jueves, 19 de julio de 2012

El Boletín Municipal de Getafe

Una de las primeras medidas —o al menos una de las primeras que hayamos podido ver los vecinos, y nunca mejor dicho— tomadas por el nuevo alcalde de Getafe, Juan Soler (PP), ha sido la del rediseño y ¿renacimiento? del Boletín Municipal.


Era necesario. Sobre todo si lo que se pretendía era aumentar el tamaño de la foto del alcalde en la primera página impar que te encuentras nada más abrirlo...


Antes...


.... y ahora

...o si querían darnos una idea implícita de lo confuso que es el mundo de colorines en el que vivimos desordenando la ¿información? sobre páginas de carísimo papel couché pagado con el dinero de los getafenses o getafeños, que ambos gentilicios se aceptan.






Si de cualquier rediseño se pide que, como mínimo, mejore lo que había anteriormente no estoy del todo seguro de que se hayan alcanzado esos mínimos. Un ¿logo? para la portada, cambio de tipografías a una Minion de rasgo en títulos de opinión junto a una letra de inadecuado palo para la lectura del texto base, Vectora tal vez, deformada seguro, fondos de color a tutiplén... Claro que hay que reconocer que no era tarea fácil superar la calidad profesional de Natalia González, diseñadora que trabaja en el Ayuntamiento de Getafe desde hace muchos años con un nivel de excelencia. Motivo por el cual todavía entiendo menos que en vez de utilizar a esta persona, el nuevo equipo de Gobierno haya contratado una empresa externa para llevarlo a cabo, lo que junto a la distribución e impresión de sus 65.000 ejemplares nos supone, según la concejala de Asuntos Sociales Teresa Rodríguez en declaraciones que recoge Europa Press, un coste a todos los vecinos de unos 13.000 euros para cada número que pasa de los buzones... a la basura, generalmente, dado su interés y utilidad informativa, como sucedía por otro lado con el que editaba el equipo de Gobierno anterior, encabezado por el socialista Pedro Castro y que, al parecer, nos costaba todavía más. Una manera de entender la comunicación por parte del poder político que además del despilfarro económico desaprovecha la enorme valía profesional de los periodistas que allí trabajan, como sucedía con su anterior directora, Rosa Ferrero, a quien conozco, aprecio en lo personal y valoro profesionalmente. Ahora, la directora es otra persona, claro... para hacer exactamente lo mismo que 'pueden' hacer. Pero, "la política es la política mediática", escribe el sociólogo Manuel Castells en su imprescindible 'Comunicación y poder'.

No es tarea fácil este rediseño, además, por el material con el que esta nueva empresa cuenta para hacer un buen trabajo 'informativo' y sobre todo de diseño periodístico. Y es que, según pusieron de manifiesto varios medios de comunicación locales y podría haber comprobado cualquier vecino que en vez de tirarlo directamente confundido con la publicidad decidiera hojear sus páginas, nuestro querido alcalde aparece en uno de sus últimos números nada más y nada menos que ¡27 veces en 17 páginas!, portada incluida, con cuatro fotografías suyas en alguna de las páginas. "Álbum familiar", denuncian en el ElBercial.com.; "el alcalde se postula como modelo para Vogue", en GetafeHoy. No es fácil hacer esto y que quede bien, de verdad. Yo no sabría.














Además de dar a conocer a los vecinos de Getafe quién es su alcalde Juan Soler, labor que aunque él diga que "me da un poco de apuro (...) porque al final la revista parece un publireportaje" puede ser sin embargo muy necesaria porque se empadronó en la localidad muy poco antes de las elecciones en un piso de alquiler y según la oposición pasa bastante más tiempo en Madrid capital donde seguiría residiendo de facto, otro de los empeños de este nuevo "rediseño" pudiera consistir en un intento de borrar el pasado. ¿Observan que el Boletín Municipal es ahora el "Boletín de Getafe" y que pese a los muchos años que lleva editándose aparece 'renacido' como NÚMERO 1? Como si al cambiar el director de un periódico o revista hubiera que empezar a numerar desde el comienzo.




No crean que toda la crítica es negativa para este 'nuevo' Boletín Municipal. Hay incluso cosas que me gustan en su primer número. Y mucho. En cuanto a la forma, porque se trata sin duda de la página doble mejor maquetada, y sobre todo en cuanto al contenido. Me refiero a la entrevista al periodista Ángel del Río, la persona a cuyas órdenes tuve el honor de trabajar en los servicios informativos de la Cadena Cope y en el periódico local del que ha sido director durante más de 30 años junto a Sebastián Carro, Acción Getafense, que ahora continúa como página web y que ha sido uno de los medios impresos más longevos de toda la Comunidad de Madrid —sólo ABC y el Diario de Alcalá, que yo sepa, comenzaron a publicarse antes— y del que también prepararemos un artículo próximamente. Y es que hablar de Angel del Río, a quien admiro y quiero, es referirnos a uno de los más grandes cronistas de la información local de Madrid y de su comunidad.


Entrevista al periodista Ángel del Río en el 'primer número' del rediseñado Boletín Municial, de 2011



Periódico local Acción Getafense, dirigido por Angel del Río y Sebastián Carro, una publicación privada que ha estado publicándose ininterrumpidamente durante más de 30 años en Getafe.

El grupo municipal de UPyD, que mantiene con sus votos a Soler en la alcaldía porque el Partido Popular no obtuvo mayoría suficiente para gobernar en solitario, presentó formalmente en el Pleno de noviembre pasado la supresión total de este Boletín Municipal por entender que "supone un gasto innecesario para el Ayuntamiento y se limita a hacer propaganda del Gobierno" municipal. PP e IU desestimaron la propuesta de UPyD (lean en el enlace anterior las cifras, el dinero destinado a "publicidad y propaganda", tal cual). UPyD, no obstante, sigue manteniendo su apoyo al alcalde. Y como, además, denuncian que en el Boletín no se informa de la actividad del resto de políticos locales, pues utilizan parte de la asignación del dinero público que aprobaron entre todos para el funcionamiento de los grupos políticos para publicar a su vez su propia versión de los hechos, impresa y buzoneada a todos los vecinos:


Y, claro, tampoco es plan de que el PSOE no 'informe' también a los vecinos a costa del erario público. Ambos, UPyD y El Progreso de Getafe a todo color y en papel couché, aunque con menos páginas que el Boletín.



No sé exactamente si éste es el "cambio" que demandaron los vecinos de Getafe en las últimas elecciones municipales, el cambio de foto. Porque si lo que votaron fue, por ejemplo, una política municipal de austeridad y racionalidad en las cuentas públicas, los famosos recortes no han llegado en el área de rediseños y propaganda, quiero decir de "comunicación". Claro que también se presentó el Partido Popular local a las elecciones prometiendo una bajada de impuestos y hace unos días hemos recibido, unos antes y otros después, distintas cartas del propio Juan Soler informándonos —ahora sí— de que a unos nos subirá el IBI —para pagar entre otras cosas los 143.000 euros anuales del Boletín— y a otros no, les bajará un poquito. Según nuestro risueño y fotogénico alcalde si de él dependiera, ¡¡¡¿¿¿???!!!, el Boletín Municipal "desaparecería" porque dice ser "contrario a los medios públicos de comunicación". Pero, si no depende de él... de ¿quién puede depender tal decisión? De momento, en el último número de junio-julio seguimos igual, y con la misma 'línea editorial' y fotográfica, tal y como puede verse en el enlace que nos proporciona la página web del Ayuntamiento de Getafe, que está ilustrada con una única fotografía... ¿adivinan de quién?





lunes, 16 de julio de 2012

Pase de página

No es muy frecuente. En realidad, es la primera vez que veo una publicidad con pase de página, lo que por un lado está bien, o muy bien, visto desde el lado oscuro de una crisis que no sólo no termina sino que parece ir a más, a peor; y por otro lado ¿es del todo correcto?, por aquello de separar información y publicidad, de darles un tratamiento diferenciado. Porque hasta ahora, sinceramente, yo no había visto un pase de página en una publicidad.



Apareció la semana pasada en la portada del diario El País, el jueves 12 de julio, el mismo día en el que precisamente el presidente del Gobierno anunció el mayor recorte de gasto público y a la vez la mayor subida de impuestos no de la etapa democrática, como informa esta primera página, sino posiblemente de toda la historia de nuestro país (es imposible que haya habido antes un recorte así, al menos en términos de cifras absolutas, entre otras cosas porque el tamaño de nuestra economía nunca ha sido como el actual). Y eso que, además, nuestro presidente ocultó al Parlamento y a todos los españoles algunas "sorpresas" más, práctica ya habitual en Mariano Rajoy, sorpresas que tuvimos que "descubrir" este último sábado cuando fueron publicadas en el BOE (Boletín Oficial del Estado). La "letra pequeña", ya saben, que cada vez se usa más. Combinada con la #neolengua que nos insiste en que en España no ha habido rescate y que por consiguiente no hay condiciones, ni recortes... sólo reformas.

Pero no nos distraigamos con la aburrida política, hablábamos de publicidad, tan necesaria para el negocio de los periódicos impresos y tan escasa que lo último sería ponernos ahora exquisitos. Bienvenida sea, ¿incluso con pase de página? Sí, absolutamente. Por cierto, por si algún lector no sabe a qué me refiero con lo del "pase de página", pues se trata de esto:


Esta es la publicidad a la que me refiero.



Y este textito en el que dice "página 5" es lo que se denomina "pase de página".

Un pequeño texto compuesto generalmente en una tipografía distinta a la del texto base y habitualmente en negrita, para destacarlo, que nos remite a otra página determinada en la que se desarrolla esta misma noticia. Sí, hasta ahora noticia.

En la primera página de un periódico todas las noticias suelen llevar este "pase de página" porque la portada es un escaparate en el que se destaca y muestra lo más importante que hay en las páginas interiores, a juicio del director. En las noticias, decíamos, no en la publicidad. Si ya ocupar una parte del "tejadillo", esa parte superior de la portada bajo la cabecera, es algo inusual para una publicidad, que además lo haga utilizando un pase de página... Y ¿qué encontramos en esa página 5 a la que nos remite este pequeño anuncio?


Pues un anuncio.

Comenzaba diciendo que la publicidad con pase de página no es muy frecuente aunque tengo que reconocer que en el seno de encajabaja se ha producido un pequeño debate sobre la cuestión de si es esta la primera vez o no. Para mí, sí lo es, porque yo no lo había visto antes, pero todo es cuestión de fijarse. Porque en cuanto prestes un poco de atención, seguro que empiezas a ver más...


En algún periódico de hoy mismo, sin ir más lejos. Por cierto, atención a las TRES noticias que publica hoy El Mundo en su primera página, imagen incluida. Por si a nuestro querido presidente del Gobierno le sirven para analizar la crisis como es debido y como es debido poner las medidas realmente oportunas. Periodismo del bueno y necesario, impreso en papel y ¿por primera vez? con un módulo de publicidad por debajo, el clásico dos por dos de portada, y con pase de página.

viernes, 13 de julio de 2012

Recortable

Hubo una época, hace ya bastantes años, en la que la mayor ilusión del verano, a parte de perder de vista el colegio e irme de vacaciones, era la llegada del calendario de Primera División. Eso significaba que el álbum de cromos estaba próximo y la visita al kiosco sería un ritual. Ese calendario venía siempre en una página del periódico que religiosamente recortaba todos los años y pegaba en la pared de la cocina. Cada jornada de Liga apuntaba los resultados y veía cómo iba mi equipo.


Foto: todocolección.net


Esta página me atrevería a decir que era la más recortada del periódico de todo el año. Un clásico que muchos utilizaban para ver contra quién les tocaba jugar ese fin de semana.

Pero con los recortes, y sobre todo con la llegada de Internet, esta página se ha hecho cada vez más rara y, sobre todo, más prescindible en los periódicos de información general. Hay poco espacio y hay que aprovecharlo para dar noticias.

Sin embargo, todavía quedan algunos para los que este tipo de páginas es la última conexión con una época que no volverá nunca. Los últimos románticos de las noches del papel. Nosotros, que estamos acostumbrados a casi todo, nos vimos un poco sorprendido cuando nos dijeron que había que meter el calendario de Primera División en la apertura de Deportes. Habían intentado que fuera en una sola página junto con el de Segunda División, pero no se podía desaprovechar tanto papel.

El calendario estaba hecho de otros años, así que sólo hubo que adaptarlo al nuevo formato del periódico para que los redactores lo picaran (adivináis a quién le tocó hacerlo). El calendario ocupaba unos tres módulos por lo que la página quedaba de esta manera. Pensamos ponerle unas tijeritas y un punteado, pero enseguida desechamos la idea. No era plan.




Pero, evidentemente, no podía quedar así. No parece una apertura, casi no parece ni una página del periódico. Nada manda y el calendario queda como tirado en la página. Además de parecer una publicidad. Queda perfecto para recortar y no perder información (excepto la página siguiente), pero es un auténtico despropósito de página. 






Le dimos vueltas al asunto, colocándolo por arriba. Tampoco. En una trama por abajo. Tampoco. O por arriba. No terminaba de funcionar. Había algo que no cuadraba. Con la página dando vueltas por la sección dimos con el problema: el calendario ocupaba demasiado espacio. Todos estábamos de acuerdo en que no tenía sentido darlo teniendo Internet a mano, pero desde la sección de Deportes se mostraban inflexibles. Había que darlo.

Así que la solución era darlo más pequeño. Y la clave nos la dio la foto. Mario sugirió probar a tres en el centro, dentro de una trama y justo debajo de la foto. Probamos. Y funcionó. 


La página está equilibrada, el calendario no ocupa demasiado espacio pero tiene la suficiente presencia en la página. Y parece una apertura. Pero tenía un inconveniente: es difícil de recortar. Aunque no importa, para eso tenemos Internet, aunque no se pueda pegar en la pared de la cocina.


martes, 10 de julio de 2012

Estas portadas de 'La Razón'

De un tiempo a este tiempo, las noches de tuiter se llenan de indignados y escandalizados enlaces a las portadas que cada jornada [nos ofrece] Marhuenda, director del periódico madrileño La Razón.


Y cada noche me niego a retuitear y a enlazarlas, a participar en la campaña de promoción gratuita que generan sus airados detractores sin pretenderlo. Por eso resulta cuando menos contradictorio que ahora escriba no un tuit sino todo un artículo sobre el asunto, con imágenes de las [...] portadas incluidas. Pero es que ya está bien, porque esta forma de actuar, como una [...] y [...] para lograr difusión como sea, o bien por una total conjunción de [...] y absoluto [...] y falta de [...], considero que hace daño a mi profesión. Al diseño periodístico. Al periodismo, pues. Como nos dijo también en tuiter sobre este tema, y dijo bien, Víctor de la Serna —destacado columnista del diario El Mundo con, entre otras, una imprescindible columna sobre medios de comunicación que os recomendamos—  "no hay otro remedio que desmarcarse lo máximo posible de eso". Así que antes de desmarcarme del todo romperé mi tozudo no querer mencionar siquiera el tema sólo en esta ocasión para señalar que, en mi opinión, estas portadas en concreto —no así el conjunto del periódico— contribuyen aún más al [...] de la prensa impresa porque, independientemente de su contenido, su diseño periodístico, hay que decirlo con toda la claridad y rotundidad necesarias, es [...].


A no ser que consideremos que como forma y contenido deben ser uno —algo que, por otro lado, repetimos siempre—, los contenidos fueran del mismo nivel [...] que tiene su diseño, el diseño de estas portadas en concreto. En tal caso, improbable porque supondría elaborar contenidos así de [...] de manera consciente, el diseño sería perfecto. Pero de contenidos, en esta ocasión, no hablamos.

También es posible que la causa esté en [...], circunstancia que sinceramente desconozco. Que [...] el propio Marhuenda, quien en primera persona se enorgullece de sus [...] portadas y las promociona desde su tuiter. Silvia Cobo se preguntaba también en tuiter una noche de éstas a propósito del tema de cada noche por lo mal que debía pasarlo el director de arte, y no supe contestarle —porque no lo sé— si el periódico en cuestión tiene o no este cargo porque en la mancheta del periódico no figura que exista. Evidentemente, a los profesionales 'obligados' a esto no se les puede reprochar o elogiar nada sino todo lo contrario, más bien solidarizarse con su delicada situación. Quien se responsabiliza de las famosas portadas dice de sí mismo ser "un hombre muy preparado", así que esperemos que se refiera con ello a disciplinas distintas a las del periodismo —creo que es doctor en derecho—, y especialmente al diseño periodístico, parte fundamental en el valor añadido de los periódicos impresos para lograr credibilidad y rigor, tal y como las propias portadas de La Razón muestran.




Estas portadas de La Razón pertenecen a lo que podríamos denominar un 'estilo' de diseño periodístico: las portadas póster, o viewspaper, como lo llaman últimamente gurúes y modernos con la simplona pretensión de que el viewspaperismo es algo moderno y divertido y rompedor y joven... Y guay. Y sí, lo es. O no. Depende de cómo se haga, pero no por el mero hecho de serlo. Lo de guay, decimos. Porque lo de moderno, basta un simple vistazo a la monumental 'Historia gráfica de la prensa diaria española' de nuestro querido Fermín Vílchez para comprobar que existe casi desde que los periódicos existen, desde que las posibilidades técnicas lo permitieron. Se trata sencillamente de hacerlo bien o no, de hacerlo de manera profesional y digna, como lo hacían en el desaparecido Público —con la excepción del maltrato tipográfico por un inexplicable abuso del track negativo, tanto en las portadas como en todos los títulos de las páginas interiores— y hacían y siguen haciendo en El Periódico de Cataluña (que combina además los dos principales estilos de diseño en un interesante híbrido, unos días más 'visual' y otros más 'textual') tal y como podemos ver en estos magníficos ejemplos:




O de hacerlo [...]... por muy viewspaper que sea:



De la misma manera que existen gradaciones en el otro 'estilo' de diseño periodístico, el que podríamos llamar 'textual', o más clásico —si de verdad creemos que el estilo 'visual' es más reciente—. Vean esta absoluta maravilla del Frankfurter Allgemeine Sonntagszeitung que algún amante del 'diseñismo' calificó del "triunfo de lo vulgar" cuando resultó premiado por la SND como periódico mejor diseñado del mundo (galardón que sólo parece merecer la pena cuando recae en algún viewspaper para una manera de entender el diseño periodístico más volcada en la decoración que en la información).


Como también se pueden hacer verdaderas [...] dentro de este denominado 'estilo textual' con el mismo [...], [...] y [...] que 'las' portadas de La Razón:



Volviendo al tema que espero no volver a tratar, el de 'estas' portadas que por supuesto seguiré sin enlazar ni retuitear, existe también la hipótesis de que nos encontremos ante el fenómeno que podríamos llamar del '[...] intencionado', o '[...] identitaria', es decir, una realización [...] como marca de la casa, lo [...] como seña de identidad. ¿Recuerdan el famoso primer fotomontaje del Huffington Post español?


Si hasta el tipo de letra parece que hubiera fallado... La voluntariosa señora Arianna Huffington triunfó —y vaya si triunfó— con un modelo de esos de "pues mi cuñao se acaba de comprar un ordenador cojonudo, nos hace gratis una página web y venga..." y ahora, con todos los medios y pudiendo contratar a los profesionales más preparados, los contrata para que hagan, precisamente, ESO mismo que hizo su 'cuñao' —es un decir, no sé si tiene 'cuñao'— y que se ha convertido en su identidad visual. Un 'amateurismo espontáneo', supuestamente espontáneo pero en realidad buscado. El Huffington Post es ASÍ. ¿Y ASÍ quiere ser La Razón?


¿No es como de [...] ajena?

Y estas portadas... ¿Por qué? ¿Es una [...]?, ¿recortes [...]?, ¿diseño [...] intencionado al servicio de un determinado contenido?, ¿la [...] como seña de identidad?, ¿una provocación [...] y fácil para conseguir a gritos frenar el progresivo descenso de ventas y difusión?... Posiblemente sea una conjunción diabólica de todos estos factores lo que hace que cada noche, de un tiempo a este tiempo, tuiter se llene de enlaces y retuiteos criticándolas y criticando durísimamente a quien las hace y promociona, poniéndolas literalmente a parir, enlaces y reuiteos que parecen buscar desesperadamente estas portadas de La Razón y a los que no voy a contribuir. Que no quiero. Que no me da la gana, coño.


PD: El presente artículo estaba escrito originalmente de otra manera, como supongo que nuestros lectores habrán advertido. Incluso se ha reescrito hasta en tres ocasiones con la ayuda inestimable de mis compañeros de blog Javier Vidal y Luis Blasco. Pero como aun así me quedaba la duda, y el temor, de que mis adjetivos e hipótesis sobre tan [...] portadas pudieran malinterpretarse, muy especialmente en el sentido de que se tomaran por una crítica hacia el trabajo de nuestros compañeros en ese periódico, circunstancia que es precisamente lo último que quisiera puesto que estoy absolutamente convencido de que estas portadas son responsabilidad exclusiva de quien de ellas se responsabiliza y las enlaza y promociona y defiende cada noche en tuiter, pues decidí finalmente que esos adjetivos y las hipótesis del porqué de estas portadas sean nuestros lectores quienes los pongan; cada uno los que quiera o estime oportunos, en sus propias pantallas.
No obstante, si algún lector especialmente curioso está interesado en leer el texto original, en cada una de sus tres versiones —de más a menos...— podríamos estudiar la manera de quedar algún día a tomar unas cañas —a costa del supuesto lector, evidentemente— para que pueda consultarlo impreso en papel. No habrá copias digitales susceptibles de difundirse por la red.


lunes, 2 de julio de 2012

Periodiquerías (XLVI)






Varsovia (Polonia, 2012) / Fran Guillén





Praia (Cabo Verde, 2011) / María Benito





Copacabana (Río de Janeiro) (Brasil, 2012) / Jaime Rodríguez






Enviadnos fotos de vuestras "periodiquerías" antes de que todas sean iguales y se llamen iPad. Fotografiad esos lugares en los que todavía se venden periódicos, y las publicaremos en esta serie. Si queréis.



Entregas anteriores de Periodiquerías:

Periodiquerías (I):
Madrid - Nueva York - Sevilla
Periodiquerías (II): Bilbao - Resistencia (Chaco-Argentina) - Múnich
Periodiquerías (III): Estambul - Praga - Nueva York
Periodiquerías (IV): Salamanca - Edimburgo - Tres Cantos (Madrid-España)
Periodiquerías (V): Lima - Bruselas - Mérida (España)
Periodiquerías (VI): Londres - París - Roma
Periodiquerías (VII): Las Vegas - Los Cristianos (Tenerife) - Alicante
Periodiquerías (VIII): Antigua (Guatemala)
Periodiquerías (IX): Berlín - Viena - Moscú
Periodiquerías (X): San Francisco - Puerto de Santa María (Cádiz) - Málaga - Newspaperman
Periodiquerías (XI): Lisboa
Periodiquerías (XII): Venecia - San Petersburgo - Osaka
Periodiquerías (XIII): Barcelona - Los Angeles - Buenos Aires
Periodiquerías (XIV): Kabale (Uganda) - Honolulu (Hawai) - Filadelfia
Periodiquerías (XV): Zaragoza - Gerona - Pamplona
Periodiquerías (XVI): Miami - Nueva Delhi - Lima
Periodiquerías (XVII): Hollywood (Los Ángeles - USA)
Periodiquerías (XVIII): Cagliari (Cerdeña - Italia) - São Paulo - Parlamento Europeo (Bruselas)
Periodiquerías (XIX): México DF - Salzburgo - Buenos Aires
Periodiquerías (XX): Milán - Punta Arenas (Chile) - Cannes
Periodiquerías (XXI): Londres
Periodiquerías (XXII): Xian (China) - Assilah (Marruecos) - Bergen (Noruega)
Periodiquerías (XXIII): Damasco - Washington - Turku (Finlandia) - ¿Monumento al lector de prensa? Tampere (Finlandia)
Periodiquerías (XXIV): El Vaticano - St. Ives (Reino Unido) - Harvard (Estados Unidos)
Periodiquerías (XXV): Denia (España) - Seúl - Nápoles
Periodiquería de la Paz (XXVI): Pekín
Periodiquerías (XXVII): Como (Italia) - Oporto - Plasencia (España)
Periodiquerías (XXVIII): Pretoria (Sudáfrica) - Manchester - Aeropuerto de Heathrow (Reino Unido)
Periodiquerías (XXIX): Guayaquil - Valladolid - Avilés
Periodiquerías (XXX): La Habana - Aeropuerto de Ezeiza (Argentina) - Getafe
Periodiquerías (XXXI): Algeciras - Zamora - Gijón
Periodiquerías (XXXII): Melbourne - Ágreda (Soria) - Oviedo
Periodiquerías (XXXIII): Maranello (Italia) - Llanes (España) - Antigua Venta de Almadrones (Km. 103 de la Autovía A-2 Madrid-Barcelona, España)
Periodiquerías (XXXIV): Oslo - Huesca - Ribadesella (España)
Periodiquería del 15-M: Periodiquería 15-M (Puerta del Sol, Madrid, España)
Periodiquerías (XXXV): Atenas - Puerto de Mazarrón (España) - Aínsa (España)
Periodiquerías (XXXVI): Béjar (España) - Valencia - Jávea (España)
Periodiquerías (XXXVII): Montegordo (Portugal)
Periodiquerías (XXXVIII): Florencia - Split (Croacia) - Kaunas (Lituania)
Periodiquerías (XXXIX): Penang (Malasia) - Liverpool - Cancún
Periodiquerías (XL): Volterra (Italia) - Son Bou (Menorca) - 'El Molino' (Albacete)
Periodiquerías (XLI): Rovinj (Croacia) - Sanlúcar de Barrameda (España) - San Juan de Alicante (España)
Periodiquerías (XLII): Teherán - Bolonia - Monza (Italia)
Periodiquerías (XLIII): Santiago de Compostela (España)
Periodiquerías (XLIV): Pola de Laviana (España) - Pisa (Italia) - Pula (Croacia)
Periodiquerías (XLV): Rangún (Birmania) - Soria - Coca (España)