domingo, 21 de octubre de 2007

Marca también se renueva hoy

Sólo un par de apuntes para comentar que el Marca también ha escogido el domingo para lanzar su nuevo diseño.

Abandona la famosa M mayúscula para volver a sus orígenes con la palabra MARCA completa. Las informaciones se muestran más ordenadas dentro de la página, lo que sin duda agradecerán (agradeceremos) muchos lectores.


Por último, el uso del color. Ahora los cintillos tendrán el color del equipo del cual se está informando en la página o el color más característico del deporte en cuestión, como el verde golf de la página de abajo.

Enhorabuena también a nuestros compañeros de MARCA.

P.D. Desde aquí queremos agradecer a J.L. Orihuela por mencionar nuestro blog en su columna de la revista Tiempo de Hoy del pasado 11 de octubre. Muchas gracias.

La primera portada del nuevo EL PAÍS



Así es la primera portada de la nueva era de EL PAÍS. Con el famoso acento, eso sí.

sábado, 20 de octubre de 2007

La verdad sobre la tilde de El País



Mucho se ha hablado sobre la tilde del diario El País (aquí, aquí y aquí) y el motivo por el que Juan Luis Cebrián decidió no hacer caso a los académicos que le rogaban que acentuara la cabecera. En su momento se alegó que era un icono, pero nadie se ha hecho eco del verdadero motivo por el que EL PAIS no se escribía EL PAÍS. Reinhard Gäde y Julio Alonso lo explican en una carta al director publicada por el diario de PRISA el pasado sábado. Nada más lejos del motivo oficial:

"La cabecera de EL PAÍS se diseñó sin tilde por una razón más sencilla, pero de más peso, que la empleada el jueves pasado para anunciar que el rediseño del periódico incorpora el preceptivo acento en la i. "Que la cabecera tiene un significado icónico no literal y que nadie se para a pensar en el contenido de lo que define" es una explicación o justificación a posteriori, no por eso exenta de fundamento. Y de ejemplos; entre ellos, el logo de Telefónica.

Pero se olvida que no fue la estética sino un impedimento técnico el que nos llevó a proponer la supresión del acento: las modernas fotocomponedoras, de fabricación norteamericana, carecían de mayúsculas acentuadas, y no tenía sentido poner acento en la cabecera cuando los textos que en el resto del periódico se escribieran todo de mayúsculas tendrían que ir sin él. No éramos los únicos. El resto de los periódicos, con tecnología más atrasada, estaban en las mismas. Era una situación que se arrastraba desde la implantación de la linotipia, máquina inventada por el alemán Mergenthaler a finales del siglo XIX. Hasta tal extremo que más de una generación de aquella época fue educada en la idea de que las mayúsculas no se acentuaban.

Hay que decir también que EL PAÍS fue el primer periódico -al menos entre los de difusión nacional- en devolver el acento a las mayúsculas. Fue el 9 de noviembre de 1983, la primera vez que el apellido del director (Cebrián) y el día de la semana (miércoles) se escribían con tilde."


P.D. No os perdáis los vídeos que ha subido El País sobre su nuevo diseño. Los podéis ver aquí, aquí y aquí.

viernes, 19 de octubre de 2007

Una portada distinta


No es muy ortodoxo, no. Hay que reconocerlo...

El equipo de encajabaja.

De noche en el periódico

Se vive al contrario, de noche. Vienes cuando otros van. Nada coincide contigo, como si tu horario vital estuviera formado por piezas sobre un tablero y alguien, la noche, lo hubiera sacudido, travieso. Comes solo pero también tu coche circula solo por las calles iluminadas de la ciudad. Y no duermes, te imaginas dormir durante días de luz, gritos, teléfonos y obras. Te pagan más.

Estás solo.

También el trabajo en la redacción es distinto, suele consistir en destrozar las páginas que han hecho tus compañeros durante el día. Juego a los puzzles cada noche procurando cuadrar aquí lo que descompongo allá y algunas veces, pocas, el resultado mejora lo que han organizado antes con menos urgencias porque, de noche, solemos intentar que nada se quede fuera de las páginas, incluir lo más hasta lo más tarde posible. Sin importar la forma, porque es de noche. Estamos de guardia sin hacer nada para que de día puedan decir que los del turno de noche no trabajan, pero en realidad lo que hacemos es esperar a que suceda lo que suele suceder cuando menos lo esperamos. Cuando más te jode. Y no pronunciamos nunca las palabras mágicas "parece que hoy está todo muy tranquilo".

Y luego están los ruidos, porque en la noche transfigurada, cuando te quedas solo en esta esquina apartada de la redacción, se oyen cosas, que alguien teclea en uno de los ordenadores y cuando te acercas no hay nadie pero el salvapantallas ha dejado su lado oscuro como si hubieran tocado las zonas sensibles del ordenador. Estuvieron sonando los teléfonos de nuestra sección durante meses, en cuanto me quedaba solo cada noche, y dejaban de sonar un instante antes de que los cogiera como si pudieran verme, los teléfonos, porque en esta parte de la redacción estoy absolutamente solo y a través de las ventanas no hay nada. Nada puede verme y sin embargo sabe que estoy allí.

De noche las pantallas de los ordenadores te miran en vez de ser tú quien las mira a ellas como sucede durante el día.

Y de noche aparecen desconocidos que te piden un cambio en una página que tú haces sin preguntarte quién te lo pide porque en un periódico como el nuestro el trasiego es grande y resulta normal encontrar gente nueva cada poco. No te preguntas quién es el desconocido hasta que una llamada desde la mesa de cierre te exige explicaciones, que por qué has hecho ese cambio que ellos no necesitan en una página de Nacional, o de Cultura, y lo que les cuentas parece absurdo porque, además, te dicen que en Nacional o en Cultura ya no hay nadie. Nadie ha podido ir a verte a pedirte nada. En la redacción estamos solos, los de la mesa en un ala de la planta, y yo en la otra. No hay nadie más en el periódico a excepción de los guardias de seguridad en la entrada. Nadie me ha pedido nada con una extraña sonrisa pero yo le busco entre las mesas vacías, por los pasillos desiertos o los servicios solitarios mientras me pregunto, hablando solo en voz alta, por qué nadie querrá trabajar de noche en el periódico.


jueves, 18 de octubre de 2007

Entrevista a Queka Rey, jurado de ñh04


Os traemos una entrevista con Queka Rey, jurado de los premios ñh04 y jefa de diseño de El Economista, uno de los diarios más premiados.

Pregunta.- ¿Cómo funcional un jurado por dentro?
Respuesta.- Al ser personas que nos conocemos poco funciona de forma poco distendida al principio. En un primer momento, tanteas los niveles de valoración de cada uno. Por lo menos en mi caso.


P.- ¿Qué criterios se utilizan para decir que tal página es buena y merece un premio y cuál no?
R.- En el diseño de páginas. La consonancia entre la información y la presentación gráfica, y las reglas básicas de la tipografía y las artes gráficas.


P.- ¿Ha habido "peleas" por alguna página?
R.- Sí


P.- ¿Puedes valorar trabajos tuyos o te quedas al margen?
R.- Te quedas al margen


P.- En una profesión en la que casi todos nos conocemos, con sus filias y fobias, no se deja uno llevar por ellas...
R.- No. La valoración es muy profesional.


P.- ¿Influye la ideología del medio a la hora de valorar los trabajos, aunque sea de manera inconsciente?
R.- De ninguna de las maneras


P.- Habéis echado algo en falta?
R.- Mejores infografías.


P.- Alguna anécdota...
R.- Cualquiera de las que nos ocurrieron estarían fuera de contexto.

lunes, 15 de octubre de 2007

Cambiar, ¿para qué?

El cambio es como el talante. Ambos son neutros aunque haya quien los interprete como valores positivos. El talante necesita calificarse como bueno o malo, no se puede tener talante, se está de buen o mal talante, y el cambio en sí tampoco es ni bueno ni malo porque se puede cambiar a mejor o, sencillamente, empeorar. Esto viene a cuento del anunciadísimo cambio de El País, evidentemente, y de que no sólo es necesario analizar las estructuras, tipografía o color de las páginas, sino también su contenido, porque en última instancia las páginas se hacen para ser leídas.

Y leyendo el artículo que publica Javier Moreno, director de tan importante periódico en el suplemento especial que dedican este domingo a su cambio, uno podría sacar como conclusión, primera y apresurada, que estamos ante el típico texto retórico que con declaraciones grandilocuentes no nos dice nada... y no es así. Porque incluso dice cosas que no estoy muy seguro de que el director de El País nos quiera decir. La primera de ellas me deja estupefacto, por la afirmación en sí y porque no haya dejado estupefactos también a todos quienes opinan sobre el tema, sin mencionarlo, desde infinidad de tribunas electrónicas o convencionales: resulta que El País ha decidido cambiar ¡sin saber por qué! "¿Y para qué cambiar", dice Moreno en su artículo, "cuando logramos formular la respuesta, ya estuvo hecho casi todo". Todo un "comité para el cambio" nombrado por el director en el mes de febrero pensando para qué hacían lo que hacían mientras lo hacían. O sea, hacemos una cosa y mientras la hacemos pensamos para qué la hacemos. ¿Algo así, no? Puede que sea yo quien no lo ha entendido bien, pero estoy estupefacto y no se me pasa. Me atrevería a apuntar a tan docto comité, desde mi humilde posición, que tal vez una de las razones para el cambio podría ser... ¡para mejorar!, ¿no?. Pero claro, se trataría de mejorar uno de los modelos de mayor éxito en los últimos años no sólo de la prensa española (su diseño racional ha sido y es modelo de periódicos), sino internacional (El País ha contribuido, y no poco, a que se asocie periodismo de calidad con el formato tabloide, entre otras cosas. Un formato al que tienden ahora incluso los periódicos anglosajones). Claro que lo mismo tienen ahora otro modelo nuevo que crea escuela y por eso cambian. Aunque ellos dicen, tras meses de pensarlo, que cambian "por responsabilidad".

La segunda es una contradicción que pone de manifiesto que El País tal vez no está contando las cosas como son y que improvisa para justificarse. Escriben que su periódico evoluciona al igual que evoluciona la sociedad y lo ilustran en un artículo titulado "31 años de evolución", reproduciendo tres portadas y una página doble de distintos años con un pie común con el encabezamiento "cambio constante". Pero ahora se dan cuenta, dicen también a lo largo de todo el especial del domingo, que la sociedad ha cambiado y va a cambiar más y por eso tienen que hacer este cambio. ¿Pero no había evolucionado el periódico con la sociedad? Entonces, y volvemos al principio, al comité de expertos, ¿para qué cambiar? De haber estado evolucionando el periódico no necesitaría tan drástica puesta al día y mucho menos gastarse el dineral que se están gastando en ello, publicidad incluida. ¿No?

Evolución de las acciones de Prisa (editora de El País) en los últimos seis meses

Supongo que pensareis que este artículo es crítico con El País porque escribo desde donde escribo. No me escondo, estoy en El Mundo, pero también soy lector de El País (soy lector de los dos periódicos desde hace años) y creo que más allá de guerras entre medios y competencia entre empresas, en las que ni puedo ni quiero entrar, estoy aportando argumentos. Además, esto es encajabaja, y encajabaja no es El Mundo, ni siquiera es el blog del departamento de diseño del periódico El Mundo. Estoy diciendo que o bien El País no sabe qué le está pasando, y por eso "quieren entender", o si lo sabe no nos lo quiere decir. No nos quiere hablar de que su hasta ahora posición de privilegio parece amenazada y repiten la palabra internet, o global, en casi cada una de las frases de su especial sin que sepamos tampoco muy bién qué pretenden, porque en lo que se refiere a internet El País no ha logrado conectar como ellos quisieran. Y no nos lo dicen. No nos dicen que tal vez estos argumentos tengan más que ver con el cambio. También ayudaría mucho a entender, el magnífico artículo titulado "Arde Roma" que publicó el pasado 21 de septiembre el siempre brillante Pedro Cuartango, uno de los periodistas más cultos que conozco, no muy dado a la confrontación fácil, pero mucho me temo que está publicado en el eterno rival, El Mundo, y sufre por tanto del mismo sesgo que estas frases. Aún así, merece la pena, es certero, divertido y en El País nunca lo publicarían.

Sobre las tres páginas que hasta ahora hemos visto todos del nuevo diseño ya hemos públicado dos artículos y toda la blogosfera se ha ocupado ampliamente de ellas. Aunque es muy pronto para análisis porque un periódico ya dijimos que no es un prototipo, es algo más que necesita de los días para ser diario, se pueden lanzar algunas preguntas inocentes: ¿son esas las páginas de un diseño profundo o son efectismo, apariencia? ¿De verdad es un diseño para noticias diarias? ¿O simplemente para noticias? ¿Para informar? Porque no se tratará de adornar sólo el papel, ¿verdad? Miro las mujeres que miran en su modelo de apertura de Cultura y me queda claro. Hay que esperar, puede que nos hayan mostrado sólo las más "llamativas". Espero.


Y acabo como empiezo. Este artículo se titula con las mismas palabras que, además de aparecer en el artículo del domingo de Javier Moreno, pronunció en 1997 David García, director de arte del periódico entonces, y ahora. En un acto público celebrado en la Universidad San Pablo Ceu de Madrid, en el que yo estaba presente, el máximo responsable de diseño del diario independiente de la mañana con aspiraciones a diario global afirmó con total rotundidad que innumerables veces le habían preguntado por qué no cambiaba El País y que él siempre respondía lo mismo: "cuando algo tiene éxito no hay por qué cambiarlo"

El acento y el previo

Como mi gran amigo Blasco se me ha adelantado con respecto al especial que El País ha publicado este domingo respecto a su rediseño (y que cualquiera puede disfrutar en red), apuntalo el tema con tres apuntes.

1) El pasado miércoles 10 (salió publicado en el diario el jueves 11), Juan Luis Cebrián anunciaba en una conferencia en Vigo que la renovación iría más allá del diseño y la manera de contar las noticias. Los cambios afectarán a la mítica cabecera del periódico, por lo que "la marca" EL PAÍS se escribirá por vez primera con tilde "para que su grafía no entre en contradicción con las normas tipográficas que se aplican en el resto del periódico". Por lo tanto, se deshace el polémico diptongo, se ajusta la cabecera a la norma obligatoria de la Real Academia española y se modifica el Libro de Estilo, que hasta ahora decía: "Como licencia gráfica, la cabecera de EL PAÍS y las de sus suplementos no llevarán acento ortográfico cuando vayan compuestas por el tipo de letra utilizado para la marca registrada -la Claredon Medium-, pero sí en los demás casos".

Como curiosidad, Cebrián contaba en 1977, en el primer aniversario del periódico, que algunos académicos habían insistido en la necesidad de acentuar la i pese a que el título iba en mayúscula, mientras que los responsables de EL PAÍS opinaban que "la cabecera tiene un significado icónico no literal y nadie se para a pensar en el contenido de lo que define, pues todo el mundo identifica la cabecera con un periódico preciso." Se interpretaba así que la cabecera era ante todo un dibujo o un grafismo y que por ello no tenía necesariamente que estar en sintonía con las normas ortográficas.

El cambio creo que es acertado, más allá de dogmas.

2) La entradilla, ese recurso que parece caduco pero que considero utilísimo e imprescindible para el lector que va más allá de los titulares y que desea una visión global de los acontecimientos diarios, desaparece 31 años después. Sensible pérdida.

3) En el suplemento al que hacía alusión Luis, concretamente en las páginas que analizan la (sutil) evolución de la maqueta del diario, aparecen ya varios ejemplos de lo que nos vamos a encontrar el próximo día 21. Le van a venir bien los retoques, intuyo, pero los cambios -como nos temíamos- son sutiles. Compartimos estos ejemplos con vosotros. Para ir abirendo boca, más que nada.

domingo, 14 de octubre de 2007

Los cambios de El País



El País publica hoy en su suplemento Domingo los cambios con los que va a salir a partir del 21 de octubre. Trece páginas en las que se desgranan los nuevos cambios, se hace un repaso a la historia del periódico y se realiza una especie de making off del proceso que comenzó hace nueve meses y que supondrá el primer cambio desde que salió el 4 de mayo de 1976. El estudio encargado del cambio de imagen ha sido Palmer y Watson.

En la primera página el director Javier Moreno justifica estos cambios porque quieren seguir siendo espacio público, "conectar con las generaciones que se convertirán con el eje de este país" durante los próximos 20 años.

Estos son los principales cambios:

- Modifica el orden de las secciones y crea otras nuevas. Es el más difícil de todos porque supone luchar contra una inercia establecida durante más de 30 años. Se agruparán en un gran bloque las informaciones de Internacional, Nacional y Economía, dando paso a la sección de Opinión. Después de esta sección, otro gran bloque con Sociedad, Cultura y Deportes, con una doble página inicial que servirá de transición entre Opinión y estas secciones, donde se planteará de forma amplia un tema.
Otro cambio importante es la sección de Local. Deja de estar integrada y pasa a ser un cuadernillo independiente donde se apostará por propuestas informativas y gráficas más claras y audaces (¿algo parecido al proyecto M2 de El Mundo?, ya veremos).
Por último, en la primera y última página se realizarán modificaciones que mantengan su identidad pero que realcen su elegancia y recojan la diversidad del periódico.

-El País Semanal. EPS deja de existir y vuelve a llamarse El País Semanal, con un cambio radical en todas sus páginas, tanto de contenido como de imagen. La revista está diseñada por el prestigioso diseñador Óscar Mariné y constará de tres partes: en el centro de la misma, reportajes, entrevistas, viajes, ecología, etc. En la primera parte, "Intro", una sección que va más allá de una agenda y se convierte en una crónica cultural y social. Y por último, "Estilos de vida", una revista de revistas con lo mejor de la moda, interiorismo, diseño, salud, Internet, etc. Y por supuesto los columnistas.

-Domingo también cambia y se convierte en un suplemento de investigación y reportaje con la actualidad en el punto de mira. El rediseño también viene de la mano de Mariné, donde ha buscado "más confort y comodidad" a la hora de acercarse al texto. Atentos a este concepto: la página que flota.

-Babelia pasa a tener más secciones y más páginas para abordar la cultura desde todos los ángulos.

-elpais.com, más dinámico, personalizable y multimedia.

- Tipografía. Aquí viene uno de los más suculentos. El País abandona su tipografía actual y apuesta por una de creación exclusiva de la mano del portugués Mario Feliciano: Majerit, más ancha que la Times y según los responsables de diseño del periódico "más moderna y legible". En Domingo también usarán Arnhem y Utopía.



Estaremos atentos el próximo día 21 para ver todos estos cambios. Os mantendremos informados.

viernes, 12 de octubre de 2007

Todas las fotografías juntas

Cualquier exposición de las que se celebran en el Canal de Isabel II merece la pena aunque sólo sea por conocer este lugar mágico: el interior del antiguo depósito de agua de Madrid. Pero es que en esta ocasión de sus paredes de ladrillo y bajo su cúpula de acero cuelgan imágenes de la muestra "Momentos estelares. La fotografía en el siglo XX".


Bueno, siendo precisos, es la segunda parte de la exposición, porque para ver la primera hay que empezar en el Círculo de Bellas Artes, otro edificio de los que merecen la pena, modernista, y donde tienen la tonta costumbre de cobrarte 1 euro por entrar si no eres socio. Y yo no lo soy. Eso sí, en cuanto ves las imágenes te olvidas del euro porque en el Círculo están absolutamente todos, agrupados, más que ordenados cronológicamente, por momentos, escuelas que fluctúan entre las dos corrientes fotográficas del siglo XX: la documental y la artística. Y además se muestran sus principales obras, algunas iconos mundiales. Cito a los fotógrafos que me voy encontrando en las paredes sin seguir un orden: William Klein (imágenes de su antológico New York), Diane Arbus, Lee Friedlander, Robert Doisneau, Robert Frank, Otto Steinert (sus fotografías subjetivas), Weege, Aarond Siskind, Helen Levitt, Dorothea Lange (su fotón de 1936 con esa mujer que ahora representa la depresión norteamericana), Walker Evans, Josef Koudelka, Henri Cartier-Breson (no digo nada), Agustí Centelles, W. Eugene Smith, Robert Capa (su foto del miliciano español, claro), Harry Callahan (elegante y sutil), Bill Brandt, Grete Stern, Manuel Alvarez Bravo, Brassaï y André Kertész (surrealistas y divertidos), Lee Miller, Man Ray, Irwin Penn, Helmut Newton, Richard Avedon, August Sander, Ortiz Echagüe, Edward Steichen (y su impresionante foto de Nueva York, de 1905, para mí una de las más poderosas imágenes que nunca se hayan tomado), Alfred Stieglitz, Paul Strand, Edward Weston, Tina Modotti, Ansel Adams (perfección técnica absoluta), Imogen Cunningam, Moholy-Nagy, Berenice Abbott, Leni Riefenstahl, Sebastião Salgado, Cristina García Rodero, Ramón Masats (vuelvo a mojarme: el más grande fotógrafo español hasta ahora), Catalá-Roca o Mario Giacomelli. Y no cito a todos. Ni puedo ponerlos en negritas porque si alguien quisiera imprimirlo podría quedarse sin tinta en la impresora, como yo sin respiración viendo allí las copias directas de las fotos. No fotos de fotos como reproducen las publicaciones.


En la segunda parte del Canal, además de ser menos, los momentos me parecen menos estelares, anque los autores, más recientes, sí lo son: Mapplethorpe (dos imágenes sin la fuerza de las mejores suyas), Nan Goldin, Nobuyoshi Araki, Larry Clark, García Alix, Duane Michals (imprescindible, hay que conocerle), Cindy Sherman, Chema Madoz, Ouka Lele, Fontcuberta (una triste imagen que no hace justicia a este grandísimo fotonarrador de los sueños), Javier Vallhonrat, Marina Abramovic, Andy Warhol (con una pobre serie de banderas en blanco y negro escondidas un rincón en las que nadie muestra interés, y con razón) o David Hockney con un magnífico fotocollage.

La exposición surge a raíz de la publicación en español del "Diccionario de fotógrafos del siglo XX", de Hans-Michael Koetzle, un volumen con la biografía de 549 importantes fotógrafos ilustrado con más de mil fotografías y que te venden allí mismo por 60 euracos del ala. Los vale.

En definitiva, un auténtico lujo al alcance de quienes estamos y quienes estéis estos días en Madrid (hasta el 18 de noviembre) y, en especial para quienes nos dedicamos o alucinamos con el periodismo visual.

Postdata: Encajaba, animados por el evento, quiere empezar desde ahora con los "Momentos Estelares de la Fotografía del siglo XXI" publicando imágenes de autores todavía no consagrados, pero que están convencidos de que todo se andará. En este caso presentamos "árboles enamorados en una alambrada de la ciudad de Getafe", 2007, copia en blanco y negro en papel de fibra, digitalizada, cuyo autor permanece todavía en un modesto anonimato.

jueves, 11 de octubre de 2007

Busca las diferencias

Os traemos hoy un juego para sacaros un poco del tedio. Se trata de buscar cuáles son las diferencias entre estos cuatro periódicos estatales chinos. No hace falta saber chino, no somos tan crueles. Aquí están:


A los que apenas han sacado diferencias, tranquilos. Los cuatro diarios chinos han sacado casi la misma maqueta, con las mismas informaciones, los mismos titulares y las mismas fotos. Huele un poco a rancio y a otra época de la República Popular China, pero ya se sabe cómo son estos chinos. El más osado es el primero, que se atreve hasta a poner un poco de publicidad (qué valientes, ¿no conocen eso de las torturas chinas?).

miércoles, 10 de octubre de 2007

El triunfo de la ortodoxia

Acudo a este blog invitada por mi compañero Luis y para aportar un poco del sentido y sensiblidad femenina de la sección a este espacio.

El asunto que vengo a proponeros es que a veces lo más efectista visualmente no es la opción más válida en prensa. Os lo explico a continuación.

Se trataba de hacer una apertura de sección de cultura para el periódico del domingo. El jefe, el entrañable Manu, me entrega una foto maravillosa de Enrique Bunbury y pocos condicionamientos más para confeccionar la página. "Que quede bien", me dice. "Haz lo que quieras".

El primer planteamiento lo realizo utilizando los elementos que caracterizan a una apertura de sección y ordenándolos de la manera ortodoxa que marca el prototipo del periódico. El resultado es este:

Es una página correcta. Pero ante la invitación de Manu la tentación es más fuerte. Y comienzo a mover los elementos intentando conseguir algo diferente, más espectacular. Así que decido prolongar el fondo de la foto de tal manera que la mancha gráfica ocupe la máxima altura y calar dentro el título en blanco. Esta es la otra versión:


Como veréis desde luego es diferente. Pero... qué ocurre, no está dentro de la línea del periódico. Consultas con los compañeros, ¿qué os parece?, a mí me gusta más esta pero...

Y es que un periódico hay que contemplarlo con un todo. Los lectores, quizá inconscientemente, piden un sentido de continuidad en la presentación de su diario. Por eso, es importante mantener el ritmo de lectura, por eso al final triunfa la ortodoxia.

Esmeralda Sáez

martes, 9 de octubre de 2007

El cambio de El País ya tiene fecha: 21 de octubre

El Consejero Delegado de PRISA, Juan Luis Cebrián, puso ayer fecha a uno de los cambios más esperados del mundo del periodismo en habla castellana: el rediseño de El País. Aunque en principio parecía que los cambios iban a ser profundos, desde nuestro blog amigo Maquetadores ya nos advertían hace días que la revisión del diseño del diario no iba a ser tan quirúrgica, compleja y necesaria como se esperaba, haciendo alusión a que Cebrián había paralizado tan intensa operación a fondo (léanlo aquí).

Entre los cambios que se oían, parecía incluirse el desplazamiento de la cabecera a la izquierda de la portada, y yo creo -tal y como habíamos ido leyendo en algunos blogs- que iría acompañado de encaminar el diseño general a las pautas de algunos diarios nórdicos o del norte de Europa como Politiken -premio de la SND al diario mejor diseñado-, o De Morgen, bajo criterios de limpieza, estructuración clara y moderna de la información [destacados], desahogo visual, profusión de blancos estratégicos -al estilo Babelia o ABCD, suplementos culturales de El País y ABC-, mayor uso del color, etc. Esa es la tendencia actual. Y eso debió parecerle demasiado a Cebrián. Pero seguro que no le haría ascos a una imaginaria fusión entre The Times y The Guardian, por ejemplo.

De todos modos, si ABC, dentro de su rigidez, fue capaz de modernizar su diseño, ¿por qué tanto miedo? El número 1 en ventas de la prensa de información general pesa mucho, supongo.

Ahora sabemos por boca de Cebrián algo más de lo que nos vamos a encontrar. A saber:

- Nuevo subtítulo de portada: EL PERIÓDICO GLOBAL EN ESPAÑOL.

- Redaccionalmente hablando, mayor relevancia de las informaciones, "con noticias que no pueden encontrarse en otros medios, incidiendo en más y mejor contexto, más análisis y opinión, más investigaciones."

- En cuanto al diseño, "generalización progresiva del color, lenguaje gráfico e infográfico más atractivo y contundente y mayor flexibilidad de formatos y titulares."

- Nuevos diseños de El País Semanal (recuperando esa cabecera y perdiendo el acrónimo EPS), Domingo y Babelia, realizados por el equipo del diseñador Oscar Mariné. Sobre el primero, "se trata de una apuesta por el periodismo, el espectáculo y la modernidad". Sobre los segundos, "realzan la elegancia y las apuestas informativas y literarias" de ambos suplementos.

- Modificaciones en la primera página, aparte del nuevo lema, que reflejarán "la diversidad del interior y las innovaciones en las secciones."

- Nueva última.

Salvo el caso de Mariné y los suplementos, el rediseño ha sido obra del equipo de Ally Palmer y Terry Watson (Edimburgo), encargado de los rediseños de Le Monde, Politiken, The Scotsman, The European, Algemeen Dagblad o Cinco Días, ya para Prisa.

José Manuel Calvo, subdirector, en palabras recogidas por Maquetadores, avisaba: "Venimos de un periódico que ha creado escuela en los últimos 30 años, por lo cual esta atención a lo gráfico no irá en contra de la seriedad y la elegancia que ha caracterizado al periódico siempre."

Pues hala, semana y media de espera y salimos de dudas.

lunes, 8 de octubre de 2007

Manipulación o cómo ser pillado con el carrito del helado


A través de un chivatazo en la web de fotografía Xataka Foto nos enteramos de que en As.com, web del Diario AS, se ha producido un caso flagrante de manipulación informativa.

Situémonos: hace dos semanas el Atlético de Madrid juega en el Vicente Calderón contra Osasuna; la web del periódico recoje aún hoy la crónica del partido y la viste con una fotografía. En el texto se lee: "EL DETALLE: Gran entrada en el Calderón. Domingo a las cinco de la tarde como toda la vida, buen tiempo y un Atleti en racha. Por una vez, la afición, que nunca falla, tenía todas las razones del mundo para acudir al Calderón y, por supuesto, no falló. 50.000 espectadores llenaron las gradas y su equipo respondió con una victoria contundente. Los pitidos de hace un par de semanas están olvidados."

Uno mira la foto y dice "pues sí, había llenazo", pero la amplías, la observas bien y te das cuenta de que alguien le dió al Photoshop más de la cuenta. Se conoce que hablar de lleno y poner la imagen elegida con las gradas semivacias no quedaba bien, por lo que alguien decidió clonar a diestro y siniestro. Podéis buscar a los numerosos Wallys que la foto contiene, hay repeticiones tremendas sobre todo en la parte superior.

Es una web, pero en la prensa de papel también pasa. Y no debe permitirse. Y hay que denunciarlo.

Véanlo: Crónica Atlético-Osasuna

Algo sobre el ritmo de lectura... poco


Escucho a Amy Winehouse y su música revival con sabor añejo de hace cuarenta años suena nueva y fresca por un increíble misterio. No creo que sea su voz que juega a ser cálida y suave para un compás después emerger poderosa entre toda una sección de viento a la que llega a silenciar. Estoy convencido de que es el ritmo, ese infinitesimal retardo con el que se divierte entrando en algunas frases, en el estribillo de Rehab, canción que abre su segundo disco y nos mete de cabeza en él con sus implacables pulsaciones. El ritmo de la música, tan concreto y aprehensible, me lleva al carácter vaporoso del ritmo de lectura, tan abstracto e intuitivo, escurridizo, tan difícil de definir que en ocasiones nos han recriminado o incluso felicitado por él sin que fuéramos conscientes de haberlo manejado. En su decepcionante El diseño de la noticia, Robert Lockwood se atreve a escribir sin ningún complejo que "debido a que sus relaciones espaciales internas son invariables y no expresivas" (está ‘analizando’ una retícula), "su estructura no se lee como una forma sino más bien como una pauta a seguir que indica la velocidad y el ritmo en un campo neutral libre de la actividad emocional". Y se queda tan ancho. Cuando habla de toda una sección, que es de lo que se trata, no tiene rubor ninguno en firmar simplezas como que una "cuidadosa planificación permite a los redactores jefe prestar atención especial a la velocidad y el ritmo de la presentación y a la calidad formal". Y ya está. Lockwood ha escuchado trompetas, no música.

Si cuando hablamos de equilibrio nos referimos fundamentalmente a las relaciones entre los elementos de una página, el ritmo tiene que ver con las relaciones de una página con otras. De la disposición de los temás a través de varias, de toda una sección, de todo el periódico. De repeticiones y ciclos. De mantener la atención y la tensión con dosis regulares o no. Y en eso, por desgracia, nosotros no tenemos el control que Amy derrocha haciendo travesuras con el tempo de sus composiciones, porque en el diario en el que trabajamos el ritmo está supeditado por completo a la jerarquía informativa, a la valoración de las noticias por parte del director, que para eso está y está siempre, un valor que fluctúa en ocasiones durante todo el día, desde la primera reunión por la mañana hasta los minutos previos al cierre.

Así salieron publicadas tres páginas de la sección de España


Que bien pudieron haber salido así...


O incluso así. El número total de posibilidades se obtiene al combinar tres elementos tomados de tres en tres. Todo depende de cómo se valore el contenido de las páginas en cada momento y la importancia que "ganen" o "pierdan" durante el día

Aunque he de confesar que a mí lo que realmente me interesa es la música, veo a Javier muy preocupado por el ritmo de lectura, porque se le escapa entre los dedos y las teclas del ordenador, tan distintas a las teclas del piano que acompaña a la británica. Como que le jode el no poderlo racionalizar, que sólo la intuición lo maneje y, desde luego, imposible para nosotros en otra forma que no sea decreciente, de más a menos, el periódico es así. E incluso así, le digo, tampoco actuamos nosotros en ese ritmo tan poco sinuoso porque el orden de nuestras páginas se suele decidir después de que estén pintadas, cuando ahora ya importa menos lo que antes más importaba. No, no, no. Pero calla, ahora canta en directo casi a capela y es mucho mejor, seguro que así entendéis lo que digo sobre el ritmo porque en las páginas es sólo una metáfora y aquí existe, escucha cómo se detiene, cómo dejándose llevar por la pura intuición, ella sí puede, decide a cada instante si hacer sonar su garganta o dejar que el silencio siga construyendo música.



miércoles, 3 de octubre de 2007

De los ganadores del ñh04... y un pequeño tirón de orejas

Los premios de la SND española y portuguesa ya tienen ganadores. Podéis consultar la lista completa en esta dirección. La entrega de premios será del 21 al 23 de noviembre en Barcelona.

Los periódicos mejor diseñados han sido Público (Portugal), el Economista y Superdeporte (Valencia). La mejor portada del año ha correspondido a El Periódico de Catalunya, por su atrevida puesta en página del "Cabreo" de los ciudadanos barceloneses por los apagones del pasado verano. La portada en negro con letras en rojo. Podéis ver la reseña que hicimos aquí. El mejor conjunto de portadas también ha sido para El Periódico.

En cuanto a los medios on-line, el ganador ha sido elpais.com, a ver si así se recupera de los disgustos que le dan sus "amigos" de Nielsen. La lista completa de ganadores on-line, aquí.

Queremos hacer una mención especial a el Economista, un periódico que nos gusta muchísimo y que se ha llevado un buen puñado de premios. Una joya muy mimada, uno de los mejores diseños que se han hecho últimamente en nuestro país, no como otros (y no miramos a La Vanguardia, que tiene tela para cortar).

Aunque todo puede pasar, no creemos que el año que viene vaya a resultar tan premiado un diseño tan poco coherente con la identidad del periódico centenario. Cada página parece confeccionada con un criterio distinto, cada una es de su padre y de su madre y todas, al parecer, ya no son del inimitable Carlos Pérez de Rozas, del que os hablamos anteriormente.


Sin comentarios

P.D. De momento no hay premios al mejor blog especializado, pero todo se andará.

Mario Benito / Luis Blasco

martes, 2 de octubre de 2007

Dos en la carretera.
Cuaderno de bitácora de un viaje a Estepona (y II)

¡Qué útiles son los navegadores! ¿verdad? Hasta que tienes que llevar a alguien a un punto concreto. Entonces, claro, todo falla. Al término de la distendida cena del jueves, nos disponíamos a regresar a nuestros hoteles. Estábamos esperando a los taxis que iban a recoger al personal, cuando, amablemente, nos ofrecimos para llevar de vuelta a alguien. Norberto, como siempre, se lanzó sin dudarlo. También se apuntó Miguel Buckenmeyer, al que acabábamos de conocer esa noche, y con quien charlábamos animadamente sobre el Economista, y amigos comunes.

Una vez en el coche, y confiando en nuestro guia electrónico, empezamos la ruta. El hotel estaba a unos cinco minutos en coche del restaurante. Veinte minutos después, estábamos perdidos en la autovía que lleva de Málaga a Algeciras. ¿Y el GPS? El dichoso aparatito, que durante todo el viaje había sido un incansable detector de radares ocultos, que había descrito hasta la menor incidencia de la carretera, se empeñaba en guiarnos a algún punto situado en el Estrecho de Gibraltar. Lo que era una amable conversación mutó en silencio incómodo. Después, a unas risas nerviosas. Era yo. En estas situaciones, no puedo evitarlo, me da por reírme. No sé si a ellos les hacía mucha gracia. Tardamos casi 35 minutos en ir a un hotel que estaba a 4 km. del restaurante. "Hola, esto es un secuestro exprés. Es una táctica que utilizamos habitualmente para que la gente conozca el blog" le iba diciendo a Miguel, que me miraba un poco desconcertado. "Cuando nos confirmes que colaborarás con nosotros, te llevamos al hotel…" ¡Qué desastre! Menos mal que nos indicaron en una comisaría de la zona. Al final, el secuestro no fue a mayores. Les vimos entrar en el hall, mientras a los dos se nos escapaba una risilla entre dientes… Eso si que es vender un producto. Para rematar, paramos en una gasolinera a comprar unas botellas de agua y un adaptador para euroconector (7 euros en total). Histórica la cara de la empleada tras su cristal de seguridad cuando Luis pretendió que le pasara la tarjeta de puntos de la gasolina por la compra. Lo dicho, Luisito, una máquina de anécdotas.

El segundo día de conferencias fue más tranquilo en cuanto a anécdotas, aunque también ocurrieron cosas. Pudimos comprobar el fino humor surrealista de Toni Cases cuando dijo no recordar la maqueta de El Periódico (cuando alguien sugirió el parecido entre este diario y Público) y comprobamos que Miguel Buckenmeyer es capaz de mantener el mismo, exactamente el mismo tono de voz durante más de una hora de ponencia. Sin embargo, lo más destacable ocurrió antes de la cena. Una vez acabamos las charlas, sobre las ocho de la tarde, cargamos a unos valientes salvadoreños en el coche (ya habíamos aguantado todo tipo de bromas por perdernos la noche anterior) y fuimos todos al hotel de los ponentes. Allí, con la satisfacción del trabajo terminado, nos relajamos con unas cervecitas mirando al mar y charlamos largo y tendido sobre el blog y lo asombroso de internet mientras todo el mundo se acercaba al portátil y opinaba sobre nuestro encajabaja.


Jordi Catalá, Javier Sicilia y Rafael del Moral
siguen las actualizaciones de encajabaja


En la cena continuó el buen humor y pudimos comprobar que la gastronomía andaluza traspasa fronteras. Lucie Lacava, devoraba pescaito frito mientras aseguraba, ante la incredulidad de Luis, que allí en Canadá lo tomaba con frecuencia.

A la mañana siguiente tocaba volver a casa. Recogimos en el otro hotel a Pedro, colaborador del estudio de Miguel Buckenmeyer y salimos pitando, porque Luis tenía que estar por la tarde en el periódico. Con las prisas, fuimos terminado el último post en el mismo coche, con los mareos y el recalentamiento de la propia anatomía que eso conlleva (nunca escribáis con un portátil sobre el regazo, amiguitos). Luis siguió enfadándose conmigo porque pegué varias cabezadas durante el viaje, ronquidos incluídos. En el viaje hicimos un par de paraditas para comprar los típicos regalitos para los compañeros. En una de esas ventas de carretera, apareció la botella de moscatel más hortera de la historia. La compré (sí, yo, lo reconozco) y está siendo el cachondeo de la semana en el periódico. Personal de todas las secciones vienen en peregrinación a comprobar si efectivamente es tan espantosa como parece. Pues sí, lo es. ¿Y qué? La defiendo plenamente. Será fea, terrible, pero lo de dentro estaba de muerte. Para mi alivio, un compañero de trabajo, el irrepetible Miguel Ángel Majadas, ha venido a reclamar la botella de Moscatel para su colección privada de botellas. Me alegra ver que a alguien le gusta, por lo menos. Y eso que a ésta le faltan unas castañuelas que iban en el tapón y que alguien requisó.


La Botella


Nosotros también te queremos


Acabamos de ver que El Norbi nos ha nombrado "sucesores" de Visualmente, su blog, el blog de referencia en lengua castellana en lo que a periodismo visual se refiere. Maradona nos ha nombrado los nuevos Messi, y eso es mucho. Tanto que nos tiemblan las piernas. Entre lágrimas, estamos intentando asumir tan alto honor, e intentaremos saber estar a la altura de tan generoso reconocimiento.

Una vez más, ¡gracias ché!.

Dos en la carretera.
Cuaderno de bitácora de un viaje a Estepona (I)

¡Road to Estepona! Con este lema, nos fuimos picando el uno al otro durante la semana anterior al viaje. Lo cierto es que el miércoles, cuando partíamos en el coche de Luis, teníamos por delante cuatro días de viaje, de ponencias, de gente por conocer y ganas, muchas ganas de disfrutarlo. Lo que no sabíamos es la cantidad de anécdotas que el viaje iba a deparar. Tantas que merecen esta contracrónica.

En primer lugar dejadme que os sitúe. Como sabéis, nos desplazamos a Estepona mi compañero Luis Blasco y servidor. Luis es un personaje en toda la dimensión de la palabra. Le conozco hace ya muchos años, y pensaba que le conocía bien. Pero este viaje me ha descubierto una dimensión nueva de él.

Luis es de las personas más serias y responsables que conozco. Bueno, no. Mi padre también es muy serio y responsable. Tanto es así, que en algunos momentos del viaje me ha dado la sensación de estar viajando con él. Luisito tiene un aprecio por las normas, una conducta tan cívica y disciplinada en casi cualquier materia, que a veces me ha hecho sentir como un hooligan en plena final de Copa de Europa. ¿He dicho ya que Luis tiene siete años menos que yo?

Mira que me lo advirtió. "Yo no corro con el coche. Yo pongo el limitador a 128 km/h y pa'lante". Y yo, iluso, pensaba que me estaba vacilando. Pues no. Efectivamente: limitador a 128 km/h y pa'lante. Eso significa 128 como máximo, claro. O 105 km/h dependiendo del tramo. O a 60 km/h por las rectas de Despeñaperros. Y así, hasta Estepona. Conste que no me quejo ¿eh? No voy a ser yo el que os incite a correr como locos por las carreteras, a no respetar las normas de tráfico, a meter quinta cuando se llega a 3.000 revoluciones...

Hay que decir, en un gesto que le honra como amigo, que él, no fumador militante, me dejó fumar en su coche. Eso sí, luego me fue echando la bronca un buen rato porque se me ocurrió tirar la colilla por la ventana para no apestarle el coche a tabaco. "Así se queman los montes", me decía. De nada servía explicarle que había apagado la colilla antes de tirarla, su código marine de conducta había sido vulnerado de nuevo.

De camino a Estepona, hicimos una parada técnica en Martos (Jaén), primer productor mundial de aceite de oliva del mundo. En ese pueblo he pasado yo lo mejor de mi infancia. Como los dos somos de buen comer, llevé a Luis a comer al restaurante Morys, lugar cumbre de la gastronomía marteña. Todavía me lo está agradeciendo. Tanto es así que Luis acabó su comida con unos "¡Viva el Morys!", para regocijo del personal. Si pasáis por allí, os lo recomiendo vivamente.

El camino hasta Estepona siguió su curso (a 128 km/h cuesta abajo) y llegamos por la tarde-noche. Nueva parada técnica en Carrefour, para comprar cosas que nos hacían falta. Allí pudimos ver las impactantes campañas de lanzamiento de lo últimos estrenos en DVD y Luis probó unos cincuenta desodorantes hasta que eligió el que más le gustó. Lo dicho, un crack en toda regla.

"Epetacular lanzamieto" en Duvedé



¡Ay, la tecnología!

Cuando llegamos al hotel, primer contratiempo. El imprescindible Wifi para actualizar el blog a diario no funcionaba. O sí, pero el personal del hotel no tenía mucha idea de cómo usarlo. Era un hotel con campo de golf, típico de la zona. Lleno de alemanes a tope, (sólo vimos unas españolas el último día). Por cierto, ¿dónde hay que escribir para explicar al mundo libre que las sandalias nunca, nunca se deben llevar con calcetines de lana? Es que duele a la vista. Aparte de esto, a mí el hotel me recordaba a algo, pero no conseguí caer hasta el segundo día. ¡Era el hotel del resplandor! Con sus niñas con triciclo corriendo por los pasillos y todo...

El caso es que el puñetero wifi no funcionó ningún día y nos tuvimos que buscar la vida. Y ahí entra Blasco, de nuevo. Mi compañero tiene un dominio de internet y de los ordenadores que facilita muchísimo el trabajo en este blog. Al final consiguió conectarse en los sitios más inverosímiles. En una heladería tomando café, o en la primera planta de la Casa de la Cultura de Estepona, con medio cuerpo asomado por la ventana. Así que si habéis podido seguir la cumbre puntualmente tenéis que agradecérselo a él. A Norberto Baruch le encantó ver como actualizábamos a diario, aún con riesgo físico para los integrantes del equipo, lo que le empujó a nombrarnos "mejor blog del momento" (es un cachondo). Yo le dije que eso, viniendo de él, es como si Maradona te dice que le has dado un pase de tiralíneas. Como El Norbi es argentino, la cosa le tocó la fibra y los abrazos fueron de escándalo.

"El Norbi" con los desplazados de encajabaja


El ambiente entre ponencias (de ellas ya tenéis cumplida información en posts anteriores) fue magnífico. Da gusto encontrarte con compañeros de profesión tan majetes y accesibles. Ha sido una auténtica gozada. Y una gratísima sorpresa comprobar la excelente acogida que está teniento el blog en el mundillo. Días después seguimos emocionados por la respuesta de todos a nuestro humilde trabajo.

Para la cena del primer día quedamos con todos los ponentes en el restaurante "El frenazo". Nos perdimos un poco, porque el GPS empezó a anunciar lo que vendría después. Aún así conseguimos llegar para ver como el Madrid ganaba inmerecidamente a mi pobre Betis. Disfrutamos de una magnífica cena (el pescadito de Estepona, como ya se ha dicho, rico, rico) en compañía de Mario Tascón, Jordi Catalá, Javier Sicilia, Manuela Mariño y Orlando Romero, que nos invitó a visitar Cuba. ¡Cuadrando fechas estamos Orlando!

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Mañana, segunda parte de este viaje cargado de anéctodas. Os doy un aperitivo: un secuestro, el pescaíto frito canadiense, una reunión de amigos con vistas a la playa y la botella más fea del mundo.

sábado, 29 de septiembre de 2007

Segunda Jornada de la Cumbre Mundial
de Diseño en Prensa de Estepona

Segunda jornada de la Cumbre y segundo plato con muchos conferenciantes interesantes. Hoy era el turno de Claudio Rodríguez, Javier Sicilia, Lucie Lacava, Toni Cases (sorpresa de última hora), Miguel Buckenmeyer y Juan Durán junto a Lafitte Fernández. Un plato muy variado donde se juntaban maestros de universidad, diseñadores de periódicos e infógrafos.

Claudio Rodríguez
Diseñador mexicano con un amplio currículum, Rodríguez es profesor de Diseño en la Universidad Nacional Autónoma de México. Y he aquí uno de los hechos que diferencia a América Latina de Europa: ellos tienen un “diplomado”, como le llama él, de diseño que se imparte en la facultad de arte de la UNAM. Y crearon este título porque “había una necesidad de profesionales” formados en este campo.

En los siete meses que dura el curso, los alumnos, no más de 15 seleccionados rigurosamente, según nos comentó en una charla posterior, estudian tipografía, creatividad, diseño, etc. Todo enfocado a un nivel muy práctico, haciendo rediseños de diarios, buscando nuevas fórmulas, trabajando con tipografías, con planillos reales, con publicidad, es decir, como una auténtica redacción. Incluso hacen un libro de estilo propio, que según nos mostró incluye todos los aspectos que deben tenerse en cuenta en el rediseño de un periódico y su posterior desarrollo.

Claudio Rodríguez, profesor de la Universidad Nacional
Autónoma de México / Reportaje Gráfico: Luis Blasco

Una formación muy completa en la que buscan "educar en lo gráfico", en cómo usar la ilustración dentro de la página, en definitiva, hacer periodismo desde un punto de vista visual.

Toda una suerte poder contar con este tipo de carreras que en Europa no son tan comunes, por lo menos en España y que nos han puesto los dientes largos, por lo extenso y por la calidad, a más de uno. Profesionales 100% preparados para salir al mercado laboral.

Javier Sicilia
Tras trabajar en ABC, El País y La Razón como infógrafo, lo que le da la visión del trabajo a diario en equipo, desde 2004 tiene su propio estudio, lo que le ha permitido ver cómo es el otro lado de la moneda. Ha participado en proyectos editoriales de gran envergadura, como la enciclopedia de la Guerra Civil Española o la del Franquismo, de la que nos ha enseñado excelentes trabajos durante la charla.

Sicilia defiende que la infografía no es algo actual, en los periódicos antiguos ya se ilustraba con mapas, dibujos, grabados, etc. Por lo tanto su labor es de continuidad, seguir informando, pero con nuevas técnicas y con una representación muy visual.

Javier Sicilia mostrando uno de los gráficos de su estudio

Hemos podido ver gran parte de los trabajos que él llama infografía de guerra con motivo de las enciclopedias de la Guerra Civil y del Franquismo. Un trabajo muy duro en el que la documentación “es esencial” y en el que la labor de “limpieza” ha resultado básica, porque los mapas del ejército estaban cargados de información. Una ardua labor en la que se ha aligerado la información con la organización coherente de los datos y el uso de una paleta de color muy suave. Eran gráficos de un planteamiento muy complicado porque los temas se repetían, pero siempre se le intentaba dar un enfoque diferente introduciendo elementos que despiezaran más la información. Y todo con poco tiempo, porque los plazos oscilaban “entre dos días y una semana”.

También nos habló de su trabajo para el prototipo del Público. El estudio Sicilia ha realizado los gráficos del número 0 del periódico. Su trabajo ha servido para dar forma al periódico y a partir de ahí la recién creada sección de infografía del periódico ha tomado las riendas desarrollando su propio trabajo. Está convencido de que la sección sabrá mantener e incluso mejorar lo que ellos han aportado.

Lucie Lacava
Siempre es de agradecer una voz femenina dentro del mundo del diseño. Y mucho mejor si es la de Lucie Lacava, con más de cien premios internacionales recibidos por su diseño editorial e identidad corporativa. La trayectoria de su estudio incluye el rediseño de más de cincuenta cabeceras en todo el mundo.

En esta charla, Lacava ha explicado cómo ha sido el rediseño del Telegraph Journal, un periódico local canadiense de origen familiar. Con un diseño inspirado en los años 80, está dirigido a un público de clase trabajadora. La nueva dirección del periódico quería, como viene siendo habitual, un nuevo diseño que rompiera la tendencia actual y fuera moderna e impactante, para “convertir un periódico local en un periódico nacional”. Inspirados en fuentes tan diversas como el diseño de mobiliario o la pintura, han conseguido un producto del agrado de los máximos responsables del diario, algo que no siempre es posible.

La canadiense Lucie Lacava

También nos ha obsequiado con el proceso de rediseño de la Primera Revista Latinoamericana de Libros. Desde el primer momento se dieron cuenta que el rediseño no estaban en las páginas interiores, estaba en la portada y la problemática de traía un nombre tan largo. La solución fue utilizar las iniciales para que formaran una palabra totalmente legible y reconocible. El resultado lo podéis ver en www.miroeditores.com

Toni Cases
La expectación tras saber que el mismísimo Toni Cases estaría en la Cumbre era máxima. Todos esperábamos que hablara del Público largo y tendido, explicando ampliamente cómo ha sido el proceso de creación del diario. Pero nos hemos quedado con la ganas, la verdad.

Tras mostrar brevísimamente el rediseño de los periódicos en los que ha trabajado en los últimos 12 meses (una decena de países como Rusia, Polonia, Argentina, etc.) ha entrado en materia: Público.

Toni Cases, responsable de Cases i associats

El proyecto nació hace dos años y medio. Pensaban que en Madrid existía un espacio en la izquierda para un nuevo periódico. Manos a la obra, decidieron salir a la calle hace poco más de un año con el objetivo de hacer un periódico de calidad, pero con “pocas ideas nuevas”, como él mismo reconocía. Tenían claro que la portada tenía que ser muy llamativa, con pocos temas para poder competir en el kiosco, con 5 o 6 páginas que concentran “todos los temas de los que necesitas saber para charlar en el bar ese día”. Pero también tienen secciones fuertes, como Economía y un contenedor de minisecciones englobadas en dos Ciencias y Cultura. La sección de Deportes, al estilo inglés, domina la contraportada y las últimas páginas.

La idea del proyecto es ver si son capaces de abrir un hueco en el mercado, “el hueco no existe, se crea, y el mercado se ensancha cuando alguien entra”. Aunque Público se sitúa a la izquierda, no pretende robar lectores a El País, quiere tener sus propios lectores, ya que “nunca puede ser El País”. Lo que atrae lectores a Público será que es diferente al periódico de Prisa.

En el turno de preguntas sucedieron los momentos más surrealistas de la charla. Ante la ingenua pregunta de un asistente sobre el parecido entre El Periódico de Catalunya y Público, Cases tiró de ironía y dijo que hacía mucho tiempo que no veía El Periódico y no sabría qué decir. Cuando le insistieron comento que no se había fijado y que en todo caso, de ser así, sería mera casualidad. Huelga decir que Público es 100% Cases, al igual que El Periódico, ADN, Clarín, etc.

Miguel Buckenmeyer
Tras una parada para el almuerzo, estuvimos con Miguel Buckenmeyer. Ha trabajado varios años en el Washington Post, elaborando prototipos para el rediseño del periódico, secciones y suplementos, un gratuito y el semanario en castellano “Tiempo Latino”. Trabajó dos años con Rodrigo Sánchez en EL MUNDO y varios con Kelly Doe para el New York Times. En 2006 asumió la dirección de arte de El Economista, tras rediseñar un primer prototipo elaborado por Javier Errea. Para este rediseño reconoce haber recibido muchas influencias de otros profesionales del medio. Incluso llegó a precisar porcentajes. Así, explicó que el Economista es un 40% Buckenmeyer, un 30% Javier Errea, un 10% labor de Diseño e Infografía, un 5% Toni Cases, un 5% Kelly Doe, un 5% Ally Palmer, un 4% corresponde a el trabajo de Rodrigo Sánchez y Carmelo Caderot, de EL MUNDO, y el 1% restante de otras influencias externas. Finalmente, el diseño de la imagen corporativa se le encargó a el famoso diseñador Pepe Cruz Novilla, creador entre otros, de la imagen corporativa del PSOE.

Dos páginas de el Economista, de Buckenmeyer

El diseño de EC se cimentó sobre varios principios. Tenía que ser disciplinado y sistemático, que fuera sencillo de producir, tenía que ser ultralegible para facilitar el acceso a los contenidos y por último, no podía depender de la fotografía como principal recurso gráfico. Esto se debe a que es muy dificl ilustrar con fotos la información económica sin abusar de clichés. Esto unido la lógica escasez de medios de un periódico en sus inicios, les hizo apostar por las ilustraciones y la infografía.

En cuanto a la infografía, decidieron que fuera amena pero sin perder seriedad, que fuera extremadamente legible, que utilizara el color de la sección para conferir unidad al producto, y que estuviera inspirada en el trabajo que realiza el New York Times. El Jefe de Infografía de EC, Gorka Sampedro, trabajó durante años en el NYT, así que pudieron aprovechar su experiencia.

Las apuestas por lo conceptual en la portada abundaron en el primer año. De ahí salieron un buen puñado de excelentes aperturas, al punto de que una fue merecedora del premio de la SND a la mejor portada del año.

Pero, en El Economista han vivido el lado más desagradable de este negocio. Tras un inicio prometedor, comenzaron a realizarse cambios en la estructura del periódico. Carlos Salas, primer director y principal apoyo de Buckenmeyer en la realización del proyecto, es despedido poco antes del primer año. La nueva dirección no contempla los principios editoriales que Buckenmeyer estaba aplicando y poco a poco se va viendo arrinconado. Ante esta situación, decide marcharse.

Era un proyecto muy querido, y así lo ha demostrado en su presentación, donde nos ha mostrado cómo llegó a concebir el nuevo producto a raíz del material que ya tenía. Paletas de colores, tipografías, filetes, cómo hacer un gráfico según su sección, o la pléyade de ilustradores con los que contó para formar el potente equipo de el Economista.

Juan Durán y Lafitte Fernández
Por último, y para cerrar el turno de ponencias, recibimos la visita de dos periodistas latinoamericanos de gran experiencia en El Salvador. Se trata de Juan Durán y Lafitte Fernández, referentes del diseño editorial y del periodismo escrito respectivamente.

El trabajo de esta pareja resultó especialmente interesante por el contexto político y social en el que se desarrolló: la posguerra de El Salvador. Este contexto trajo consigo la necesidad de un periodismo diferente, con sus propias particularidades y con un componente de problemática social muy fuerte.

A la derecha Juan Durán del salvadoreño El Diario de Hoy

El secreto para realizar este tipo de trabajo es "construir modelos y proyectos diferentes", aplicar "ideas nuevas para la misma temática". Para ello es muy importante tener una redacción integrada, "como un equipo de fútbol". En este sentido, nos contaron los problemas que habían tenido con una redactora comprada por la mafia de la droga y que puso en grave peligro la vida de un compañero que había estado trabajando en una historia sobre esta mafia. Una historia espeluznante.

En cuanto al tema de publicaciones, pudimos ver dos trabajos de Vía Libre, una revista de El Salvador sobre dos temas muy problemáticos, las maras (bandas juveniles muy violentas) y el sida.

Lafitte Fernández, periodista de El Mundo de El Salvador

De aquí sacamos un lección en cuanto al tratamiento fotográfico y su integración con el diseño del resto de la página. Desde el planteamiento inicial tenían claro que la fotografía tenía que ser la que contara la historia y que el texto sería un elemento que ayudara a una mejor comprensión del extenso reportaje. La solución por la que optaron fue sencilla. Columnas cortas, con mucho blanco y poco color, apenas el negro del texto base y el rojo de los títulos y algunos filetes. Una estrategia muy acertada, a la que se sumó un fuerte dramatismo en las fotografías al virarlas a blanco y negro. Un trabajo muy bueno del que esperamos poder daros cuente más extensamente en breve.

Para finalizar la Cumbre y como colofón, se llevó a cabo una mesa redonda en la que Miguel Buckenmeyer, Mario Gatica, Jordi Catalá y Jaume Serra discutieron sobre si existe una identidad propia de diseño tanto en Europa como al otro lado del charco. Los cuatro coincidieron en que son muchos los puntos que les unen y que cada día son más, aunque no se podría hablar exactamente de una identidad propia, ya que, como destacó Gatica, "los problemas que tenemos todos son los mismos".

De esta manera concluía la Quinta Cumbre Mundial de Diseño en Prensa. Dos largas jornadas en la que los asistentes hemos podido disfrutar de auténticas clases magistrales de manos de los más reputados expertos en cuanto a diseño y prensa se refiere. Todo un lujo que intentaremos repetir el año próximo.

Luis Blasco / Javier Vidal
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Desde encajabaja queremos dar las gracias al periódico por apoyarnos en este viaje, a los compañeros que hemos dejado en Madrid por cubrirnos las espaldas, a Mario por darnos el "apoyo moral" necesario y por haberse quedado al mando del blog durante nuestra ausencia, a los organizadores por acogernos como uno más y darnos todas las facilidades del mundo, a Pedro Pérez por ser el mejor Cicerone posible, a el Norbi por tratarnos con tanto cariño y a los ponentes por toda la sabiduría con la que nos han obsequiado estos dos días. Y cómo no, a la ciudad de Estepona por su hospitalidad y su pescadito, rico, rico.

jueves, 27 de septiembre de 2007

Primera Jornada de la Cumbre Mundial de Diseño en Prensa de Estepona

Ya estamos aquí. Nos las prometíamos muy felices… y así ha sido. La posibilidad de poder asistir a un acontecimiento como la Cumbre es una gozada. El nivel de los ponentes de esta edición hace que la asistencia sea casi obligatoria. Hoy hemos visto a lo más granado de la prensa española y latinoamericana en cuanto a diseño se refiere: Norberto Baruch, Jordi Catalá, Manuela Mariño, Orlando Romero, Miguel Ángel Gómez y, por último, y como representante de los medios digitales , Mario Tascón. Casi nada.

Desafortunadamente unos imprevistos de última hora nos han dejado con las ganas de ver a dos ponentes que prometían un grandísimo material: Michel Gaffré (News Media) y Rodrigo Fino (García Media). Una verdadera lástima.


Norberto Baruch

Con un poco de retraso debido al reajuste de las conferencias, a las 10.00 de la mañana rompía el hielo el mutante Baruch, al que esperábamos en la segunda jornada. Con su habitual estilo ameno y preciso nos ha desgranadado un manual de autoayuda para conseguir la felicidad del infografista. Un decálogo pormenorizado para el trabajo en infografía.


En primer lugar, la necesidad de ver la página como un todo. “La página es un campo de batalla” y en esa frente hay que poner la infografía al servicio de la información, porque así conseguiremos que el lector se quede con nosotros.


Pero para ello no abusar de los programas 3-D. Lo importante no es la tecnología, es conseguir contar una historia a los demás. Para ello hay que fabricar imanes, y si no, hay que inventarlos. Por imanes se refiere a puntos de atención. Hay que facilitarle al lector puntos de entrada a la página.


El Norbi durante su exposición en Estepona / Reportaje gráfico: Luis Blasco

Para realizar los gráficos tenemos múltiples opciones técnicas que sugieren sensaciones distintas. El 3-D imita a la realidad, los dibujos conectan con el lector, pero las fotos son la realidad. En el buen criterio del infografista estará saber discriminar su uso.


Está claro que lo esencial es el concepto, una buena idea, y para ello a veces las comparaciones pueden ayudar al lector porque le sirven de referencia. Hay que desterrar la idea de que las cosas se entienden por si solas, los gráficos deben están correctamente explicados.


Baruch es un acérrimo defensor de la creatividad en prensa, “nos hace mejores”, asegura. Todos los puntos anteriores, junto con un dominio de los recursos dramáticos en la narración completan este decálogo imprescindible para todo aquél que quiera llegar a ser feliz comunicando visualmente.


Jordi Catalá

En la segunda sesión nos visitó el redactor jefe de la sección de infografía de El Periódico de Catalunya. Y nos hizo dos regalos: el primero, su experiencia a la hora de hacer infografías para El Periódico y el segundo contarnos por encima cómo va el desarrollo del rediseño del diario.


Antonio Franco, antiguo director del periódico, le pidió a Catalá hace ya muchos años que “convenciera a la redacción de que la infografía es útil”. Y tanto se empeñó en conseguirlo que según dice él mismo, “murió de éxito”. “La infografía se ha convertido en un recurso y no debería ser así, porque tiene vida propia. La infografía ES PERIODISMO”. Transmitir una información con imágenes y eso implica un trabajo coordinado con la redacción que no siempre es fácil. Hay que evitar cosas tan disparatadas como, por ejemplo, que lo que se cuente en una infografía se repita en el texto. Todo ello lo trufó con ejemplos de gráficos que se han publicado en El Periódico en la última década.


Jordi Catalá explica una infogfrafía de El Periódico

Pero estábamos expectantes porque nos contara algo sobre el rediseño, como nos había prometido. Nos dijo que es un diseño “paulatino, lento, para no ofender al lector”. Pequeños cambios formales, más de contenido que de diseño. Sin embargo la gran apuesta es la portada, en la que jugó un papel fundamental el Director de Arte Ferrán Grau. Aunque no de manera habitual, han decidido apostar por un único tema, “el tema”. Todo manteniendo “tics de familiaridad como el color, la tipografía, etc." Todo una apuesta.


Una vez terminada su charla, le preguntábamos, en petit comité, sobre los riesgos de apostar por un solo tema, obviando el resto de informaciones del día. Pero lo tienen claro y el hecho es que les ha funcionado. Hay que tener en cuenta que llevan más de veinte años educando visualmente a sus lectores, “por lo que ellos no se van a sentir agredidos por el cambio”. También suelen ser asuntos que tocan muy de cerca a los ciudadanos de Barcelona, lo que les facilita apostar a fondo por los temas.


Manuela Mariño

Para los que no conozcan a esta gallega, basta con decir que tiene varios premios SND y Malofiej, todos por su trabajo en La Voz de Galicia, donde lleva 17 años. Un trabajo excepcional en un periódico que en los últimos años “está pasando una época muy plana en cuanto a diseño”. De hecho, nos contó que la sección de Diseño en prácticamente inexistente y que entre tres personas se reparten todos los gráficos del periódico.


El trabajo de su equipo es brillante. Sus gráficos son de una sencillez y de una claridad expositiva impecable. Auténticas joyas. Cualquiera que se dedique a esto sabe que lo más difícil es conseguir contar una historia con sencillez.

Manuela Mariño, de la Voz de Galicia

No es difícil suponer que siendo tan pocos en la sección estén desbordados. Sobre todo por los gráficos del día a día, esos que no te queda más remedio que hacer y de los que hemos estado conversando. A esto hay que sumar lo que ella llama “gráficos imposibles”: esos gráficos con muchos datos, esos que los redactores no son capaces de contar de otra manera que no sea con una tabla o una ilustración. Gráficos complicados y no siempre necesarios que exigen auténticos encajes de bolillos para que funcionen. En fin, el día a día en una redacción de (casi) cualquier rincón del mundo.


Es una pena. Seguramente, un mejor edición por parte de la redacción les liberaría de trabajo y les permitiría dedicar más tiempo a esas auténticas maravillas que nos ha enseñado.


Orlando Romero

Era especialmente interesante ver la situación del diseño en un país con los problemas económicos y de desarrollo de Cuba. Pero Orlando nos lo ha enseñado con el típico desparpajo cubano. Él es totalmente consciente del trabajo que pueden realizar y ahí ha estado defendiéndolo. Ha sido un espectáculo.


Después de hacernos una panorámica de la situación de la prensa en la isla, ha entrado en materia. Hemos visto muchos ejemplos del diseño de Granma Internacional y de Juventud Rebelde, los dos principales periódicos de Cuba. Para el que no lo sepa, Granma tiene entre 4 y 16 páginas, dependiendo de la disponibilidad de papel, tinta, dinero, etc. Todo un logro conseguir algo digno con este hándicap.


Orlando Romero, un espectáculo

Tan consciente es de ello que recordó, ante el estupor y las risas del público, como definieron el rediseño de Juventud Rebelde un grupo de profesionales que le visitaron el año pasado en La Habana: "una mierda" (tranquilos, no tiene el mismo significado aquí que en Cuba. Ahí es un poco más suave.) Pero claro, hay que entender que trabajar en la isla puede llegar a ser toda una aventura. Un ejemplo: algo tan sencillo como comprar una licencia de Quark (bueno, Qual, según se pronuncia en Cuba) se convierte en una odisea en La Habana, aunque tengas el dinero para ello. “Hay que hacer magia en Cuba para poder diseñar un periódico”.


Orlando es también responsable del diseño original de la revista Jiribilla. Nos contó que esta publicación siguió el camino inverso a lo habitual. Primero nación en Internet (jiribilla.cu) y luego pasó al papel.


Prometemos más información de este tema, ya que se mostró encantado de colaborar con nosotros desde el otro lado del charco.


Miguel Ángel Gómez

Consultor de diseño de publicaciones para Danilo Black, lleva un par años residiendo en Dubai (Emiratos Árabes Unidos) donde es director de diseño para Al Nisr publishing group. El caso de Gómez es diametralmente opuesto al de Orlando. Con un presupuesto casi ilimitado cuenta con un equipo internacional para llevar a cabo la ambiciosa tarea de diseñar un periódico con muchos condicionantes culturales. Dubai es un sitio, cuanto menos, peculiar. Hay un altísimo nivel de vida, el 75% de la población es extranjera y tienen que lidiar con la idiosincrasia del lugar. Un ejemplo: si el Jeque asiste a un acto de protocolo, va en portada, y no en cualquier sitio. Ningún elemento puede ir por encima de la foto del acto. Esto condiciona el resto de la portada.


En Dubai todo es al revés. La calidad de la impresión es alucinante. Los periódicos se tiran ¡en papel couché!, si no, los anunciantes pasan. La publicidad les desborda, “no sabemos qué hacer con tanta”. El marketing para la venta llega a tal nivel que, literalmente, el periódico se vende envuelto en publicidad. Lo ponen en unos sobres (espectaculares por cierto) que tienes que abrir para sacar el periódico. Lo que se puede hacer con dinero...


Nos habló de que en Dubai la vida es muy tranquila, segura y cómoda. No es que exista censura en los medios, pero si una autocensura, sobre todo en temas de fotos de chicas en las revistas. Las revistas que vienen de fuera son retocadas con rotulador (¡¡) por un grupo de señores y así se garantizan evitar los posibles escándalos. Algo tan pintoresco no podía dejarse pasar por alto por algún occidental avispadillo. Y Wonderbra hizo esto:


Wonderbra en Dubai, sobran las palabras

Con este panorama acometieron un rediseño en el que intentaron sentar algunas bases. Fijar el tamaño de la publicidad en portada, crear nuevas secciones, darle un aire nuevo al friso de la mancheta, etc. Eso sí, con el jeque siempre por encima. El secreto de su trabajo reside en la colaboración con el equipo. Nos contó como las reuniones para unificar criterios son habituales, lo que les permite enriquecer el producto con la experiencia de todos.


Mario Tascón

En la última sesión del día el responsable de medio digitales de prisa.com hizo una reflexión sobre las nuevas tecnologías aplicadas a la prensa. Definió los periódicos online como una evolución de la especie, un desdoblamiento en el que se traza una línea paralela pero que no converge. De esta forma, explicó que debido a la novedad, los periódicos online han adquirido ese tratamiento por la falta de un concepto nuevo que los defina. Según Tascón, elpais.com no se parece en nada a un periódico. Ni en la elaboración de las informaciones ni en el perfil de los profesionales que trabajan en él. Incluso, valga la obviedad, en la periodicidad de la publicación.


Son dos productos totalmente distintos. Una redacción de internet nunca podrá, según Tascón, converger con una redacción de papel, aunque ésta sea la tendencia global. Explicó la necesidad de “especialistas”: redactores de hipertexto, arquitectos de información, especialistas en web…


Mario Tascón explicando la evolución de los medios digitales en España

A diferencia de las informaciones de los periódicos, elaboradas por los periodistas de la plantilla, la información de internet es un trabajo compartido entre los lectores y los profesionales.


En cuanto a diseño, son diametralmente opuestos. En la web hay que tener en cuenta los múltiples soportes (móvil, tv, pda, etc.), mientras que en papel te centras en un solo soporte. El ritmo de lectura también es distinto y la distribución de contenidos varía sensiblemente. En un diario, el ocio y los servicios suponen un 10% del total, mientras que en Internet ese porcentaje asciende a casi el 50%.


Curiosamente sorprende que los sitios de noticias más leídos en internet no corresponden a la versión digital de medios tradicionales, sino que las mayores audiencias se sitúan en portales de internet tipo Yahoo o AOL, lo que viene a ratificar su idea de que los medios digitales no se pueden denominar, a día de hoy, como periódicos.



En definitiva, una muy interesante primera jornada, con los primeros espadas del diseño. Resulta reconfortante comprobar cómo todos los ponentes han defendido la necesidad de que la información sea el fundamento de un diseño de calidad. Esta visión de la profesión confirma propósitos como el de este blog.

Mañana informaremos sobre la segunda jornada. Saludos desde Estepona. Luis Blasco / Javier Vidal