este país la conoce, o más bien cree conocerla, pues se han formado a lo largo de casi cuatro décadas una idea de lo que somos. Hay a quien le resulta simpática por gamberra y atrevida, y hay a quien le da entre asco y miedo por lo mismo. Pero lo que seguramente no se ve desde fuera es que la agenda informativa de Interviú es el poliedro con más caras que se pueda proyectar en el espacio, y lo primero que aprende una aquí es a no extrañarse de nada.

Algunas de las páginas del nuevo diseño de la revista

En esa presentación, uno de esos directores y para mí maestros, Jesús Maraña –ahora al frente de Infolibre– contaba una anécdota para ilustrar esa sensación de estar trabajando en un circo de tres pistas. Nos puso el ejemplo de una de sus jornadas, en la que había tenido que desayunar con Ana Obregón para concertar una sesión de fotos, después comer con el entonces ministro Acebes, y ya por la tarde recibir en su despacho a unos ex agentes cubanos. Bueno, esa es la agenda de un director, la que tarde o temprano se materializará en trabajo también para la mesa de diseño. 

Los reportajes son una seña de identidad de Interviú

Dar forma a contenidos muy dispares y muchas veces impredecibles es pues nuestra rutina, si es que se puede llamar así a no saber lo que te espera. En Interviú tienen cabida la agenda política, el tema social, el consumo, los sucesos, la denuncia ciudadana, el reportaje internacional, temas de salud y de medio ambiente, los deportes, el sexo, la televisión, el corazón... entre los desnudos y los muertos, hay quien solo ve la vena digamos bizarra, pero no es ese nuestro único negocio y esa es la singularidad de este magazine, como apuntaba Maraña con aire pícaro: también recordaba cómo a la mayoría de sus conocidos realmente lo que parecía interesarles era qué tal le había ido con la Obregón, mucho más que las otras citas de aquel día.

Más páginas de la revista con fuerte presencia tipográfica

Dotar de coherencia y un mínimo de unidad a una publicación por esencia tan heterogénea es una de las funciones básicas de nuestro diseño, algo que nos planteamos –entre la dirección a cargo de Alberto Pozas y yo misma como diseñadora– radicalmente en mayo de 2010, cuando abordamos el último proceso de rediseño completo de la publicación.

Necesitábamos bases nuevas sólidas para ponernos al día sin perder nuestras mejores cualidades: el impacto gráfico de la buena prensa popular, la fuerza y exclusividad de las imágenes que lanzamos al mundo, el titular mordiente de los grandes reportajes –el género periodístico que nos define–. Pero en esa ocasión nos atrevimos incluso a algo más: rediseñamos, después de darle cien vueltas, la propia cabecera, a pesar del riesgo que suponía “tocar” un material que no era solo nuestro, no era ni siquiera patrimonio exclusivo del editor, era en realidad de todos los españoles que tenían retenida una imagen de ella en su memoria reciente o lejana.

Páginas de las secciones Panorama de actualidad y Apuntes

Para quien no sea diseñador, quitar o no una banda a 45º de inclinación en una portada, retocar el trazo de la ‘t‘, poner, quitar o mover la tilde de la ‘ú‘ final, unificar y definir un nuevo porcentaje de CMYK del rojo corporativo, decidir una escala... pueden parecer tormentas en un vaso de agua, pero son para nosotros verdaderos quebraderos de cabeza. El acierto o el error en esa suma de pequeñas decisiones influirá en la imagen de todo el equipo y solo se puede evaluar al cabo de un tiempo de rodaje. Ahora no tengo ninguna duda de que hicimos bien en revisar nuestra mancheta, nadie añora la anterior a pesar de que perdimos algo de su vieja identidad en banda; matizamos la energía del rojo y personalizamos el tipo original –esa Helvetica Black Oblique setentera– sin perder nuestra esencia. Seguíamos siendo reconocibles mientras nos actualizábamos y creábamos un logotipo único, ¡bingo! Sinceramente, solo por este trabajo creo que me gané el sueldo por una temporada, y no me hubiera atrevido a hacerlo sin el apoyo expreso del director que llevó las riendas de aquel cambio. Para los más curiosos, os adjunto el ‘Cuaderno de la portada’ con el que presenté mi propuesta, en la que iba incluso más allá en la transformación del logotipo; finalmente, se aprobó la opción intermedia, que es la que mantenemos hoy en el quiosco. 


Parte del cuaderno del rediseño de la mancheta

La evolución de la cabecera era un riesgo que asumimos entonces y quizá lo más llamativo del proyecto para el público, pero la renovación que abordamos en la portada y en las páginas interiores tiene otras claves que los diseñadores entienden bien. Cuando salimos con la nueva maqueta, Diego Areso, editor de Quintatinta, lo resumía así: “lo mejor del cambio: una total revolución tipográfica, y la cantidad de pequeños detalles de diseño fino que inundan las páginas de la revista, y que brillan sobre todo en las columnas de opinión, y en la sección ‘Panorama’, lo más conseguido del proyecto, para mi gusto”.

Portada con la nueva mancheta diseñada por Ana de Blas

Tenía razón Areso, el juego tipográfico es la espina dorsal que da unidad y médula a nuestro cuerpo, ya dije que la variedad algo mareante de contenidos no puede traducirse ni en monotonía ni en vulgaridad ferial, dos peligrosos extremos que nos acechan. En esta carpeta de tipografías la protagonista es la robusta y polivalente Stag de Christian Schwartz, una egipcia creada para el Esquire norteamericano. Una familia que hoy ya tiene una difusión tremenda –vaya, ahí sí que seguro que hicimos diana–, cosa que para nosotros empieza a ser peligrosa si llega a saturar al estar en todas partes. Además, estructuramos los contenidos en torno a cuatro grandes bloques: Reportajes, Chica de portada, Panorama de actualidad y Apuntes de ocio, este último mi favorito en cuanto a posibilidades creativas, donde los contenidos dan pie a mayores lujos y osadías visuales. Desgraciadamente, era un proyecto ambicioso para los tiempos que corren, en los que el papel sale caro y las planillas son cortas, y hoy, pasados cuatro años, sobreviven básicamente los reportajes propios–el ADN informativo de la publicación– las firmas y los contenidos eróticos, para los que, eso sí, nos hemos vuelto exigentes en cuanto a la calidad de producción. Así que, en resumen, no hay muchas páginas, vale, pero intentemos que merezcan la pena, es lo menos que le debemos al fiel y asombrado lector. 

Alguna de las páginas en las que destaca la edición gráfica

Junto a la solvencia redaccional, la edición de fotografía es el segundo pilar de esta revista. Después de muchos años, al menos he aprendido que dedicar buena parte de mis energías a seleccionar y valorar fotos merece siempre la pena: todo el valor de un magazine con vocación gráfica depende del acierto en este ámbito. Hablo de la calidad formal y del valor periodístico de nuestras imágenes, como denuncia y como significado.

Pero además, en estos últimos años ha ocurrido otro cambio importante en nosotros: nos hemos impuesto el reto de publicar, junto a la revista semanal, una serie de monografías especiales que aportan mucho valor añadido a la publicación. Ni que decir tiene que son, como buenos hijos nuestros, cada uno de su padre y de su madre: lo mismo hacemos uno con pura fotografía erótica para gusto de nuestros hambrientos mirones, que nos embarcamos en revisar y actualizar temas de largo recorrido como la Memoria Histórica, los horrores de la guerra –sin censura– o las tramas de los niños robados en España. Es difícil saber si este es un buen camino en un panorama tan confuso como el que vive la prensa hoy, con la eclosión de nuevos y viejos medios en soporte digital, mientras el negocio de papel se encoge. No lo es en un país sobrepoblado de smartphones y mucha, mucha manga ancha para la piratería intelectual (bueno, y de la otra). Pero es una puerta que se abre, la verdad, y otra vez un reto difícil para los diseñadores, porque hay que inventar un traje a medida para cada uno: nuevos recursos y diagramaciones, manteniendo básicamente la unidad de formato, cabecera, tipo y color. Os dejo aquí alguna muestra, para quien tenga curiosidad por alguna de estas portadas de interviú ¡sin desnudos!


Portada de los cuadernos especiales monográficos

Al comienzo mencioné la cita del número 2.000 como la ocasión en la que los de la plantilla habíamos podido tener a cinco directores juntos y cruzar unas palabras con todos ellos. Tuve ocasión también de saludar a Teresa Viejo, la única directora que hemos tenido, circunstancia que la coloca en una posición muy particular, sospecho que de merecido orgullo, pero por momentos incómoda para ella: como si tuviera que explicar qué hace una mujer dirigiendo una publicación para hombres. Como si no fuera periodista, como si no tuviera... no sé, ¿qué capacidad le falta? Yo también soy una diseñadora y periodista eligiendo o descartando fotos eróticas para varones heterosexuales, y os aseguro que no me cuesta más ni menos que elegir la mejor foto de una denuncia, de un suceso, de un terremoto, de una entrevista. Te acostumbras, te especializas. Aprendes que la sexualidad está en el cerebro, ese órgano con el que trabajas. Que los conocimientos que tienes sobre valores formales y significativos se aplican de maravilla en el género del desnudo, donde tienes mil referencias antiguas y contemporáneas para apoyarte. Por eso lo paso tan bien escribiendo mi blog sobre el desnudo en el arte, porque puedo abordar con total libertad las cuestiones de género, sexualidad y roles que acompañan a la fundacional costumbre de los humanos de representar sus cuerpos buscando siempre cosas distintas. Pero esta es otra historia.

Páginas interiores del especial número 2.000


El caso es que Teresa Viejo es además la protagonista de la portada del especial 2.000 que diseñé, y hablamos un par de minutos de ello. Me sorprendió que ella hubiera posado para esa foto sin tener todas las claves que yo tenía. También me extrañó que hubiera aceptado hacerlo: aún no sé si está bien o está mal, si es el mensaje adecuado, aunque ella lo explica mejor que yo en la entrevista que acompaña a sus fotos (que no son desnudos, pero sí tienen mucha carga erótica) del especial. Le conté que el proceso empezó con un mensaje desde la dirección: querían una imagen distinta, algo especial, lujoso, elegante; una edición única, algo para guardar. Se pensó en el color negro como vehículo para expresar esa exclusividad. ¡Negro! Al principio me confundió la idea, nosotros usamos con frecuencia el negro para expresar otras cosas: el impacto, la ocultación, la tragedia, el dolor. Claro que esos son contenidos en los que nos manejamos, por desgracia, a menudo. Por ejemplo, os dejo un par de portadas en negro recientes, de esas rarezas sin desnudos: el espanto de un rayo de luz sobre las calaveras de una fosa común en Villamayor de los Montes (Burgos) fue nuestra elección para el dossier sobre Memoria Histórica, una gran foto de Clemente Bernad. Hubiera preferido dejar hablar a la imagen sola y poner el titular mucho más discreto, pero no pude convencer a mis jefes (sí que me dejaron en cambio con la portadilla del especial con la abdicación de Juan Carlos I: ésta salió como os adjunto, sin palabras). También abrimos un rasgado sobre negro para la portada del extra de los niños robados, dejando ver la imagen de un viejo retrato infantil y dos manos femeninas, una joven y otra vieja, tirando de cada lado... esta foto no es un montaje, forma parte de la realidad, lo que le da un enorme valor. La clave se explica dentro, la portada se abre como un misterio a resolver. En este repugnante turbio asunto de los niños robados durante el oscuro franquismo y más aún, ya en democracia, el recorrido de interviú es tremendo: desde los primeros reportajes de los ochenta (María Antonia Iglesias, Germán Gallego...) hasta la actualidad, con la impecable serie de investigaciones a cargo de la reportera Ana María Pascual. Sí, también una mujer. Ya veis cómo trabajamos al otro lado del papel de la revista.


Páginas interiores del especial número 2.000

Ese día le conté a Teresa Viejo como os cuento ahora el proceso que seguimos: algo negro y brillante, me pedían, pues. Confieso que hice pruebas con fondos texturados y tipografía y no me salía nada que no tuviera un tonillo de ‘50 sombras...’ Entonces pensé en un hombre con esmoquin negro, pero nunca en ese traje de etiqueta sobre un torso femenino: yo estaba buscando algo con lo que se identificara el lector, al estilo de un magazine masculino clásico, vestido para la ocasión. Presenté una portada así y el director me dijo: ¿y si probamos con una mujer? Otra vez me descolocó, ¡habíamos quedado sin desnudos! Luego el resultado es el que habéis visto, de nuevo un mensaje oculto tras el negro: ella, la misteriosa modelo, iba a ser la ex directora. No sé de quién fue este último paso, y ya digo que me sorprendió mucho que Teresa Viejo decidiera aceptar ese reto, es su imagen y le obliga a dar más de una explicación. ¿Qué significa? ¿Supone un tratamiento sexista para nuestra única capitana? ¿O es un signo de libertad, de complicidad con sus lectores, una ruptura de las normas? Decide tú, lector, como siempre haces. 

lunes, 3 de noviembre de 2014

El presente de ¿los medios del futuro?
VI Jornadas de Diseño de la URJC (I)

La sexta edición de las Jornadas de Diseño en la Sociedad de la Información de la Universidad Rey Juan Carlos del sur de Madrid  ha tenido como tema central la "Producción de publicaciones en línea". Celebrada la semana pasada, se ha consolidado ya en estos pocos, pero muy difíciles, años —junto a las Jornadas del CEU que organiza nuestra muy querida Laura González— como uno de los eventos más destacados de los que se organizan en Madrid en lo relativo al diseño periodístico. Gracias, y gracias, al tesón del padre de la criatura, nuestro muy querido Pedro Pérez Cuadrado.

Pedro Pérez y Laura González, maestros de diseño periodístico

Siempre con el propósito puesto en lo que pueda resultar muy útil y práctico para los alumnos de la Universidad, en esta última edición se han tratado los distintos aspectos de las publicaciones dirigidas a las tabletas. Su modelo de negocio, si es que existe, la manera en que se diseñan, la producción técnica...


PRIMERA PONENCIA

Pablo Berraondo y Nacho Labarga, responsables de la revista digital Marca Plus, abrieron las Jornadas con una interesante ponencia titulada 'La realidad digital de la prensa en los nuevos soportes: Quality Sport y Marca Plus'.  Con una seguridad y un desparpajo propios de su insultante juventud nos hablaron sobre un proyecto que comenzó siendo un trabajo de fin de carrera en la Universidad de Navarra y que ahora de forma parte, nada más y nada menos, que del "universo de publicaciones de Marca, dentro de Unidad Editorial". Eso fue, tal vez, lo más interesante para unos alumnos que seguramente estén cansados de oír una y otra vez que en esta profesión nuestra "no hay futuro".

(De izquierda. a derecha) Pablo Berraondo, Nacho Labarga, la vicedecana de la Facultad de Comunicación Gloria Gómez-Escalonilla Moreno y el profesor Manuel Montes en la presentación de las Jornadas.

Berraondo se centró principalmente, tal vez en exceso, en las cifras del negocio, aunque también aportó datos y experiencias sobre la importancia del diseño: "Los periodistas de Marca Plus tenemos una formación en diseño aunque no realicemos el trabajo del día a día. Es muy importante", insistió y con mucho acierto, "que sepamos qué es capaz de hacer tu soporte, todas sus posibilidades, para que podamos plantear de la manera más completa posible los temas que vamos a tratar. En nuestro caso", prosiguió, "los diseñadores participan en el proceso proponiendo enfoques o incluso el tema en función de las posibilidades del diseño". Su compañero Labarga añadió como dato importante para los alumnos presentes que en su anterior etapa de Quality Sport sus tres diseñadores fueron fichados por grandes medios —AS, El Confidencial y RTVE—, y detalló también distintos aspectos del proceso de producción para el que utilizan la tecnología de Aguafadas.




Sobre el futuro, el pasado, el presente de los medios, el discurso de Berraondo cayó a nuestro juicio en algunas contradicciones como la de afirmar que "los grandes medios se están desmoronando", por lo que "necesitamos hacer cosas nuevas y distintas", mientras que, al mismo tiempo, centraba parte del éxito de su nuevo medio en que había sido fichado... por uno de los grandes medios 'del pasado'.  Además, las cifras de esta nueva revista digital —que cambió su nombre para incorporar el nada novedoso de Marca y que pretende ser rentable exclusivamente con la publicidad, "nadie paga en España por contenidos periodísticos"—  ponen de manifiesto que el número tres de Marca Plus cayó en picado... porque la web de Marca lo promocionó sólo dos días en vez de la promoción habitual durante dos semanas. No obstante, sus números son realmente muy buenos. ¿Les hace falta realmente este discurso, tan desgastado ya que poco tiene de nuevo, de vender lo nuevo frente a lo viejo?

(Fotografías: Luis Blasco y Mario Benito)

Y es que el futuro, ¿de verdad está tan claro? A la ya clásica pregunta que formuló Berraondo al comienzo de su presentación sobre "¿cuántos de vosotros compráis el periódico?" se levantaron cero manos, como muestra inequívoca, según los ponentes, de que los medios en papel van a desaparecer.  "Y eso que estamos en una Facultad de Periodismo". Pero cuando más adelante se atrevió a preguntar lo mismo sobre su revista digital para tabletas, gratuita, se levantaron... ¡un brazo! El de un alumno que la descargaba en ese momento. En la Facultad de Periodismo.

No obstante, el ejemplo de estos jóvenes periodistas es interesantísimo, valiente y motivador para los alumnos que llenaban el aula magna y que les preguntaron de todo. Enhorabuena.


jueves, 30 de octubre de 2014

Ilustraciones de chocolate

Hay temas difíciles de ilustrar. Muy difíciles. O bien porque no tienen una foto clara (porque no se ha hecho o no existe) o porque son demasiado abstractos para ilustrarlos claramente. Suelen ser piezas científicas, de salud, etc., donde en otras publicaciones se tiende a tirar de [aburridos] bancos de imágenes. Pero en el periódico no. Aquí tenemos un magnífico equipo de ilustradores de los que tirar en caso de necesidad. Y éste era uno de los casos. Aunque ilustrar, lo que se entiende por el término clásico de ilustrar en un periódico, no es lo que hizo el gran Luis Parejo (autor del dibujo del blog). 


Para ponerle una imagen a un tema de ciencia como que se ha demostrado que el cacao es bueno para el cerebro, Rodrigo Sanchez le pidió a Luis que dibujara un cerebro en una tableta de chocolate. Pero no sobre el papel, no con papel y lápiz, no, sobre el chocolate, directamente. Así que Luis bajó al supermercado que hay cerca del periódico, compró unas cuantas tabletas y con unas agujas se puso manos a la obra. El resultado, esta tableta cerebral que fotografió José María Presas.




Y con esa ilustración hicimos la página, con las onzas de chocolate dominando la maqueta. Una vez hecha la página y publicada, había que dar cuenta del chocolate, por eso de que no se estropeara y de llevar a la práctica de lo que trataba el tema, ya me entienden. Cosa que hicimos entre unos cuantos, entre ellos el propio Luis Parejo, como se ve en esta imagen. Porque mejor comerse las páginas de verdad a tener que "comerse" aburridas fotos de un banco de imágenes.



miércoles, 22 de octubre de 2014

Boceto

Este es el boceto REAL de una página, la primera del periódico, realizado por nuestro encajabaja Javier Vidal...

(los garabatos no son tales, sino los títulos REALES, que debían ser compuestos en la página)


...y ésta, la página resultante:



lunes, 20 de octubre de 2014

Distinto... pero sigue siendo

En esta ocasión, no nos corresponde comentar, sino mostrar:


















Es distinto, pero sigue siendo El Mundo:





Y aquí nosotros, los que quedábamos a esas horas, tarde, muy tarde...


...fotografíados por el gran Carlos Montagud (la imagen es de nuestro Comunity Manager, Santiago Saiz). Rodrigo Sánchez, padre de la criatura, está más o menos en el centro de la imagen con camiseta blanca (que era lo acordado y no todos cumplieron...) posando con su equipo frente al 'muro de páginas' que fuimos levantado durante toda la tarde noche:



martes, 14 de octubre de 2014

VI Jornadas de Diseño en la
Sociedad de la Información


Un año más vuelven las Jornadas de Diseño de la sociedad de la Información, organizadas por Pedro Pérez Cuadrado, profesor de la Universidad Rey Juan Carlos (27 y 28 de octubre). 

En esta sexta edición el tema central es la Producción de publicaciones online, y contará con profesionales del sector y profesores de distintas universidades. Del ámbito de los medios participarán Pablo Berraondo y Nacho Labarga, responsables de diseño y producción de Marca Plus, Ana Ros, publicista, coordinadora de Academia, Revista de Cine Español, Alberto Labarga, diseñador gráfico y periodista Rodrigo Pascual, diseñador gráfico y periodista y Carlos Sánchez Vázquez, director de edigital. Publicaciones interactivas para iPad. 

De las universidades madrileñas contará con las charlas de Mónica Yuán Cordiviola, profesora de Diseño de la Información para nuevos soportes en la Universidad CEU San Pablo, Jorge Solana Aguado, profesor de la Universidad CEU San Pablo y Juan Yunquera, profesor de Diseño Gráfico de la Universidad Carlos III. 

 Como siempre, en el Aula Magna del aulario 1 de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la URJC (Camino del Molino, s/n Fuenlabrada) en turno de mañana. Tenéis más información en su web oficial