lunes, 4 de octubre de 2010

Diseñario 2.0 (XL)

No hace falta un proceso de "primarias" entre los miembros del comité de expertos de encajabaja encargados de la redacción del Diseñario, porque no compiten entre sí. Además no resultaría fácil elegir cuál de ellos es más contradictorio, caprichoso, inestable, obstinado y voluble, cuál mejor o cuál peor en incontables aspectos en los que tampoco están interesados porque su afán es esta obra infinita, irreverente, colectiva y abierta a vuestra participación sobre el diseño periodístico y la prensa en general de la que hoy nos ofrecen una nueva entrega.





OJD. Oficina de Justificación de la Difusión. Suena un poco raro, casi marciano, debido posiblemente a su traducción literal del francés, porque esta empresa privada e independiente -insisten ellos- encargada de controlar y certificar la difusión (número de ejemplares de un medio de comunicación impreso vendidos en un determinado periodo de tiempo, no número de lectores, que de eso se encarga el EGM con los datos de la OJD y con encuestas), se creó en España en el gran año de 1964 a partir del modelo francés, la Office de Justification de la Diffusion des Supports de Publicité, que había realizado un año antes en los diarios madrileños ABC y Pueblo los primeros controles de difusión que se hicieron en nuestro país.
El aumento de la publicidad en España durante esa década de los 60 del siglo pasado, y su enorme importancia, hizo necesario hacer también aquí lo que se llevaba tiempo haciendo en la mayor parte de los países occidentales. Como siempre vamos, a la vanguardia. En 1965 apareció el primer Boletín OJD, con unos 30 periódicos inscritos, y desde entonces no ha dejado de crecer hasta alcanzar los 840 medios impresos que controla en la actualidad, así como el tráfico (páginas vistas, visitas y usuarios únicos) de 151 medios electrónicos, según afirma la propia OJD en su página web.
La OJD es la subdivisión para medios de comunicación impresos de la empresa "Información y Control de Publicaciones, S.A.", que cuenta además con otras dos divisiones: PGD (Publcaciones Gratuitas Ejemplares Distribuibles), que certifica datos de publicaciones impresas gratuitas; y OJD Interactiva, que lo hace con los medios de comunicación electrónicos en internet (no tardaron mucho en ponerse al día).
A través de su página web se pueden consultar los datos de tirada (que es el número promedio de ejemplares impresos) y del promedio de ejemplares vendidos (la difusion, propiamente dicha, y que siempre es menor que la tirada como todos podemos suponer) en un periodo de tiempo determinado de los medios que están adscritos a este control. Datos que son públicos y que ayudan sobre todo a las empresas de comunicación a captar publicidad y a fijar mejores o peores precios en ese competitivo mercado publicitario.
En definitiva, hablamos de una empresa auditora, es decir, de unos profesionales a los que pagas -y no poco, por cierto, en el caso de las publicaciones impresas, cuyas imprentas y rotativas es necesario controlar- para que digan que lo que tú dices de ti mismo es cierto. Es aquello de "y no lo digo yo", lo dice fulanito. Y que fulanito sea alguien con autoridad, con la suficiente independencia para se creído por todos. Labor delicada, pues, y que no ha estado, ni sigue estando, exenta de polémicas (el grupo Prisa, sin ir más lejos y sin tener que buscar en lagos y montañas, abandonó la OJD digital para sus medios electrónicos, así como los medios de Vocento, descontentos ambos con el tráfico que les certificaban); quejas alimentadas por turnos, generalmente cuando fulanito no dice aquello que uno quisiera oír, o más bien que otros oyeran. Y encima pagando...

Olvidar. Esto... a ver... espera que lo miro... pues ahora mismo no me acuerdo....

On line. En línea, conectado. Es decir, colgado en el éter de Internet, en el ciberespacio, allí donde nadie puede cogerte pero todo el mundo te puede ver. Estar on line significa estar accesible, a priori, en todo y para todo el mundo. Aunque dentro de lo inmaterial que supone Internet. Y sobre todo de lo volátil, porque igual de fácil es estar on line que estar off line. Basta un click.


Entregas anteriores del Diseñario 2.0:

Diseñario 2.0 (I): adelanto-alcance.
Diseñario 2.0 (II): apaisado-arte final.
Diseñario 2.0 (III): aspirina-autoedición.
Diseñario 2.0 (IV): background-billete.
Diseñario 2.0 (V): bobina-breves.
Diseñario 2.0 (VI): cabecear-camisa.
Diseñario 2.0 (VII): carácter-carpintero.
Diseñario 2.0 (VIII): catálogo-chillón.
Diseñario 2.0 (IX): chiste-cierre.
Diseñario 2.0 (X): clavo-colchón.
Diseñario 2.0 (XI): columpiarse-comerse.
Diseñario 2.0 (XII): compacto-corresponsal.
Diseñario 2.0 (XIII): corte-crítica.
Diseñario 2.0 (XIV): crisis-crónica.
Diseñario 2.0 (XV): cuadratín-deformar.
Diseñario 2.0 (XVI): desguace-directo.
Diseñario 2.0 (XVII): director-documentación.
Diseñario 2.0 (XVIII): editorial-EGM.
Diseñario 2.0 (XIX): Elzevir-empacar.
Diseñario 2.0 (XX): empasillado-encuadrar.
Diseñario 2.0 (XXI): enfrentadas-entrevista.
Diseñario 2.0 (XXII): enviado especial-exclusiva.
Diseñario 2.0 (XXIII): exposición-faldón.
Diseñario 2.0 (XXIV): fe de errores-fino.
Diseñario 2.0 (XXV): flash-fondo.
Diseñario 2.0 (XXVI): fotero-fotón.
Diseñario 2.0 (XXVII): free-lance-freehand.
Diseñario 2.0 (XXVIII): galerada-grapa.
Diseñario 2.0 (XXIX): gritar-hemeroteca.
Diseñario 2.0 (XXX): hemorroide-hostias (darse de).
Diseñario 2.0 (XXXI): ilustrator-imposición.
Diseñario 2.0 (XXXII): invisibles-itálica.
Diseñario 2.0 (XXXIII): jefe-ladrillo.
Diseñario 2.0 (XXXIV): lead-localizador.
Diseñario 2.0 (XXXV): lomo-lorem ipsum.
Diseñario 2.0 (XXXVI): MacOs-mesa.
Diseñario 2.0 (XXXVII): modular-morder.
Diseñario 2.0 (XXXVIII): negativo-ñapa.
Diseñario 2.0 (XXXIX): Oblicua-off the record.

jueves, 30 de septiembre de 2010

El día 29 también hubo sorpresa en el quiosco


Ayer miércoles fue día de huelga, no muy general como se ha leído. En Público, donde tengo el gusto de trabajar desde hace meses junto al "quintatinta" Diego Areso, la secundó el 50% de los trabajadores, incluido el departamento de Diseño. El periódico se adherió a la huelga sacando a la calle solamente un especial de 24 páginas con las causas y consecuencias de la convocatoria, y con opinión y debate sobre la misma. Nada de información del día.

Ante la precariedad redaccional y maquetil para realizar el llamémosle casi mejor suplemento que diario, al Director de Arte Fernando Rapa se le ocurrió esta "tapa" -como dice él, como buen argentino- para el día, solución que no por vista resulta menos original y sorprendente. A modo de fanzine, hecho a mano. Los trazos son enteramente suyos.

Lástima que ésta no llegara a tiempo para la convocatoria de los premios "Ñh" de este año. Parece ser que Cándido Mendez llamó a nuestro director, Jesús Maraña, encantado sobre la misma. ¿Qué os parece a vosotros?

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Portadas post huelga general

Echando un vistazo a las portadas de los periódicos post 29-S nos damos cuenta de dos cosas que ya teníamos bastante claras: 1. todo depende (excesivamente) del cristal con que se mire; y 2. La imaginación no es un fuerte a la hora de titular en la portada.

Os dejamos las portadas de varios diarios para que juzguéis vosotros mismos. ¿Cuál os parece la más original? ¿Y la que refleja mejor lo que pasó?














martes, 28 de septiembre de 2010

Declaración de Pamplona

Es posible que nunca un Gobierno mereciese tanto una huelga general (como este que padecemos presidido por un errático y mediocre Zapatero), a la vez que nunca unos convocantes (como estas centrales sindicales mayoritarias que padecemos también), merecieran tanto que nadie la secundara. Así estamos. Como es natural, en encajabaja no podemos permanecer ajenos ni a esta convocatoria que ni apoyamos ni dejamos de apoyar porque, entre otras razones, no tenemos una postura común sobre ella aunque respetamos cada uno la posición del otro, como tampoco a la grave situación económica general de nuestro país, y a la no menos grave situación del sector periodístico en especial.


Junta directiva de la FAPE, reunida en Navarra, con la Declaración de Pamplona.

Por todo ello, nos parece más que oportuno hacer hoy una reseña sobre la reciente "Declaración de Pamplona" aprobada por la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) tras su reciente reunión el pasado 20 de este mes en el Archivo Real y General de Navarra. Los datos del Observatorio de la Crisis, dirigido por la FAPE, ponen de manifiesto que en los dos últimos años la pérdida de empleo en nuestro sector ha afectado a 3.400 profesionales, y sólo en los últimos tres meses han desaparecido al menos 437 puestos de trabajo. "La crisis más grave de su historia", según FAPE.

La Declaración no hace más que constatar lo que todos aquellos que trabajamos en un medio de comunicación vemos y sufrimos cada día: el empleo es cada vez más precario, con la utilización creciente de becarios y estudiantes en prácticas para ocupar puestos estructurales; las convocatorias de ruedas de prensa "enlatadas" o "teledirigidas" sin preguntas, como deterioro de la calidad informativa; o que el "nuevo escenario digital no es sinónimo de mayor calidad informativa. Hay mucha información, sí", afirman, "pero también mucha que se basa en el rumor y la difamación". Para la Federación la apuesta por la calidad, como venimos manteniendo muchos durante mucho tiempo ya sin que hayamos conseguido nada sino más bien todo lo contrario, es fundamental para el futuro de nuestra profesión... y para el futuro de cualquier sociedad libre y avanzada. Algo en lo que, evidentemente, no sólo hay que hablar de internet, porque "la banalización de la información" está afectando de manera creciente a todos los medios.

Como conclusión, la Declaración de Pamplona incluye nueve puntos que os reproducimos íntegros a continuación:

1) Instar a los editores a negociar con los representantes sindicales un futuro viable para sus empresas en el que los eventuales sacrificios salariales garanticen el empleo, impulsen proyectos innovadores y establezcan un plan de formación intensivo y permanente, absolutamente imprescindible en el proceso de cambio acelerado que vive nuestra profesión.

2) Urgir al Gobierno, a los partidos y a las instituciones públicas a terminar con la práctica de las grabaciones enlatadas y de las ruedas de prensa sin preguntas. La FAPE invita a los periodistas a defender su derecho a preguntar y a los responsables de los informativos a promover la información propia y, en el caso de que esto no fuera posible, a especificar claramente el origen de las informaciones.

3) Instar al Gobierno y al Parlamento a que reconozcan, en la nueva Ley de Propiedad Intelectual, los derechos de los periodistas como autores. La FAPE invita a los sindicatos a incluir su reconocimiento en la negociación de los convenios colectivos.

4) Verificar que la Inspección de Trabajo ha puesto en marcha un plan para detectar las irregularidades sobre el empleo de los becarios, en respuesta a una petición expresa de esta Federación.

5) Instar a los magistrados a que respeten el derecho de los periodistas a la protección de sus fuentes informativas, según lo que establece la ley. A la vez, recordar al Gobierno que mantiene sin cumplir la promesa de promover una ley de transparencia y de acceso a la información pública, cuyo primer borrador de anteproyecto no satisfizo a la profesión periodística.

6) Recordar a los periodistas que hacen anuncios publicitarios con ánimo de lucro que nuestro Código ético y deontológico declara incompatible el ejercicio de la profesión periodística con la publicidad remunerada.

7) Fomentar la creación de los colegios profesionales de periodistas, que no se entienden solo como estructuras de pura defensa de los intereses profesionales, sino que aseguran la calidad de un servicio ciudadano, que en este caso es el derecho a la información.

8) Defender que en las convocatorias de puestos de trabajo para periodistas se exija la titulación o un máster en periodismo.

9) Convocar a la unidad de todos los periodistas para defender el ejercicio de calidad, basado en la disciplina de la verificación, la independencia, la clara separación entre opinión e información, la objetividad y la búsqueda permanente de la verdad.

lunes, 27 de septiembre de 2010

Diseñario 2.0 (XXXIX)

A las puertas de una nueva huelga general en nuestro país, la cuarta desde la llegada de la Democracia, el comité de expertos de encajabaja la afronta con división de opiniones (con más miembros hacia uno de los lados, hacia el mismo que el que también parece mayoritario en el resto de la sociedad española) pero con todo el respeto de unos hacia otros, como esperamos y deseamos que suceda en general el próximo miércoles 29, martes 28 para los periódicos. En lo que sí parecemos coincidir todos, es que nunca un Gobierno mereció tanto que le hiciesen una huelga así, y que nunca los convocantes de la misma merecerion tanto que no la secundásemos. Pase lo que pase, que cada cual pueda hacer lo que quiera con máxima libertad, con la misma que este comité escribe esta nueva entrega del Diseñario, obra colectiva, irreverente, infinita y abierta a vuestra participación, sobre el diseño periodístico y la prensa en general.




O


Oblicua. Cursiva.

Obituario. Genero periodístico dedicado a la reseña de la vida y, sobre todo, de la muerte de personajes más o menos ilustres en diferentes ámbitos, desde la política hasta los deportes, pasando por la crónica de sociedad o las jotas del Bajo Aragón.
Aparecer en las páginas de este género periodístico, también llamado necrológicas, tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Sus pros: has hecho algo en la vida por lo que mereces ser recordado en unas cuantas líneas de periódico. La mayoría de las veces, algo bueno; el resto de veces, algo malo, muy malo. Sus contras: estarás muerto y no podrás leerlo. Una pena.
Aunque muchas veces no es así. Hay gente que ha podido leer su propia necrológica y ver cómo han glosado en un periódico su vida, obra y, en ocasiones, milagros. Por error, por supuesto. Alguien lo mató antes de tiempo. Y suponemos que se habrá puesto contento si el obituario era grande y se habrá mosqueado si era pequeño. Porque en este género el tamaño sí importa. Cuanto más grande lo tengas, el obituario se entiende, más importante eras. Cuanto más pequeño, menos significante.
Estas páginas tienen la mala fama de ser serias, aburridas, tristes incluso. Y es cierto que no dan mucho juego, principalmente por respeto al finado, que está, como quien dice, de cuerpo presente. Pero hay quien lucha contra ello. Conocemos a un redactor, del cual no diremos el nombre, que sugirió hacer la página un poco más "divertida", "alegre", nos dijo. Sin embargo, y poniendo cara de funeral, muy propia para estos casos, contestamos: si se ha muerto una persona, esta página no puede ser divertida. Como no parecía muy convencido tuvimos que darle argumentos que nos resultan imposibles de reproducir aquí, motivo por el cual se terminó marchando a su sección, de obituarios, con cara de enterrador, es decir, de pocos amigos. Y menos, de nosotros.

Oculto. Así, en dos líneas, o tres, todo lo que está pero no se ve, como los invisibles entre caracteres, las cajas de imagen que hacen de tapones o las aviesas intenciones en los textos... También es aquello que según aquella brillante definición de noticia, alguien, en algún lugar, intenta ocultar.

Off the record. Todo lo que un periodista consigue fuera de los cauces oficiales, aquellas informaciones a las que se accede de manera confidencial, todo lo que un entrevistado cuenta fuera de la entrevista, "fuera de la grabación", que sería su traducción exacta... Lógicamente, las cosas que se cuentan off the record son como si no se hubiesen contado, no tienen el permiso para ser publicadas, algo que en el periodismo clásico siempre se ha respetado y que hoy en día cada vez se respeta menos. De ahí que muchos periodistas se quejen de lo difícil que resulta conseguir informaciones fiables. Si nos hubiésemos preocupado de cuidar más a nuestras fuentes y no quemarlas deslealmente en esta enloquecida carrera por publicar exclusivas, o simples primicias, otro gallo nos estaría cantando ahora, de eso, seguro...
Pero esto no es exclusivo de los redactores. También existe el off the record en la maquetación. Son esas maquetas que accedes a pergeñar porque quien te las pide es alguien cercano y caes preso de un ataque de humanidad. Un grave error en el que los maquetas caen, de tanto en tanto... Suelen ser maquetas de última hora, maquetas que no respetan a nada ni a nadie, soluciones desesperadas para redactores desesperados. De ahí que el maqueta que lo consuma reclame para sí el amparo del off the record: "Vale, te lo hago porque eres mi colega… pero como alguien pregunte, yo no sé nada de esto...".


Entregas anteriores del Diseñario 2.0:

Diseñario 2.0 (I): adelanto-alcance.
Diseñario 2.0 (II): apaisado-arte final.
Diseñario 2.0 (III): aspirina-autoedición.
Diseñario 2.0 (IV): background-billete.
Diseñario 2.0 (V): bobina-breves.
Diseñario 2.0 (VI): cabecear-camisa.
Diseñario 2.0 (VII): carácter-carpintero.
Diseñario 2.0 (VIII): catálogo-chillón.
Diseñario 2.0 (IX): chiste-cierre.
Diseñario 2.0 (X): clavo-colchón.
Diseñario 2.0 (XI): columpiarse-comerse.
Diseñario 2.0 (XII): compacto-corresponsal.
Diseñario 2.0 (XIII): corte-crítica.
Diseñario 2.0 (XIV): crisis-crónica.
Diseñario 2.0 (XV): cuadratín-deformar.
Diseñario 2.0 (XVI): desguace-directo.
Diseñario 2.0 (XVII): director-documentación.
Diseñario 2.0 (XVIII): editorial-EGM.
Diseñario 2.0 (XIX): Elzevir-empacar.
Diseñario 2.0 (XX): empasillado-encuadrar.
Diseñario 2.0 (XXI): enfrentadas-entrevista.
Diseñario 2.0 (XXII): enviado especial-exclusiva.
Diseñario 2.0 (XXIII): exposición-faldón.
Diseñario 2.0 (XXIV): fe de errores-fino.
Diseñario 2.0 (XXV): flash-fondo.
Diseñario 2.0 (XXVI): fotero-fotón.
Diseñario 2.0 (XXVII): free-lance-freehand.
Diseñario 2.0 (XXVIII): galerada-grapa.
Diseñario 2.0 (XXIX): gritar-hemeroteca.
Diseñario 2.0 (XXX): hemorroide-hostias (darse de).
Diseñario 2.0 (XXXI): ilustrator-imposición.
Diseñario 2.0 (XXXII): invisibles-itálica.
Diseñario 2.0 (XXXIII): jefe-ladrillo.
Diseñario 2.0 (XXXIV): lead-localizador.
Diseñario 2.0 (XXXV): lomo-lorem ipsum.
Diseñario 2.0 (XXXVI): MacOs-mesa.
Diseñario 2.0 (XXXVII): modular-morder.
Diseñario 2.0 (XXXVIII): negativo-ñapa.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

Otoño diseñil


Van sólo por la segunda edición, pero las Jornadas de Diseño en la Sociedad de la Información van camino de convertirse en un clásico del diseño. Organizadas por nuestro querido amigo Pedro Pérez Cuadrado, el campus de Fuenlabrada de la Universidad Rey Juan Carlos acogerá este año unas jornadas dedicadas al mundo de la fotografía, tanto en prensa como en Internet.

Este año, encajabaja también participará en las jornadas. Javier Vidal, nuevo jefe de diseño de Suplementos de El Mundo, compartirá mesa con el grande de la fotografía española José Manuel Navia, que ya pudimos disfrutar en las clásicas jornadas del CEU. Será en la primera jornada, dedicada a la edición de fotografía en la prensa y en la que también participará Alberto Yagüe, especialista en postproducción fotográfica.

Imagen de las jornadas del año pasado.

En la segunda jornada participarán Oyer Corazón, especialista en Diseño Gráfico, Mario Tascón, compañero, amigo y responsable de lainformación.com y Juan Miguel Sánchez Vigil, responsable del archivo fotográfico de Espasa Calpe.



Todo esto, el 10 y 11 de noviembre (calendario completo, aquí), en horario de mañana y de tarde. Justo los mismos días en los que se celebra el ñh7, congreso del capítulo español de la SND. Será en Valencia y durará un día más, desde el 10 hasta el 12 de noviembre.

Contará, entre otros participantes, con Rodrigo Sánchez (El Mundo), Alfredo Triviño (News International), Ramón Salaverría (Universidad de Navarra) o Benjamín Lana (Vocento). El programa completo sale el 29 de septiembre, pero podéis ir reservando hotel en Valencia, ciudad que acoge la edición de este año y donde seguro que podéis compartir buenas charlas con compañeros de profesión como CuatroTipos o QuintaTinta.

lunes, 20 de septiembre de 2010

Diseñario 2.0 (XXXVIII)

Como no había podido ser, los responsables de la Federación Portuguesa de Fútbol, antes de volverse con los manos vacías a sus despachos, intentaron ponerse en contacto con los miembros del comité de expertos de encajabaja encargados de la redacción del Diseñario, para ver si este grupo excéntrico y caprichoso podía ocuparse de entrenar durante algún partido a la selección de su país. "En vuestros ratos libres." Infelices. Insensatos. Si esto es una obra infinita... Con todos ustedes, una nueva entrega del Diseñario, obra colectiva, irreverente y abierta a vuestra participación sobre el diseño periodístico y la prensa en general.




N


Negativo. Cuentan que hubo una fotografía humana, química, anterior a esta fotografía máquina de píxeles y electrónica, que fijaba las imágenes en un soporte de acetato de celulosa bañado con sales de plata en vez de en archivos informáticos. Lo hacía de manera inversamente proporcional a la cantidad de luz que recibía, quedando oscuro lo luminoso y al revés, o con colores complementarios cuando los pigmentos de la emulsión recreaban los de la realidad atrapada. Por eso lo llamaban negativo. Y es que no hablamos del supuesto y tópico carácter habitual de los maquetadores, ni del rechazo puntual a alguna de las ideas de bombero que tanto nos proponen, ni tan siquiera del estado de ánimo general que sufrimos en esta crisis de nunca acabar. No. No es eso. Negativo es una manera de reproducir textos o imágenes de manera inversa, lo negro es blanco, lo rojo es verde...
Conviene no abusar de este recurso en el diseño periodístico, en primer lugar porque en el diseño de periódicos no conviene abusar de nada, en segundo porque perdería su gran capacidad para captar la atención del lector. Que la tiene. (Selecciónense ahora las siguientes dos palabras.) ¿0 no?

Nevera. En un periódico no todo se puede trabajar en el mismo día del cierre y de igual manera, a veces (las menos) se trabajan los temas con previsión y mucho tiempo de adelanto (hemos oído que hay periódicos en otros países que lo saben hacer) y a veces, muchos temas destinados para ser publicados se caen a última hora. La forma de garantizar que esos temas se conservarán adecuadamente hasta que se les encuentre una fecha de publicación más apropiada es la nevera. Que nadie piense que el frío es una condición importante aquí. Pero se le llama nevera, igualmente, a cualquier sistema de archivo que sirva para almacenar estos temas que o bien ya están preparados o a la espera de ver la luz. Adelantos, previsiones o noticias que no están sujetas a las exigencias de la actualidad pasan a este lugar que los mantendrá fresquitos y en plenas condiciones de consumo.
También se conoce como nevera el lugar donde son inhabilitados algunos personajes, impidiéndoles desarrollar temporalmente su labor habitual y deteniendo, suponemos, su lento y desagradable proceso de autodescomposición. Es habitual que estas neveras estén llenas de árbitros de fútbol, jueces, políticos más o menos importantes, periodistas, etc. La tónica habitual es que los subordinados de lujo sean los que pueblen estas neveras ya que los que realmente mandan suelen ser los que deciden quién entra o quién sale del helado confinamiento.
Pero si hay una nevera que ha marcado nuestras infancias es aquella en la que Steve McQueen, inasequible al desaliento, lanzaba una pelota de béisbol, tacatá, tacatá, contra la pared mientras urdía algún nuevo y testarudo plan de fuga de uno de los campos de concentración más extrañamente amables de la historia del cine. Era una nevera con pedigrí, compartida con un escocés chiquitín y risueño y en la que todos hemos jugado a ser encerrados en alguna ocasión, al implacable son de: "¡Neverra!".


Ñ


Ñapa. Chapuza, arreglo para salir del paso y solucionar las cosas a bote pronto, mal y tarde. Ñapa es el celo para unir cables, las servilletas para la mesa coja o la caja de imagen del software de maquetación como tapón para arreglar una partición de texto que no hay manera de solucionar o una silueta que el dichoso programa no consigue realizar correctamente.
La ñapa, clásica solución española, es fácil de identificar: transitoria, salta a la vista del ojo experto, que suele arreglar el follón sin problema. Además, el que la encuentra suele acompañarla de expresiones como "vaya ñapa", o incluso de alguna de más grueso calibre. Todo ello a pesar de que haya sido otro experto el que ha hecho tal ñapa porque no veía otra solución. Cosa que, a simple vista, parece una ñapa para decir que, o no tenía tiempo o no tenía ni idea.


Entregas anteriores del Diseñario 2.0:

Diseñario 2.0 (I): adelanto-alcance.
Diseñario 2.0 (II): apaisado-arte final.
Diseñario 2.0 (III): aspirina-autoedición.
Diseñario 2.0 (IV): background-billete.
Diseñario 2.0 (V): bobina-breves.
Diseñario 2.0 (VI): cabecear-camisa.
Diseñario 2.0 (VII): carácter-carpintero.
Diseñario 2.0 (VIII): catálogo-chillón.
Diseñario 2.0 (IX): chiste-cierre.
Diseñario 2.0 (X): clavo-colchón.
Diseñario 2.0 (XI): columpiarse-comerse.
Diseñario 2.0 (XII): compacto-corresponsal.
Diseñario 2.0 (XIII): corte-crítica.
Diseñario 2.0 (XIV): crisis-crónica.
Diseñario 2.0 (XV): cuadratín-deformar.
Diseñario 2.0 (XVI): desguace-directo.
Diseñario 2.0 (XVII): director-documentación.
Diseñario 2.0 (XVIII): editorial-EGM.
Diseñario 2.0 (XIX): Elzevir-empacar.
Diseñario 2.0 (XX): empasillado-encuadrar.
Diseñario 2.0 (XXI): enfrentadas-entrevista.
Diseñario 2.0 (XXII): enviado especial-exclusiva.
Diseñario 2.0 (XXIII): exposición-faldón.
Diseñario 2.0 (XXIV): fe de errores-fino.
Diseñario 2.0 (XXV): flash-fondo.
Diseñario 2.0 (XXVI): fotero-fotón.
Diseñario 2.0 (XXVII): free-lance-freehand.
Diseñario 2.0 (XXVIII): galerada-grapa.
Diseñario 2.0 (XXIX): gritar-hemeroteca.
Diseñario 2.0 (XXX): hemorroide-hostias (darse de).
Diseñario 2.0 (XXXI): ilustrator-imposición.
Diseñario 2.0 (XXXII): invisibles-itálica.
Diseñario 2.0 (XXXIII): jefe-ladrillo.
Diseñario 2.0 (XXXIV): lead-localizador.
Diseñario 2.0 (XXXV): lomo-lorem ipsum.
Diseñario 2.0 (XXXVI): MacOs-mesa.
Diseñario 2.0 (XXXVII): modular-morder.